El Presidente dio otra vuelta de tuerca con el caso del festejo en Olivos y sumó un tema inesperado a la campaña

A contramano de la intención del propio Gobierno, Alberto Fernández cerró la semana con declaraciones que mantienen en agenda el tema del festejo en Olivos durante la etapa más severa de la cuarentena. El Presidente hizo su presentación ante la Justicia luego de ser  imputado, al igual que Fabiola Yañez y nueve invitados al cumpleaños de la primera dama. Y un día después, añadió declaraciones radiales en las que abundó en sus consideraciones sobre la inexistencia de delito y envió un mensaje al juez Sebastián Casanello.

Hubo otra declaración significativa.  Salió en defensa de la profesora Laura Radetich, a raíz del video de fuerte impacto mediático que la muestra discutiendo a los gritos con un alumno, al que descalifica por razones políticas. Alberto Fernández sostuvo que en realidad es bueno el debate, apenas un día después de que Nicolás Trotta criticara abiertamente a la docente. El ministro quedó así nuevamente desautorizado. La vez anterior había sido a causa de las clases presenciales.

La presentación ante la Justicia hecha por el Presidente giró, como era previsible, alrededor de distintos argumentos para sostener que no se cometió un delito con el festejo en Olivos, hace poco más de un año. Escribió que se trata de una reunión privada y que no se produjeron contagios, a la vez que destacó su obvia condición de “esencial” como jefe de Estado.

A ese escrito del día jueves, agregó una entrevista el viernes. Allí, dijo que esperaba que el juez Casanello se ajustara a consideraciones jurídicas frente a lo que, sin decirlo expresamente, desacreditó como presión de los medios.

Un día antes, desde el Gobierno se había dejado trascender que el Presidente había resuelto presentarse sin la asistencia de Gregorio Dalbón, que lo representa en la causa contra Patricia Bullrich y que lleva adelante algunas de los casos de Cristina Fernández de Kirchner. El abogado había hecho declaraciones agraviantes contra el juez y el fiscal Ramiro González.

Desde que se disparó el escándalo por el cumpleaños en la residencia presidencial, el oficialismo busca “dar vuelta la página” y concentrarse en sus lineamientos de campaña. Sin embargo, por distintas razones -declaraciones de ministros, cuestiones judiciales- sigue siendo un tema presente y de repercusión significativa.

En ese sentido, esperaban que el escrito del Presidente ante el juzgado federal le diera un corte, por lo menos hasta que la causa de algún giro importante. Las nuevas declaraciones del Presidente añadieron otro capítulo y, además, existe inquietud por la posibilidad de que exista alguna otra imagen sobre visitas a Olivos.