La oposición busca dar de baja los superpoderes

La oposición busca dar de baja los superpoderes

Sin consultar al Congreso, el Gobierno suspendió el artículo de la ley que fijaba un tope a la reasignación de partidas y aumentó ampliamente el gasto público 

Los bloques opositores de Juntos por el Cambio, Consenso Federal, el socialismo y el peronismo federal cuestionaron con dureza al Gobierno por avasallar facultades propias del Congreso. Sus principales líderes advirtieron que, con el pretexto de la pandemia de coronavirus, el gobierno de Alberto Fernández retomó una de las prácticas más cuestionadas del kirchnerismo: el manejo de los recursos presupuestarios sin límites ni control del Congreso. En efecto, en el decreto de necesidad y urgencia 457/2020, que dictó el último domingo, el Poder Ejecutivo no solo aumentó en 498.000 millones de pesos el gasto público, sino que además suspendió por este año el tope del 5% que establecía el artículo 37 de la ley de administración financiera para reasignar las partidas del presupuesto. Esto significa que, a partir de ahora, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, podrá disponer de superpoderes presupuestarios para manejar los recursos públicos a discreción.

La dirigencia de Juntos por el Cambio rechazó, tajante, esta decisión del Gobierno. “El artículo cuarto del DNU 457/20 del presidente Alberto Fernández cercena definitivamente cualquier facultad del Congreso de la Nación en materia presupuestaria. Sin límites puede disponer de las reasignaciones presupuestarias sin ninguna autorización. A todo esto seguimos sin presupuesto”, advirtió el jefe del bloque de diputados de Juntos por el Cambio, Mario Negri .

Negri, junto con los diputados Alfredo Cornejo, jefe del radicalismo, y Gustavo Menna, presentaron ayer al mediodía un proyecto de ley para dejar sin efecto los artículos del decreto que permiten al jefe de Gabinete reasignar partidas presupuestarias sin límites.

“La pandemia no puede ser una excusa para eliminar de un plumazo las instituciones de la República. Al Congreso, cuando retome las sesiones, no le van a quedar prácticamente facultades”, advirtió Cornejo, en diálogo con la nacion.

“La atribución que se le ha conferido al jefe de Gabinete implica transferirle las atribuciones del Congreso, debido a la eliminación del límite previsto en el suspendido artículo. Ahora, el jefe de Gabinete podrá reestructurar la totalidad del presupuesto. A mi modo de ver, esa atribución constituye un exceso que la torna inconstitucional”, dijo a la nacion el vicepresidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Luciano Laspina.

El legislador anticipó que, en las próximas horas, también presentará junto a Cristian Ritondo, jefe del bloque de Pro, un proyecto para dejar sin efecto la suspensión del artículo 37 de la ley de administración financiera que impuso el Gobierno por DNU.

“Digamos la verdad. El Congreso Nacional se ha convertido en una institución que funciona con carácter de excepción, en materia penal y tributaria. El abuso de los DNU lo aniquiló. Es casi lo que la realeza a las monarquías constitucionales. Una formalidad”, agregó Laspina en su cuenta de Twitter.

“El Gobierno directamente suspendió anteayer por decreto la ley de administración financiera para todo 2020 y se arrogó superpoderes presupuestarios ilimitados. Además de no tener el país presupuesto 2020, asume ahora el Presidente las facultades del Congreso”, cuestionó, por su parte, el radical Alejandro Cacace, miembro de la Comisión de Presupuesto.

Por su parte,las bancadas que integran el interbloque Federal rechazaron el decreto y advirtieron, en un comunicado, que la delegación de facultades cedida al Jefe de Gabinete en el cuestionado DNU “es una cuestión inherente al Congreso y, por lo tanto, el Poder Ejecutivo debió seguir para este tema el trámite ordinario previsto en la Constitución Nacional para la sanción de las leyes”.

Los legisladores indicaron que si bien es necesario “continuar y fortalecer las políticas de apoyo a las familias y a las empresas que el gobierno, aunque no siempre con eficacia, está ejecutando”, resulta imprescindible, en este estado de excepción, “otorgar la máxima fortaleza institucional y política a estas trascendentes decisiones”.

El último límite

En rigor, el manejo discrecional del presupuesto comenzó desde el primer día de la gestión de Alberto Fernández, cuando el Gobierno decidió prorrogar la ley del año pasado y no presentar un nuevo proyecto para este ejercicio.

Este último DNU revocó el único límite para la reasignación de las partidas presupuestarias que le imponía la ley de administración financiera, en su artículo 37, aprobada durante el gobierno de Mauricio Macri.

Ese límite fue del 7,5% para el ejercicio 2017 y el 5% para el ejercicio 2018 y siguientes, sobre el monto total aprobado por cada ley de presupuesto. Cualquier reasignación por fuera de ese límite debía pasar por el control del Congreso.

“En 2016, Cambiemos logró modificar esta situación cuando el Congreso fijó un tope del 5% del total del presupuesto para hacer reasignaciones. Lamentablemente el gobierno nacional decidió ahora volver a 2006, cuando el gobierno de Néstor Kirchner hizo sancionar la ley de superpoderes”, advirtió Negri. El principal bloque opositor difícilmente convalide este DNU cuando se discuta en la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, aunque al oficialismo no le inquieta: el decreto ya está vigente y solo el rechazo de ambas cámaras podría derogarlo. “Este decreto lleva la delegación al jefe de Gabinete del 100% del presupuesto, que es el esquema que había impuesto el kirchnerismo en 2006. Es decir, no hay más ley de presupuesto porque apruebe lo que apruebe el Congreso, el jefe de Gabinete puede cambiar todas las partidas”, apuntó el diputado radical Gustavo Menna, de la Comisión de Asuntos Constitucionales.

Fuente: La Nación