Guerra de Préstamos: Las Fintech ofrecen hasta $150.000 para competir con los Bancos

EL ENGORROSO PROCESO DE PEDIR UN CRÉDITO ENCONTRÓ EN LOS CELULARES A SU NÉMESIS PERFECTA. RIGUROSIDAD EN EL SCORING Y RAPIDEZ EN EL OTORGAMIENTO DE SUMAS DE HASTA $150.000, LAS CLAVES PARA ENTENDER SU ADOPCIÓN.

Las metodologías de evaluación — también conocidas como scoring— marcan las fronteras del crédito, dejando fuera a una buena parte de la sociedad que, según estándares tradicionales, no califica para el otorgamiento de un crédito. Así, hoy solo 22,7 por ciento de los argentinos acceden a sumas de dinero para potenciar su emprendimiento según el informe Findex del Banco Mundial. 6 por ciento de ellos ni siquiera lo hizo a través de una institución bancaria sino que se refugiaron en el famoso “friends and family” para capitalizarse.
Para el sector privado también son malas las noticias. La relación préstamos-PBI del país es baja, si se lo compara con sus pares regionales —en Brasil y Bolivia superan el 60 por ciento, por ejemplo, y Chile supera el promedio, por encima del 110 por ciento— y también globales. Para las Pyme —que son 95 por ciento de las empresas del país, dan 60 por ciento del empleo y generan 44 por ciento del PBI local, según datos de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA)— es especialmente preocupante. En esta tierra arrasada en la que las fintech vieron el potencial para desarrollar el vertical de Lending: hay necesidad de préstamos y pocos que estén dispuestos a tomar los riesgos.
26% de las fintech locales se dedican al rubro de Préstamos
La autoridad monetaria —el BCRA— preparó el terreno para que las fintech sean un jugador relevante: mientras no tomen depósitos, las actividades de Lending pueden realizarse a través de un fideicomiso o, directamente, Peer-To-Peer, en el segmento de crowdsourcing. Así, 26 por ciento de las fintech locales se dedican al rubro de Préstamos, casi un empate técnico con Pagos, una categoría que, históricamente, tuvo más desarrollo por su conexión con el e-Commerce.
Así, las viejas financieras —que se dedicaban a prestar capital propio y no dinero de terceros—utilizan la tecnología para unir a quienes quieren un préstamo de quienes están dispuestos a entregar capital a cambio de un interés. Pero con dos diferenciales: la simplicidad del proceso y la mayor inclusión de clientes no bancarios mediante scoring diferenciales, ayudados por Big Data.

Jugadores claves del sector

Afluenta
Bondarea
Wayniloans
Moon
Mr Presta
Credility
Moni
Findo
First Circle
Siembro
Pago Rural
Wenance
Wuabi
Ideame
Crowdium
Sesocio

Una cuestión de datos

Tradicionalmente, los bancos y otras entidades financieras dependen de mecanismos tediosos y lentos para realizar la evaluación crediticia de una persona o negocio. Esto concluye en largos meses de espera que con suerte se reducen a 90 días y sin ella la espera del resultado puede extenderse hasta los 180 días. A esto se le suman casos cuyas características imposibilitan su calificación y que cada vez son menos excepcionales y más comunes. Los nuevos emprendimientos con menos de un año de  trayectoria, las startups y las personas que aún no tienen una cuenta bancaria enfrentan un panorama más complicado, por ejemplo. Examinados con herramientas del pasado, son miles los emprendedores que no pueden obtener un préstamo aun cuando sus negocios prometen solvencia.
El accionar de las entidades tradicionales dejó un hueco. Si no había forma de evaluar correctamente a estas personas y empresas era cuestión de inventarla. Hoy, con la inmensa cantidad de datos disponibles, saber quién es una persona toma otra dimensión y las nuevas fintech tienen en cuenta otras características para decidir si una persona tiene capacidad de pago. Así nacieron sistemas de scoring sui géneris, desarrollados ad hoc por cada fintech, para determinar qué significa ser “un buen pagador”.
Findo, por ejemplo, optó por aprovechar los smartphones. “Nos enfocamos en el segmento que hoy no tiene acceso a servicios financieros. Desarrollamos un modelo estadístico a partir de 750 variables para poder predecir el desempeño sin recurrir a los bureaus crediticios tradicionales”, explica Diego Varela, cofundador de la empresa que se especializa en aplicar Big Data para crear modelos de scoring. Hoy, a través de su aplicación móvil, otorgan préstamos de entre $5.000 y $10.000 a tasas que van desde el 69 por ciento hasta el 89 por ciento.
«A diferencia de un banco, adquirimos clientes de todo tipo porque lo hacemos únicamente por internet» – Juan Pablo Bruzzo, cofundador de Moni
Juan Pablo Bruzzo, uno de los cofundadores de la financiera todoterreno Moni —con experiencia en DineroMail y DeRemate.com—, desarrolló un modelo similar en aras de ampliar su portfolio de clientes. Hacen hincapié en atender a un segmento olvidado por las grandes entidades de préstamos. “A diferencia de un banco, adquirimos clientes de todo tipo porque lo hacemos únicamente por internet. El desafío es entender quién es quién para darle la mejor oferta a cada uno”, cuenta Juan Pablo Bruzzo, uno de los cofundadores de Moni.
Credility, cuyo foco son los créditos para empresas, desarrolló un modelo híbrido que complementa la información de los bureau con datos de las distintas redes sociales e información de plataformas que puedan brindar indicadores del negocio de sus clientes como MercadoLibre y PayPal. Así, lograron reducir el tiempo que tardan en evaluar a un cliente nuevo a 48 horas. “LinkedIn es un excelente lugar para recopilar datos sobre el nivel educativo y el trabajo de una persona”, reconoce el fundador de la compañía, Federico Gómez Romero. “Las nuevas empresas son más abiertas y poder ver quiénes trabajan en ellas nos permite evaluarlas con mayor precisión”, detalla. La empresa, nacida en 2016, entregó su primer crédito en septiembre del año pasado. Uno de los logros de su CTO, Juan Carlos Christensen, es la integración con el sistema de AFIP que les brinda la facturación de las empresas en tiempo real, un dato clave a la hora de calificarlas. “La dificultad que tienen los bancos para evaluar a las empresas es un problema gravísimo”, destaca Gómez Romero.
«Las Lebac hacen que todo lo que esté por fuera sea más caro, pero las fintech compensan con su velocidad» – Federico Gómez Romero, fundador de Credility
Por ahora es la instantaneidad y no la tasa lo que hace atractiva a las fintech del segmento. “Queda una brecha porque las Lebac hacen que todo lo que esté por fuera de ese sistema sea más caro. Lo que sí, las fintech compensan con su velocidad”, aclara Gómez Romero. “Sin los préstamos rápidos, la nueva Ley de Emprendedores, que permite crear una SRL en 24 horas, se queda a mitad de camino”, dice.
Para Alejandro Muszak, el CEO de Wenance, una empresa de servicios financieros con más de 20 años de trayectoria, lo digital permite dar un tiempo de respuesta que cumple con una expectativa que antes no estaba satisfecha. “Dar una respuesta en menos de 10 segundos es algo que antes no existía. Y a esto se le suma que operamos las 24 horas del día, todos los días, en todo el país.”
 

Sin depósitos, sin problemas

La única diferencia entre los bancos y las fintech —lo destaca el BCRA— es la capacidad de los primeros de tomar depósitos y, por ende, de ser regulados por la entidad monetaria. En el segmento de Préstamos este dato se vuelve especialmente relevante: ¿de dónde sacan las empresas los fondos para prestar?
Las respuestas varían. La mayoría se fondeó con inversiones “off balance”, externas. Algunas recurrieron a fondos locales e internacionales para capitalizarse pero otras buscaron directamente a las partes interesadas. Bondarea, por ejemplo, se dedicaba al manejo de finanzas, pero vieron que los préstamos podían ser un buen complemento e implementaron una plataforma para conectar a los que quieren tomar un crédito con quienes desean otorgarlo, convirtiéndose así en mediadores tecnológicos y gestores de un mercado de préstamos. “Notamos el interés de las personas por prestarles a otros particulares pero no tenían una vía legal de hacerlo en la Argentina. Entonces desarrollamos un mecanismo para expresar esa voluntad de préstamo y realizarlo. Nos dedicamos a conectar las dos puntas, facilitamos todo, pero no ponemos la plata”, sintetiza su director, Antonio Zavalía.
En su plataforma, gran parte del proceso está automatizado y todo se hace online a través de transferencias bancarias. Cada prestamista ofrece una cantidad de dinero a una determinada tasa y si el préstamo requiere de una cantidad mayor se combina con otras ofertas. Al final de la operación, cada uno retiene su tasa individual, pero al deudor se le genera un promedio. Es el sistema de Bondarea el que hace las cuentas por ellos y organiza el movimiento de los capitales, simplificando el proceso. “Cuando empezamos, era difícil conseguir gente que quisiera prestar, pero ahora la situación se invirtió: nos cuesta encontrar buenos perfiles que estén solicitando dinero para satisfacer la oferta”, resalta el emprendedor.
En el caso de Wenance, sus fondos provienen de tres pilares fundamentales: las líneas con los bancos, fondos de inversión privados que apuestan por el modelo y, recién establecido, un fideicomiso público para emitir deuda en el mercado de capitales. “Si bien arrancamos con créditos cortos, fuimos extendiendo los plazos a medida que los clientes cumplían y hoy toman préstamos más parecidos a los de un banco, para comprar un auto o refaccionar la casa”, cuenta Muszak.

«Facilitamos todo, pero no ponemos plata» – Antonio Zabalía, director de Bondarea
Algunas fintech creen que el verdadero potencial del negocio está en poseer ambas cosas, la plataforma y los fondos. Credility ya está trabajando para ofrecer sus propios créditos. “Queremos pasar de un modelo de marketplace a uno donde los fondos salen de Credility. Con esto vamos a poder crecer aún más rápido y tener el control punta a punta”, explica su CEO.
En el mientras tanto, la mayoría trabaja con plazos cortos que van desde los 30 días hasta los seis meses. Bruzzo explicó que de esta forma pueden probar prestarles a más personas y maximizar, así, la información que recolectan. “Los plazos cortos permiten prestarle a más gente y generar historial crediticio. Lo más importante es tener datos para mejorar el scoring y automatizarlo. Cuanto más prestás, más aprendés”, afirma.
Los principales desarrollos tecnológicos en la categoría se basan en nuevos sistemas de evaluación crediticia que permiten calificar a más personas en menos tiempo pero,  si bien Wenance tiene alianzas con Roela de Córdoba y MásVentas de Salta para la implementación de sus respectivas plataformas digitales y Findo también desarrolla plataformas de scoring para terceros, no son sus principales productos. En vez de optar por un modelo de SaaS, que ofrece soluciones en software como un servicio y cobra por ello a través de una tarifa plana o en base a su uso, el sector se inclinó por monetizar sus innovaciones ofreciendo sus propios créditos. Para ello, sumaron una capa de usabilidad, ya sea un sitio web o una aplicación móvil, y salieron a buscar a sus propios clientes por internet.
Estas apuestas dieron sus frutos otorgando a las empresas del sector cierta autonomía de la cual no gozarían en su mero rol de proveedores. Sin embargo, todavía quedan problemas por resolver: las altas tasas de interés vuelven a las fintech de Lending vuelve poco competitivas respecto de los bancos, por ejemplo, algo que podría resolverse con mejor tecnología. Los sistemas que recolectan y procesan los datos pueden perfeccionarse mediante mejores algoritmos para bajar las tasas de morosidad que pueden ser más altas que en el sistema bancario tradicional, usualmente más conservador. Su potencialidad está, justamente, en aquello que les permitió tener un lugar en el mercado: la tecnología.

¿Por qué es importante?

El acceso al crédito en la Argentina está muy por debajo de la región y esto impacta de forma negativa en su economía, especialmente por las Pyme, que representan el 60 por ciento del empleo y no logran financiarse.
Novedad: los desarrollos tecnológicos en materia de scoring permiten que más personas accedan a créditos y que puedan ser calificados en cuestión de minutos. También implementaron plataformas que operan completamente online, todo el día, todos los días; están disponibles cuando el cliente lo necesita.