Echegaray: "Si me mandan a juicio oral, voy a hacer un show"

Con esa advertencia, Ricardo Echegaray repite en su entorno que si su frente judicial se enturbia, él intentará hablar. El argumento que esgrime es que para ejercer plenamente su derecho a la defensa, podría quedar relevado del secreto fiscal. El ex titular de la AFIP , que conoció el costado más sensible de los grandes contribuyentes durante el kirchnerismo, amenaza así con ventilar datos que podrían ser incómodos.

El ex titular del organismo recaudador elabora su estrategia legal en la causa que investiga cómo Cristóbal López llegó a adeudarle a la AFIP $8000 millones por el impuesto sobre la transferencia de los combustibles (ITC). Cercado en los últimos meses por la Justicia, es el expediente que más lo inquieta y el único caso que lo tiene procesado por su papel al frente del fisco durante la exgestión.
El juez federal Julián Ercolini procesó a Echegaray porque consideró que la AFIP, entre otras facilidades, le otorgó a Oil Combustibles más de $2000 millones en planes especiales de pago entre 2013 y 2014, «de manera irregular y en forma consistente, sistemática y deliberada».
Para defenderse, Echegaray, patrocinado por el estudio de Arslanian & Asociados, ya elaboró un informe en el que volcó unos 1800 planes de pago especiales otorgados durante su gestión. La lista es sensible e incluye desde un empresario muy cercano a Mauricio Macri hasta celebrities de la televisión y distinguidas fundaciones. Contiene, incluso, facilidades otorgadas a allegados de jueces federales.
La ley de procedimiento fiscal, en su artículo 101, indica que «los dependientes de la AFIP están obligados a mantener el más absoluto secreto de todo lo que llegue a su conocimiento en el desempeño de sus funciones», aunque incluye una salvedad «en los procesos criminales por delitos comunes» siempre y cuando «las informaciones se hallen directamente relacionadas con los hechos que se investiguen». (Fuente La Nación)