El gobierno de EE.UU recomendó que siga en ese país, la demanda contra YPF

El gobierno de EE.UU recomendó que siga en ese país, la demanda contra YPF

El gobierno de Estados Unidos expresó ante la Corte Suprema de ese país su opinión no vinculante, en contra de la petición de la Argentina, de traer a los trbunales nacionales, la demanda por la nacionalización de YPF.

Se trata del denominado «caso Petersen», en el cual, Burford Capital financia acciones legales de carácter comercial y obtiene una porción de las ganancias en los juicios exitosos.

En este caso Burford respalda al grupo Petersen (de Enrique Eskenazi), en su pelea por la nacionalización de YPF en 2012.

La causa –que podría contemplar una demanda por unos US$3000 millones– fue iniciada por el fondo Burford luego de comprar en la Justicia española los derechos para litigar, en el contexto del proceso de quiebra de las empresas Petersen Energía y Petersen Inversora.

Petersen era dueño de la cuarta parte de YPF y Repsol de España controlaba la mayoría.

El gobierno de Cristina Kirchner justificó la expropiación, diciendo que las ganancias de YPF serían invertidas para revertir la caída en la producción de gas y petróleo, que habían convertido a la Argentina en importador neto.

Tras el pronunciamiento del gobierno de Donald Trump

Fuentes oficiales dijeron a Télam que «sólo resta esperar el pronunciamiento de la Corte» aunque admitieron que el escrito presentado «es negativo» para la estrategia del país.

A comienzos de este mes, la jueza de primera instancia del Distrito Sur de Nueva York, Loretta Preska, falló en favor del pedido de la Argentina de suspender el juicio de los denominados casos Petersen y Eaton Park Capital, por la nacionalización de YPF. Publicidad

La postura de la jueza fue esperar hasta tanto la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos se expida sobre la jurisdicción en que deberá dirimirse el reclamo.

La resolución de Preska respaldó, en aquel momento, la postura argentina a pesar de que la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York, por segunda vez, en dos instancias consecutivas había dado vía libre a la magistrada para iniciar el juicio.