El Gobierno avanza en el Congreso con su DNU para destrabar el caso de Pfizer y analiza el cupo para los vuelos

El oficialismo busca acelerar el trámite legislativo para convalidar el decreto que modifica la ley de vacunas contra el coronavirus. Se trata de un paso necesario para todos los DNU, pero en este caso sumaría una señal de mayor solidez a Pfizer, luego de una controversia de meses en torno del término “negligencia” incluido en la norma sancionada en noviembre y ahora eliminado. En paralelo, el Gobierno debe definir si mantiene las actuales restricciones, sobre todo la que limita la cantidad de personas que pueden regresar al país en vuelos internacionales.

La ministra de Salud, Carla Vizzotti; la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, y la asesora presidencial Cecilia Nicolini expusieron ayer ante la Comisión Bicameral Permanente de Trámite Legislativo sobre el último DNU. Defendieron la decisión de actuar por decreto para atender la situación de menores con graves problemas de salud que necesitan la vacuna de Pfizer.

La ley en cuestión fue aprobada hace más de siete meses y desde hace tiempo trascendió la discusión por el contrato con Pfizer. Las funcionarias explicaron que, en realidad, recién hace un mes fue aprobada esa vacuna para los casos de menores.

El oficialismo tomó la decisión política de rechazar un acuerdo con la oposición para sancionar un proyecto que modifique la ley referida. Juntos por el Cambio lo había intentado hace una semana y ayer repitió su jugada. Propuso consensuar un texto y aprobarlo en apenas dos días.

El Frente de Todos sumó las firmas necesarias para avanzar en la comisión y está en condiciones de aprobar el aval al DNU en el Senado, con mayoría propia. De hecho, alcanza con la ratificación del decreto en una sola Cámara.

Ese paso es necesario no sólo para posibles contratos con Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson, sino además para donaciones de Estados Unidos y para embarques en el marco del mecanismo Covax.

En paralelo, el Gobierno analiza el próximo decreto sobre la extensión de las restricciones. Por ahora, no cuenta con la ley que le permitiría resolver la cuestión de otra manera. El punto principal es el cupo de 600 pasajeros por día que rige para los vuelos desde el exterior.

Según algunas versiones, podría ser modificada la cifra, que provoca fuertes críticas, pero fuentes del Gobierno señalan que en ese caso, el cambio no sería significativo. La decisión debe ser tomada a más tardar el viernes próximo.