Del compromiso con el Club de París hasta Kicillof y Vidal: todo es considerado ya en clave electoral
El anunciado compromiso con el Club de París para evitar un nuevo default de la Argentina causó alivio en el Gobierno, que lo consideró también como un dato fuerte en vista de la carrera electoral. El entendimiento -según adelantó Martín Guzmán, pero sin detalles difundidos- fue calificado como un “puente de tiempo” que amplíapor ocho meses el margen de las negociaciones en base a un desembolso de US$ 430 millones. Antes de que concluya ese plazo, debería ser alcanzado un acuerdo con el FMI. Pero en los dos casos, el Gobierno tiene como objetivo postergar todo hasta después de las elecciones de octubre.
El entendimiento presentado por el ministro de Economía era un objetivo central del Gobierno, que demanda alguna salida no pare resolver sino para dilatar los plazos. Ese parece haber sido el reclamo de apoyo político a Alemania, Francia, Italia, España y Portugal, con cuyos líderes Alberto Fernández dialogó de manera directa o virtual.
De todos modos, el foco sigue puesto en el FMI. Y eso coloca en primera línea la relación con Estados Unidos. Fue significativo el mensaje del Departamento de Estado, que luego de un primer contacto formal con Guzmán destacó la necesidad de un marco económico sólido como compromiso del Gobierno.
En el Gobierno consideran que ese será el mayor tema poselectoral. Desde el punto de vista práctico, es además un requisito para poder reestructurar la deuda con el Club de París. Y las tensiones internas en el oficialismo son un elemento de peso en la evaluación externa.
No todos los movimientos están limitados al plano económico. En medio de las preocupaciones por la evolución de la pandemia y algunas incertidumbres sobre el plan de vacunación -ahora por las segundas dosis, en especial el segundo componente de la Sputnik V-, el oficialismo dio señales concretas de poner en marcha la campaña.
Cristina Fernández de Kirchner puso de relieve que el kirchnerismo concentrará los esfuerzos en la provincia de Buenos Aires. Axel Kicillof es la mayor expresión de esa apuesta. El gobernador mostró además que un elemento central será la ofensiva con eje María Eugenia Vidal. Ayer mismo encabezó un acto en San Fernando, junto a Sergio Massa y Sergio Berni. Acusó a su antecesora de “abandono” en todas las áreas de gestión y de “repartir sobres” para hacer propaganda.
Vidal deber resolver en estas horas dónde competirá. Pero en el caso de que finalmente decida ir como candidata en la Capital y no en la provincia de Buenos Aires, en sintonía con Horacio Rodríguez Larreta, difícilmente pueda eludir las cargas que llegarán desde La Plata.
En la oposición, la pelea en estos dos distritos expresa centralmente el conflicto entre Mauricio Macri y Horacio Rodríguez Larreta por el liderazgo de Juntos por el Cambio. La mesa nacional de JxC se reunirá nuevamente en las próximas horas y volverá a llamar a una interna ordenada, aunque por ahora las tensiones siguen en ascenso.
