Toyota rearma su oferta de alta gama

Toyota rearma su oferta de alta gama

A finales del año pasado, tras la decisión del Gobierno de reducir los impuestos internos, Toyota amplia su oferta de automóviles premium. Esa estrategia se cristalizó con la llegada de dos modelos: Camry y Land Cruiser Prado, ambos importados desde Japón.

El Camry es el referente de alta gama de la marca nipona en todo el mundo y punta de lanza de su expansión global. De hecho, en 2017 fue el vehículo de pasajeros más vendido de los Estados Unidos, por encima de los autos de firmas norteamericanas. El modelo es clave en la búsqueda de liderazgo mundial de la compañía.

Uno de los cambios más notorios respecto a la generación anterior pasa por el diseño exterior, que cortó con las líneas más sobrias. Se imprimió una mayor deportividad, siempre en la lógica de un vehículo ejecutivo por excelencia. Esto se observa en el centro de gravedad más bajo, las llantas de 18 pulgadas, la parrilla con tomas de aire más pronunciada y el nuevo formato de los faros con iluminación LED.

La gran reacción del Camry se ve mejorada por la nueva transmisión, que no muestra alteraciones en el paso de marcha. Es suave, precisa y sin patinamientos. Las ocho marchas con modo secuencial (sin levas al volante), además, le permiten contener el consumo de combustible, en valores mixtos que rondan los 13 litros cada 100 kilómetros. Consumo elevado pero bajo en comparación con otros propulsores V6.

En términos de conectividad, cuenta con navegación propia, pero sin posibilidades de conectar smartphones a través de AppleCarPlay o Android Autos. Si bien la pantalla es táctil, cuenta con una botonera a los costados para acceder a las principales funciones, incluida una función ECO para monitorear en tiempo real las maniobras que permiten reducir el consumo de combustible.

 

Fuente: Ambito.com