Invitación formal y temas de fondo: el Gobierno envía señales para negociar con los jefes provinciales

Invitación formal y temas de fondo: el Gobierno envía señales para negociar con los jefes provinciales

El Gobierno comenzó a dar señales para abrir el juego planteado por Javier Milei ante la Asamblea Legislativa, el viernes pasado. Luego de una reunión de funcionarios de primera línea, la Presidencia emitió un comunicado sobre la convocatoria a los jefes provinciales para buscar un entendimiento que incluya el núcleo de la frustrada Ley Omnibus y un acuerdo de alivio fiscal a los distritos. Sería el paso previo al “Pacto de Mayo”.

El llamado es para el viernes próximo, en la Casa Rosada. El comunicado destaca el “compromiso de diálogo” con los veintitrés gobernadores y el jefe de Gobierno porteño. De todos modos, existe ya un conjunto de mandatarios, alineados con el PJ kirchnerista, que adelantó el rechazo a la movida del oficialismo.

Milei puso sobre la mesa dos tipos de acuerdo diferentes. Y el modo de encararlos fue abordado en el inicio de la semana por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y los ministros Luis Caputo y Guillermo Francos.

El pacto promovido para el 25 de Mayo, en Córdoba, presenta diez puntos de fondo, que en general tienen consenso aunque en algunos casos resta precisar los contenidos. Van desde el respeto a la propiedad privada y el necesario equilibrio fiscal, hasta reformas en materia laboral, previsional y política.

El objetivo previo, para allanar el camino, es coronar una negociación para rescatar capítulos centrales de la Ley Ominbus y para avanzar con un paquete fiscal, que incluiría la revisión de Ganancias. Son cuestiones que hacen a los fondos para las provincias.

Entre los espacios más dispuestos al diálogo existen recelos sobre la convocatoria del Gobierno, sobre todo después de las cargas contra el Congreso y los mandatarios. Temen que sea una maniobra para ir después al choque y denunciar a la oposición como obstruccionista. De todos modos, la intención más generalizada es concurrir al encuentro, con apoyo a los lineamientos generales y reclamos precisos sobre coparticipación y equilibrio federal.

Las señales emitidas hasta ahora permiten suponer la asistencia de los gobernadores que mantienen la marca de JxC, la mayoría de los representantes de fuerzas provinciales y una parte del peronismo. En cambio, se descuenta el rechazo de otros jefes provinciales más afines a la dureza que impulsa el kirchnerismo.

En ese último lote se destaca Axel Kicillof, que sostiene el discurso de fuerte confrontación, y que busca imponerse además en la compleja realidad del PJ bonaerense, en disputa con Máximo Kirchner. Apuesta además a contener a buena parte de los jefes provinciales peronistas, en total nueve, aunque se perfilan algunas fisuras.