El Gobierno acelera el acuerdo con el Fondo y busca alternativas frente a sus propias tensiones en el Congreso
El Gobierno busca definir en los próximos días el acuerdo con el FMI. Y al mismo tiempo, trata de encontrar alternativas para evitar que la propia interna del oficialismo complique el trámite en el Congreso. Ese paso es considerado crucial desde el punto de vista político. Luego sería el turno del directorio del organismo internacional.
Voceros de la Casa Rosada y de Economía difundieron que están “muy avanzadas” las tratativas con el staff técnico del Fondo. Y dejaron trascender que ese clima dominó los encuentros que el Presidente mantuvo el fin de semana y este lunes con funcionarios del área económica. En paralelo, circularon versiones sobre la tensión en el Congreso y los caminos que se exploran para allanar el camino al entendimiento sobre la deuda.
El Presidente estuvo reunido el domingo con el ministro Martín Guzmán, con el titular del BCRA, Miguel Angel Pesce, y con la secretaría de Legal y Técnica, Vilma Ibarra. Allí se analizó la marcha de las negociaciones y también, según se difundió, el modo de resolver la cuestión legislativa. Ayer, la reunión sumó a otros miembros del área económica y a funcionarios políticos, como el jefe de Gabinete, Juan Manzur.
Una idea en análisis apunta a lograr un aval amplio a las tratativas con el FMI, pero sin plantear el respaldo explícito a los puntos que finalmente incluya el memorándum de entendimiento. Es una vía con grises, porque la ley impulsada hace apenas un año dispone que sea tratado el acuerdo concreto.
Por lo pronto, desde el bloque oficialista en el Senado hicieron saber al Ejecutivo que sería conveniente que el trámite sea iniciado en Diputados y no en el Senado. La intención de comenzar por la Cámara alta fue difundida desde la Casa Rosada y el kirchnerismo la interpretó como una presión frente al silencio impuesto por Cristina Fernández de Kirchner.
Ayer mismo, el jefe del bloque de senadores oficialistas, el formoseño José Mayans, dijo que recién podría ser fijada la posición de la bancada cuando reciban un “informe completo” con el “detalle” del acuerdo.
Ministros cercanos al Presidente estuvieron sondeando el clima en la Cámara alta. Según trascendió, el principal contacto no es la autoridad del bloque, sino un sector que viene expresando disconformidad con el manejo de CFK, aunque hasta ahora sin señales de ruptura. En esa línea se inscriben el entrerriano Eduardo Kueider, el jujeño Guillermo Snopek, el correntino Carlos Espínola y el salteño Sergio Leavy.
Frente a las trabas que se mantendrían para comenzar el trámite legislativo por el Senado, sigue abierto el interrogante sobre el modo de saldar la interna del Frente de Todos en la Cámara baja. Sergio Massa busca una alternativa, también en diálogo con la oposición.
Juntos por el Cambio ya abrió la puerta para facilitar el camino en el Congreso. La mayor dureza proviene de los “libertarios” y la izquierda. Pero el tema político para el Gobierno es encontrar una vía que amortigue el efecto del rechazo de La Cámpora, otros legisladores kirchneristas y algunos aliados.
