En medio de fuertes críticas del Gobierno los bancos aceleran créditos blandos

– Fernández y Kicillof cargaron duro contra el sector. Aseguraron que «en el peor de los casos», los bancos «especulan contra el propio Estado»

El presidente de la Nación, Alberto Fernández, y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, volvieron a poner este miércoles el foco de las críticas sobre los bancos privados, en un momento en el que desde el Gobierno vienen reclamándole al sector que «ponga el hombro» para ayudar a las empresas, especialmente a las pymes, a sobrellevar la difícil situación económica que están atravesando a causa de la pandemia y el parate en la actividad que generó el aislamiento obligatorio. El objetivo de fondo es que se logre garantizar el pago de sueldos, con un cadena comercial que en muchos casos ya se rompió.

Pequeños y medianos empresarios se quejan de que el acceso a los créditos con tasas de 24%, impulsados por el Banco Central, se ve demorado e incluso en algunos casos imposibilitado por la poca flexibilidad de muchas entidades y el tiempo que se toman para evaluar las carpetas.

Desde el sector bancario privado aseguran que el otorgamiento está marchando a buen ritmo y que comenzó a tener mayor fluidez una vez solucionado el tema de los avales que brinda el Estado a través del Fogar. El 1 de abril el Gobierno asignó $30.000 millones al Fondo de Garantías Argentino (Fogar) para ayudar a muchas pymes cuyo récord crediticio se vio perjudicado a causa de la crisis, a poder acceder a las nuevas líneas de financiamiento a tasas más bajas.

Puertas adentro del Banco Central señalan que existe diálogo diario con las entidades para evacuar dudas, pedirles que aceleren los desembolsos y evaluar la evolución de las distintas líneas. Respecto a este último punto, prevén que los números comiencen a mostrar un incremento de los créditos blandos más marcado a partir de la próxima semana.

Este miércoles Banco Galicia indicó que, desde el estallido de la pandemia, lleva otorgados a sus clientes Pymes más de $8.600 millones para el financiamiento de capital de trabajo, pago de haberes, acuerdos y pago de cheque diferido, a tasas por debajo de las del mercado.

El lunes Banco Santander informó que desde la semana pasada, cuando puso a disposición de las MiPyMEs créditos al 24% anual para el pago de salarios por un total de $16.000 millones, ya otorgó $2.000 millones (un 13% del total) y comprometió otros $7.600 millones. Este monto se suma a los $726 millones desembolsados por la entidad en créditos a hospitales, sanatorios y clínicas, a la tasa especial del 24%

Los datos de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA), que agrupa a las entidades extranjeras que operan en el país, muestran que en el arranque de esta semana el monto colocado en créditos con tasa del 24% por el conjunto de sus representados llegaba a $5.852 millones. El número se fue acelerando en los últimos días y la perspectiva desde la entidad es que la colocación «va a funcionar bien».

Alberto Fernández y Axel Kicillof volvieron a apuntar contra los bancos privados este miércoles. «Los bancos no le prestaban al Estado, le prestaban al Banco Central solo para una especulación. Si le hubieran prestado al Estado para invertir en obra pública, vivienda o rutas hubiese sido otra cosa. Le prestaron al Banco Central para garantizarse rentabilidades enormes. El Estado Nacional no disfrutó de un centavo», indicó el presidente durante la presentación de la cuenta DNI, la app desarrollada por Banco Provincia que permite realizar distintas operaciones bancarias sin la necesidad de contar con una cuenta tradicional.

Más duro aún, el gobernador bonaerense señaló: «El papel del sector financiero es contribuir al crecimiento de la economía. Es un gran vehículo para empujar el carro de la demanda y la inversión. Pero puede haber una anomalía, cuando reciben plata de ahorro y en vez de dársela a otros para hacer algo productivo para la sociedad, se da vuelta y actúa como un mesa financiera. Especulan con el dólar, con títulos públicos, con acciones y, en peor de los casos, contra el propio Estado».

«La plata es del depositante pero queda para la intermediación. Es un espanto. El sistema se convierte en una traba y genera un negocio espúreo multimillonario en lugar de una inversión», disparó Kicillof.

Fuente: BAE