Más de 7700 PyMEs venden bienes y servicios a la cadena de Oil&Gas

El dato surge de un reporte sobre PyMEs proveedoras de la cadena del petróleo y gas elaborado por el Ministerio de Desarrollo Productivo. Es un universo de empresas que emplean a más de 200.000 personas y están consolidadas en sus mercados de actividad. Una de cada diez MiPYMEs proveedoras del sector también exportan.

Unas 3.115 empresas micro, pequeñas y medianas (Mipymes) que pertenecen a la cadena de valor de la industria del petróleo y el gas recibieron asistencia por $13.200 desde la Secretaría de Pymes del Ministerio de Desarrollo Productivo, que dirige Matías Kulfas.

Así se indicó en un informe conjunto del Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI) y la Sepyme sobre pymes proveedoras, cuyos resultados fueron difundidos hoy.

«Nuestro objetivo es que cada una de las Mipymes de nuestro país, accedan a las distintas líneas de financiamiento en pos de fortalecer el crecimiento, el desarrollo y las capacidades de cada una de ellas», sostuvo el secretario del área, Guillermo Merediz.

Más de 7700 Mipymes

En total, más 7700 micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) venden bienes y servicios a la cadena de petróleo y gas y emplean a más de 200.000 personas en todo el país. Nueve de cada diez de estas empresas están consolidadas en sus mercados de actividad, con una antigüedad de más de cinco años de funcionamiento. Adicionalmente, una de cada diez de estas empresas es exportadora de bienes.

El documento destaca que la cadena de valor del petróleo y gas en Argentina está dominada por 37 grandes empresas receptoras de Factura de Crédito Electrónica MiPyME (FCEM), que compran bienes y contratan servicios de 9.957 empresas, de las cuales 7.734 son MiPyMEs empleadoras (el 77% del total). Estas MiPyMEs ocuparon a más de 220.000 trabajadores y trabajadoras en 2020.

La información utilizada para el informe surge de aquellas empresas que emitieron una Factura de Crédito Electrónica MiPyMEs desde el 06/2019 al 05/2021 a alguna de las empresas grandes que desarrollan actividades de «extracción de petróleo crudo» o «extracción de gas natural» y fue provista por la AFIP a la Secretaría de la Mediana Empresa y los Emprendedores como autoridad de aplicación del Régimen de FCEM.

Cadena de valor

Las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) son empresas con una o varias personas y su categoría se establece de acuerdo a la actividad declarada, a los montos de las ventas totales anuales o a la cantidad de empleados. En el caso de la cadena del petróleo y gas, la participación de las pequeñas (42%) y medianas empresas (17%) es más preponderante en esta cadena que en el promedio general de la economía, donde las primeras representan el 13% del total de firmas y las segundas el 3%. A la inversa, la participación de las microempresas alcanza el 37% (contra 85% en el promedio de la economía).

Según el documento, la cadena de valor del petróleo y gas en Argentina está compuesta por 37 grandes compañías, de las cuales 17 son compañías empleadoras que se localizan en las jurisdicciones de Neuquén, Santa Cruz, Chubut, Rio Negro, Mendoza y Ciudad de Buenos Aires.

Las MiPyMEs que venden bienes y servicios al sector destacan por estar consolidadas en sus mercados de actividad: 

Nueve de cada diez tienen más de 5 años de funcionamiento. “Con esta antigüedad levemente superior al promedio del universo total de MiPyMEs (85%), se puede decir que la cadena de petróleo y gas está asentada también en MiPyMEs que han desarrollado capacidades productivas y de gestión”, destaca el documento.

Además, una de cada 10 MiPyMEs empleadoras que participa de la cadena es exportadora de bienes. Se trata de 756 empresas que venden al exterior. Esta cifra es diez veces mayor a la del promedio de la economía (1%). Esto sucede como consecuencia de una mayor participación relativa de firmas de sectores transables (como la industria) y, a su vez, de la mayor productividad relativa.

En el plano laboral, los salarios en las MiPyMEs proveedoras del sector hidrocarburífero superan en un 105% a la media de las MiPyMEs. El 29% de estas empresas están lideradas por mujeres, lo que representa un porcentaje levemente menor al del universo total, donde alcanzan el 33%. “Teniendo en cuenta que las actividades del sector han sido tradicionalmente ‘masculinizadas’, el dato no es desdeñable”, destaca el documento.

Segmentadas por rubros

Entre las 7.734 MiPyMEs empleadoras, el 36,3% pertenecen a servicios empresariales (destacándose servicios de ingeniería, arquitectura, jurídicos o publicidad, entre otros), el 26,6% al sector comercio (sobresaliendo firmas dedicadas al comercio mayorista por ejemplo de maquinarias e insumos especializados, además de firmas de ventas de combustible) y el 17,9% a la industria manufacturera (destacando firmas fabricantes de productos metalmecánicos).

Además, el 7,1% son del rubro de la construcción, el 4,3% de alojamiento y gastronomía y el 3,7% de petróleo y minería (principalmente servicios de apoyo a la extracción de hidrocarburos). Finalmente, otras actividades explican el 4,1% restante.

Mipymes manufactureras

Entre las MiPyMEs que son manufactureras, más de la mitad (53%) están en subramas consideradas “intensivas en ingeniería”, entre las que sobresalen maquinarias, productos de electrónica, instrumentos de precisión y equipo de transporte no automotor (ferroviario, naval y ciclomotor, principalmente). Este porcentaje es mucho más alto que el del resto de la economía, donde la participación alcanza el 24%. Otro 12% pertenecen a subramas intensivas en químicos y metales, mientras que un 24% pertenecen a ramas “intensivas en trabajo” (como por ejemplo textiles, indumentaria, calzado, impresión, productos elaborados del metal, fundición de metales e industrias manufactureras).

“En otros términos, estos resultados muestran una fuerte conexión entre el sector hidrocarburífero y las industrias intensivas en ingeniería (como el complejo metalmecánico) y en ramas capital-intensivas como metales y químicos, y una relativamente baja conexión con ramas intensivas en trabajo (como textil, indumentaria y calzado) y, particularmente, alimentos, bebidas y tabaco, que en general son productores de bienes de consumo finales y no de bienes intermedios o de capital”, añade el informe.

Fuente: Econojournal