La interna de JxC se tensa en el Congreso y suma otro capítulo crítico a las señales de la política

En apenas una semana -el martes próximo, como máximo-, los diputados de Juntos por el Cambio deberán resolver el capítulo más visible de sus internas: la disputa por las autoridades de los bloques en la Cámara baja. La pelea central está planteada en la bancada de la UCR, pero su definición terminará impactando en todo el interbloque opositor. Es también un dato central para las negociaciones que buscaría empujar el oficialismo, sumergido en sus propias tensiones domésticas.

El principal conflicto estalló por la amenaza de constituir un nuevo bloque que hizo un sector del radicalismo. Nadie habla de romper la unidad de JxC, sino de crear una nueva bancada en el interior del interbloque, que hasta ahora viene presidiendo el radical Mario Negri y que el PRO buscaría reemplazar.

Negri es también el titular del bloque radical. Luego de su derrota en las PASO de JxC en Córdoba, un conjunto liderado por el diputado Emiliano Yacobitti y el senador Martín Lousteau, con respaldo del legendario Enrique Nosiglia, lanzó una ofensiva para ocupar la presidencia de la bancada.

Sin embargo, Negri logró reunir el apoyo de 27 de los 45 diputados que integrarán el bloque radical a partir del 10 de diciembre y propuso conformar una mesa con el sector de Yacobitti. La primera respuesta fue una amenaza de fractura.

La disputa involucra a los dirigentes nacionales y no sólo de la UCR. El cordobés Negri cuenta con el respaldo de los gobernadores radicales, entre ellos Gerardo Morales, que asumiría como nuevo titular del Comité Nacional. También, de la CC de Elisa Carrió. En cambio, el porteño Yacobitti contaría con el respaldo de unos 15 colegas, con algún guiño de una parte del PRO. Su juego está pensado en la elección del 2023 en la Ciudad de Buenos Aires.

En el PRO, ya está resuelta la continuidad de Cristian Ritondo al frente de la bancada de diputados. No está claro si reclamará finalmente la presidencia del interbloque, por tratarse del sector de mayor número en la Cámara baja. En el Senado, los números cuentan a favor de la UCR.

En caso de complicarse el cuadro por la interna radical, ya se maneja la hipótesis de designar un jefe del interbloque de JxC de perfil negociador que articule los consensos de la principal fuerza opositora.

Los próximos días serán decisivos. El único punto que nadie discute es la unidad del interbloque. Es una señal mínima hacia la sociedad, que asiste a las disputas de las distintas fuerzas políticas en medio de la incertidumbre por la crisis económica y social.