Las sesiones de Diputados y del Senado anticipan un difícil escenario parlamentario para el nuevo presidente

Las sesiones de Diputados y del Senado anticipan un difícil escenario parlamentario para el nuevo presidente

Las sesiones del jueves en Diputados y el Senado dieron un anticipo de lo que será el Congreso en los próximos meses. Tras el nombramiento de las nuevas autoridades de la Cámara Baja, con Martín Menem como el nuevo presidente que deberá negociar para hacer avanzar los proyecto de ley que envíe el Gobierno de Javier Milei, se produjo un duro enfrentamiento a la hora de definir la metodología para la designación de los miembros de las comisiones que trabajarán durante el verano. Sin Cristina Kirchner presente, la Cámara Alta -donde La Libertad Avanza llega más débil- también tomó juramento a los nuevos legisladores, pero el nuevo oficialismo no logró imponer la designación de las autoridades ni de la presidencia provisional del Senado, que quedó vacante hasta la próxima sesión.

En Diputados, la pelea por las comisiones tuvo como trasfondo las tensiones que existen entre los partidos que conformaban Juntos por el Cambio. Mientras se va gestando tras bambalinas un nuevo espacio de coordinación entre la UCR, Cambio Federal (nuevo bloque con Miguel Pichetto, Emilio Monzó, Ricardo López Murphy y Margarita Stolbizer alineado con los gobernadores) y la Coalición Cívica, que de confirmarse superaría al PRO en cantidad de integrantes, el presidente del bloque amarillo -también atravesado por divisiones internas-, Cristian Ritondo, se movió rápido para acordar con su par de Unión por la Patria, Germán Martínez, un mecanismo para no quedar desdibujado en el reparto de los lugares en las comisiones.

El pedido del nuevo presidente de la bancada UCR, Rodrigo de Loredo, y de su par de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, era que la proporcionalidad en la distribución de los lugares en las comisiones se definiera con arreglo a la representatividad de «los grupos de bloques» y no de los bloques por separado. Esto relegado al PRO como tercera minoría, y habría puesto al grupo de bloques «UCR+CF+CC» por delante y con mayor peso potencial en las comisiones.

Más allá de la discusión reglamentaria, la disputa cargó de tensión la sesión, que por momentos amagó con escapársele de las manos al nuevo presidente libertario de la Cámara. Unión por la Patria -que con un centenar de diputados será primera minoría- marcó la cancha, obligó a un cuarto intermedio y finalmente, con el PRO comandado por Ritondo, empujaron a La Libertad Avanza a una votación para imponer su postura.

Del otro lado del congreso, la sesión en el Senado fue más breve y más ordenada, pero también dejó algunas señales sobre el futuro parlamentario. El Frente de Todos/Unión por la Patria, que también será primera minoría en la Cámara Alta, a tan solo 4 senadores del quorum, aprobó las renuncias de las actuales autoridades de la Cámara, incluida la de la presidenta provisional Claudia Ledesma Abdala de Zamora, pero no dio acuerdo para que se vote a su sucesor elegido por la Liertad Avanza, que deberá esperar al menos a la próxima sesión para dar la discusión.

Javier Milei asumirá el domingo. El nuevo gobierno libertario tuvo una primera muestra del escenario parlamentario que enfrentará desde el 10 de diciembre.