Pacto político y fiscal: el oficialismo anotó un primer logro legislativo y la expectativa pasa a una Cámara más difícil para el Gobierno
El Gobierno negoció durante dos meses, tejió acuerdos y finalmente logró un primer triunfo clave para su plan de gestión, en claro contraste con el fracaso que había experimentado en febrero. La llamada Ley Bases y el paquete fiscal fueron aprobados en Diputados y, aunque celebró medidamente el triunfo, el Ejecutivo mira con expectativa y cautela el escenario en el Senado, más complejo que el de la Cámara Baja para el oficialismo, y donde ya comenzaron las negociaciones.
La Ley de Bases y Puntos de Partida, con su declaración de emergencias, delegación de facultades en el Presidente, la habilitación para la privatización de empresas públicas y una reforma laboral resistida parcialmente por el sindicalismo, fue aprobada con los votos de La Libertad Avanza, el PRO -que mantiene hoy su alianza clara con el oficialismo- y la mayor parte de los bloques de la Unión Cívica Radical (UCR), Hacemos Coalición Federal, Innovación Federal y otros espacios de fuerzas provinciales.
La Cámara de Diputados también aprobó, con un acompañamiento similar, la Ley de Medidas Fiscales, Paliativas y Relevantes. Este proyecto comprende, entre otros puntos clave, la reversión del impuesto a las Ganancias, rebaja de Bienes Personales, moratoria tributaria, aduanera y de Seguridad Social, blanqueo de capitales, cambios en el régimen simplificado (con la eliminación del monotributo social), eliminación del Impuesto a la Transferencia de Inmuebles de Personas Físicas y Sucesiones Indivisas (ITI) y creación del Régimen de Transparencia Fiscal al Consumidor.
Ahora, tanto la Ley Ómnibus recortada como el paquete fiscal deberán enfrentar la prueba del Senado, donde la debilidad del Gobierno es aún mayor que en la Cámara Baja y donde, por lo tanto, está todavía más obligado a negociar con los bloques opositores. En caso de que fueran aprobadas sin cambios, ambas iniciativas se convertirían en ley; de recibir cambios, deberá regresar a Diputados, y en caso de ser rechazada obviamente el tratamiento quedará finalizado.
Y el Gobierno empezó a moverse. La vicepresidenta Victoria Villarruel y la secretaria general de Presidencia, Karina Milei, se reunieron en la Cámara Alta mientras las iniciativas todavía estaban siendo discutidas y votadas en la otra ala del Congreso. El oficialismo tiene la intención de que el debate de los proyectos comience la semana que viene.
En el Senado, la Libertad Avanza solo tiene 7 legisladores. El bloque de Unión por la Patria (UxP) tiene 33, es decir, solo cuatro menos que la mayoría simple de 37 senadores, que alcanza para bloquear y rechazar cualquier iniciativa. Para el oficialismo será clave el diálogo con los espacios que responden a los gobernadores, no solo del PRO y la UCR, sino también del peronismo y de las fuerzas provinciales.
En esta semana, corta por el feriado de este miércoles, no se esperan novedades en la Cámara Alta, donde además aguardarán las directivas del Ejecutivo para ver los pasos a seguir. Pero no se descartaban desde la semana que viene la visita del ministro del Interior, Guillermo Francos, al Senado y nuevos encuentros con mandatarios provinciales.
