El Gobierno buscó dar señales de distensión interna, mientras el foco político giraba al caso de Jones Huala

El Gobierno buscó dar señales de distensión interna, mientras el foco político giraba al caso de Jones Huala

La detención de Facundo Jones Huala, líder de un grupo violento que se reivindica mapuche, sorprendió al Gobierno nacional. Se trata de un episodio que abre ahora el proceso judicial de extradición y podría abrir discusión frente al pedido que llega desde Chile. De entrada, por unas horas, alteró el foco de la política, dominado por la disputa en torno de la Justicia y la interna del oficialismo.

En ese último terreno, hubo señales de distensión, aunque siguen los reacomodamientos que exponen el quiebre entre Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner. Eduardo Wado de Pedro declaró este lunes su intención de dar por superada esta pulseada, pero al mismo tiempo trascendió otro gesto de respaldo al ministro en la provincia de Buenos Aires.

La detención del jefe de la organización Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) se produjo en la localidad de El Bolsón. Estuvo a cargo de la policía de Río Negro y generó sorpresa: Jones Huala estuvo prófugo de la Justicia chilena durante casi un año y en ese lapso circularon versiones sobre su presencia en el Sur argentino.

El gobierno de Gabriel Boric tramitó sin demoras una “alerta roja” y el pedido de captura internacional, para garantizar que sea mantenido preso de manera preventiva mientras se realiza el trámite judicial de extradición por la vía diplomática.

El caso reabrirá seguramente el debate sobre la respuesta del Gobierno a los problemas planteados en las provincias del Sur -sobre todo, Río Negro- por el accionar de grupos violentos que reclaman tierras como demanda mapuche. Existe tensión entre autoridades rionegrinas y el Ejecutivo nacional, además de algunos cruces entre oficialismo y oposición.

La detención de Jones Huala corrió otros temas políticos del escenario público. Ayer mismo, el ministro Wado de Pedro publicó algunos tuits para tratar de bajarle el tono a la interna luego del impacto que generaron los trascendidos sobre su enojo por no haber sido invitado a un encuentro con Lula da Silva y organizaciones de derechos Humanos, en la marco de la reciente cumbre de la CELAC.

Desde las cercanías del Presidente hicieron circular su satisfacción por el mensaje del ministro del Interior. En el círculo presidencial se consideró un triunfo propio esta salida, luego de que Wado de Pedro fuera criticado duramente por Victoria Tolosa Paz y Aníbal Fernández.

El titular de Interior había sido respaldado por Máximo Kirchener y otros referentes del kirchnerismo. Pero además, se informó que este martes participará de un encuentro con intendentes peronistas del GBA. Un nuevo gesto político en la interna.