Empieza a regir el DNU: interrogantes en la Justicia y en el frente legislativo, sacudido también por el mega proyecto de ley

Comenzó a regir este viernes el súper DNU y se verá qué pasa en la Justicia y en el Congreso. En el ámbito legislativo el clima es intenso. Luego de lanzar críticas contra los legisladores y de advertir que la oposición deberá pagar el costo político ante la sociedad en caso de rechazar los planes del nuevo gobierno, Javier Milei envió un mega proyecto al Congreso nacional que incluye, entre otras cosas, reformas en materia económica, tributaria, electoral, social, penal, energética, educativa, de seguridad y de defensa.

El DNU resultó también un argumento para que la CGT decidiera un paro, después de cuatro años sin medidas semejantes. La convocatoria es para el 24 de enero, por 12 horas y con marcha en las calles.

Todavía es un interrogante qué puede pasar con el decreto en el Congreso. No está claro cuando sería integrada la bicameral que debe tratar el tema.

En paralelo, empiezan a perfilarse posiciones frente al mega proyecto. El paquete de reformas también incluye una amplia delegación de facultades legislativas al Presidente. La oposición dura, del PJ-K, ya anticipó rechazo total. Mientras que en los bloques más «colaborativos», por otra parte, molestó especialmente este último punto, que para algunos supondría el cierre del Congreso, y las críticas presidenciales a todos los legisladores, parte del plan libertario de enemistar con «la gente» incluso a los sectores que mostraron predisposición para acompañar leyes en el parlamento.

El proyecto se denomina «Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos» y fue entregado este miércoles por el ministro del Interior, Guillermo Francos, al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem. El texto, de 664 artículos desplegados a lo largo de 351 páginas, contiene una amplia reforma electoral, cambios impositivos, un blanqueo, más retenciones, más límites a las protestas y consecuencias legales para quienes corten calles, así como mayores penas por intimidación o resistencia a la autoridad y mayor amplitud al criterio de «legítima defensa». Declara la emergencia pública hasta el 31 de diciembre de 2025, prorrogable por dos años a simple criterio del Ejecutivo, habilita al Gobierno a privatizar las empresas estatales y suspende la ley de movilidad jubilatoria.

Vale recordar que La Libertad Avanza está en minoría en ambas cámaras y deberá necesariamente negociar con los demás bloques para aprobar al menos una parte de todo el paquete de reformas.

Los bloques de Unión por la Patria, encabezados por José Mayans (Senado) y Germán Martínez (Diputados), se reunieron en la misma tarde del miércoles en un encuentro que incluyó a los gobernadores provinciales. «Expresamos nuestro rechazo al mega DNU 70/2023 porque claramente avasalla atribuciones del Congreso y vulnera la división de poderes y el funcionamiento de la República. Asimismo, consideramos que la denominada ley «Ómnibus» recientemente ingresada en la Cámara de Diputados ratifica la pretensión del Presidente de contar con poderes y facultades extraordinarias, que son absolutamente inconstitucionales», trasmitieron en un comunicado.

El PRO también tuvo reunión de bloque y dividió a sus diputados en ejes temáticos para analizar el mega proyecto y la semana que viene poder realizar un primer balance. La bancada dejó trascender que colaborará con el nuevo gobierno y realizará también aportes para mejorar las iniciativas. Pero lo cierto es que también hay fuerte enojo e incomodidad, luego de que Milei cuestionara a todos los legisladores sin distinción, y por el intento de forzar al Congreso a otorgarle al presidente facultades legislativas.

Ese es también el principal punto de rechazo para la UCR, que cuestiona también la suba de retenciones y la reforma electoral, y que tiene reparos ante la posibilidad de suspender la movilidad jubilatoria y otorgarle al gobierno la posibilidad de avanzar con aumentos discrecionales.

La misma posición existía en los bloques más federales ligados a gobernadores de distintas fuerzas políticas, que esperan también tener lugar en las comisiones que deberían estar conformadas en las próximas horas. El mega proyecto llegó al Congreso en un clima enrarecido y sin demasiadas certezas sobre tiempos que demorará su tratamiento o sobre qué parte de la Ley Ómnibus podría quedar en el camino.