El blue a $1010 y se agiganta dramáticamente la brecha con el oficial

El blue a $1010 y se agiganta dramáticamente la brecha con el oficial

La brecha más alta de todo el kirchnerismo Tema del Día

El dólar cerró a $ 1.010 y el Gobierno no sabe cómo frenar la escalada, que agiganta dramáticamente la brecha con el oficial, que cotiza a $ 365,50 y hoy sólo es accesible para muy pocos importadores.

Por primera vez, el dólar blue rompió el techo simbólico de los $ 1.000 y su cotización cerró a $ 1.010. Por la incertidumbre, algunas financieras dejaron de venderlo. La disparada de los últimos días ya genera problemas en la vida cotidiana: faltan productos como repuestos de automóviles y de electrodomésticos, componentes eléctricos e insumos para procedimientos médicos.

En otros rubros, algunos incluso con alta incidencia de productos nacionales, los mayoristas y comercios prefieren dejar de vender hasta que los precios se estabilicen. Eso ocurre también en los locales dedicados a la venta de alimentos, donde se restringe la oferta porque se desconoce el precio de reposición. Los ahorristas buscan convertir a dólares el dinero que tenían en pesos, preocupados por la incertidumbre electoral.

Las empresas prevén una nueva devaluación del dólar oficial luego de las elecciones del 22 y por eso tratan de protegerse adquiriendo dólares por anticipado. La cantidad de pesos que volcó el ministro de Economía Sergio Massa en las últimas semanas para reflotar su campaña presidencial con el Plan Platita provocará un nuevo salto inflacionario, según estiman los especialistas.

A 12 días de las elecciones presidenciales, el dólar blue cruzó por primera vez la barrera de los $ 1.000, en una carrera que tiene final abierto.

En medio de la tensión económica y la incertidumbre creciente, la corrida cambiaria tuvo como telón de fondo los cruces entre los candidatos presidenciales que se culpan entre sí por la escalada de la divisa que empuja los precios al alza y deteriora aún más los salarios.

Desde el Gobierno responsabilizan a Javier Milei, que el lunes había exhortado a los argentinos abandonar los plazos fijos en pesos como parte de su estrategia para impulsar la dolarización.

Las críticas a Milei llegaron desde distintos espacios políticos y el libertario busco despegarse de la corrida -el blue subió 65 pesos en el día de ayer y llegó a tocar los $ 1.045 para luego ceder a $ 1.010- con el argumento de que su postura de huir del peso es algo que viene «diciendo hace años».

«Somos el único espacio político con un plan concreto para evitar la hiperinflación. Hay que eliminar el Banco Central, rescatando Leliqs y base monetaria; reducir fuertemente el gasto público, bajar impuestos, desregular y abrir la economía», escribió Milei en X.

A la vez apuntó contra el Gobierno y la emisión monetaria. «El gobierno kirchnerista de Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Sergio Massa debe hacerse cargo del descalabro económico que han producido. Emitir a mansalva para financiar un gasto público exorbitante con el que los Insaurralde de la vida pagan su vida de monarcas tiene consecuencias y las estamos pagando todos los argentinos de bien.

Por su parte, Patricia Bullrich, candidata presidencial de Juntos por el Cambio, señaló que «Entre el pirómano de Massa, que nos está llevando a la hiperinflación, y la irresponsabilidad de Milei, que fomenta la corrida cambiaria, están los argentinos angustiados por el presente y el futuro». De ese modo también se sumó a la estampida del dólar como un eje de campaña.

«4 ó 5 vivos que están jugando al arbitraje»

El ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa buscó desligarse del tema culpando de la suba del dólar a «4 ó 5 vivos que están jugando al arbitraje», a los que no identificó, aunque prometió que de aquí al 10 de diciembre se concentrará en trabajar para «verlos en cana», según remarcó en un almuerzo con empresarios en la Cámara Argentina de Comercio.

Las palabras de Massa llegaron horas después de que el Gobierno anunciara una nueva ronda de operativos en las casas de cambio de la City, en otro intento por ponerle freno al informal. Pero a diferencia de lo que ocurrió la semana pasada, cuando las intervenciones dejaron al mercado sin precio, esta vez el blue siguió subiendo.

Ante este escenario, en los despachos oficiales aumenta la inquietud de que la corrida cambiaria se traslade hacia los bancos y que del desarme de depósitos se pase a una fase más dura, la del retiro de fondos de las cuentas bancarias.

En ese clima, las entidades que representan a los bancos unificaron el discurso y salieron con un comunicado común en el que piden «responsabilidad» en las declaraciones de los candidatos y remarcan la fortaleza con la que cuenta el sistema bancario.

El blue subió $ 65 ayer y llegó a tocar hasta los $ 1.045.

Milei insistió que su espacio tiene un plan para evitar la híper.

Con el blue arriba de $ 1.000, la brecha cambiaria se extendió a 188,6% y con esto fogonea las expectativas de devaluación sobre el tipo de cambio oficial, algo que el mercado espera que se produzca cuando se defina quién será el próximo presidente. Es la brecha más alta con el blue desde 2002 (ver infografía) y desde marzo de 1989 si se toma en cuenta el dólar libre

Por su parte, el dólar MEP se mantuvo prácticamente estable, en $ 845, mientras el contado con liqui salto 8,2%, a $ 953,5.

El Banco Central fue uno de las principales perdedores de esta rueda marcada por la turbulencia. Para asistir la demanda tuvo que salir a vender US$ 220 millones, el monto más fuerte para un día desde el 3 de abril de este año, cuando aún no se había cerrado el acuerdo con el Fondo Monetario y existían dudas acerca de si Massa podría hacerlo. Las reservas netas del organismo son negativas en US$ 6.200 millones.

Exportaciones de autos

Massa reaccionó anunciando ayer una unificación cambiaria que consolidó en $ 731 el precio del dólar Qatar, Netflix, turista y ahorro, lo que supuso un salto de entre el 11 y el 14% en los precios. Y puso en marcha un tipo de cambio diferencial para las exportaciones de autos.

Frente a esta escalada, la duda es si el precio actual del dólar encontró un nuevo techo o hay chances de que la embestida continúe. Pese al salto de hoy, el blue sigue estando abajo del pico que tocó en octubre del 2020, cuando llegó a $ 195, lo que a valores de hoy equivale a $ 1126. Aquella vez el informal bajó con fuerza después de ese overshooting. Pero no había elecciones presidenciales por delante ni expectativas tan marcadas de que se viene una corrección en el dólar oficial.

Fuente: Clarín