Cafiero envía señales al kirchnerismo y siguieron los rumores de modificaciones en el equipo presidencial

Con la interna oficialista cada vez más desatada y en plena escalada inflacionaria, crecen los rumores en el Gobierno nacional sobre posibles cambios de Gabinete. Luego del nacimiento de su hijo, el presidente Alberto Fernández volvió a recluirse en la quinta de Olivos y desde allí dejan trascender que podrían producirse anuncios pasados los feriados de Semana Santa.

El centro de la crisis del Frente de Todos se ubica por estas horas en el Ministerio de Economía, que comanda Martín Guzmán. El elevado dato de inflación de marzo que informó el miércoles el Indec terminó de dejar en evidencia la fisura interna del área, totalmente fragmentada entre los sectores leales al Presidente y los que responden a Cristina Kirchner, donde piden la cabeza del ministro.

Mientras crecen los cruces, y la vicepresidenta le envía mensajes a Alberto Fernández en cada una de sus apariciones públicas, en el círculo cercano del Presidente le reclaman algún «gesto de autoridad», aunque no hay seguridad en la Casa Rosada de que el mandatario vaya a tomar una decisión que pueda irritar al cristinismo. Las presiones, sin embargo, existen.

El canciller Santiago Cafiero, uno de los funcionarios más cercanos a Alberto Fernández, se refirió en las últimas horas a los posibles cambios de gabinete. «El Presidente es el único imprescindible en este Ejecutivo. Todos los demás somos prescindentes» (sic), dijo el funcionario, queriendo decir «prescindibles».

Cafiero evito confirmar que en los próximos días pueda haber cambios de ministros, pero también evitó descartarlo de forma tajante: «No me corresponde a mí decirlo. Lo que sí es claro es que ningún integrante del Frente de Todos está atornillado a su cargo. Hoy los funcionarios son todos militantes y entienden que si el Presidente precisa su cargo están siempre a disposición. No sé qué va a pasar, son definiciones que tomará el Presidente”, afirmó.

El canciller «defendió» al ministro Martín Guzmán, pero también lo puso en la lista de funcionarios «prescindibles». “No veo para nada un ciclo cumplido, me parece que el Presidente sigue confiando en él y en todo caso será él quien determine, con Guzmán o con este Canciller. Si mañana precisa otra marcha, otra orientación u otro plan lo definirá él«, advirtió.

No hay certezas en el Ejecutivo sobre qué decisión tomará finalmente Alberto Fernández, y en Casa Rosada conviven las opiniones de ministros que apuestan a ir a una guerra frontal con el cristinismo, con la de los que saben que cualquier movimiento imprudente podría suponer la fractura formal de Gobierno y un horizonte muy difícil para la gestión.