Alquileres: nuevas condiciones y valores indexados al valor de la carne o la nafta premium

Alquileres: nuevas condiciones y valores indexados al valor de la carne o la nafta premium

Contratos indexados al valor de la carne o la nafta premium, sin fecha de finalización y exigencias como afuera los niños y mascotas

Desde el fin de la Ley de Alquileres, derogada por DNU, los inquilinos viven una odisea a la hora de alquilar una vivienda. A medida que crece la oferta, crecen los requisitos, algunos ya con ribetes insólitos. Pensar que el 13 de septiembre de 1907, la huelga de inquilinos se hizo para reclamar una rebaja del 30% en los alquileres, porque se llevaba el 25% de sus salarios, entre otros puntos.

En épocas donde las condiciones de alquiler se endurecen, vale recordar lo que pasó en Argentina de 1907. Los inquilinos habían intentado organizarse antes, pero no pudieron. En 1906, la Federación Obrera Regional Argentina (FORA) inició una campaña de agitación para bajar los alquileres y les pidió a los inquilinos que se organicen.

Así lo hicieron y en agosto de 1907 intensificaron los reclamos, un impuesto hizo que los propietarios aumentaran un 30% los valores y la gente se organizó para protestar. Todo comenzó en un conventillo de Ituzaingó y Bolívar, a pasos de Parque Lezama y en el barrio de La Boca, desde allí se inició la revuelta que movilizó a más de 100 inquilinatos y tuvo a 32.000 obreros en huelga.

Se fue replicando en otras provincias. Esta histórica lucha, también fue conocida como la Huelga de las Escobas, porque las mujeres salieron a la calle con escobas y con sus niños para pedir mejores condiciones para vivir, apoyadas por los obreros. Crearon un pliego de condiciones y después de tres meses de lucha consiguieron vivir mejor, tras entender que sólo unidos podían lograrlo. Lograron la rebaja y que no se les pida más de un mes de depósito para alquilar.

Las condiciones hoy son diferentes, por eso los propietarios avanzan sin freno

Carla paga $300.000 por un tres ambientes en Palermo, se le vence el contrato y ahora se va a $700.000. “El propietario ya no quiere una garantía de provincia, ahora me pide un seguro de caución. Además, recibos de sueldos que cubran como mínimo el monto de tres alquileres, algo imposible. Otra cosa que me advirtió es que el contrato no tendrá fecha de finalización porque es un acuerdo de partes”, contó angustiada la inquilina que acepta todo o se muda y empieza una nueva odisea.

Las nuevas condiciones son muy difíciles de afrontar. Antes los contratos se hacían por tres años, o dos anteriormente, ahora se hacen por tres meses, por seis, por un año y con suerte por dos años y de milagro por tres. Propietarios e inmobiliarias impulsan el seguro de caución, un costo que antes que no tenían los que alquilaban porque podían llevar un recibo de sueldo o un garante. Ahora, en muchos casos, los obligan a tener un seguro de caución.

Carla está ayudando a su amiga a encontrar un alquiler y contó: “uno de los requisitos es que presente de garantía a tres personas con recibo de sueldo y cuatro años de antigüedad, además de que su recibo duplique el alquiler. Y una regla que se repite en la mayoría de los lugares: no aceptan mascotas”.    

Sin mascotas ni niños

Entre los puntos que no se pueden negociar, muchos propietarios exigen no sólo que o haya ni gatitos ni perritos, sino que también exigen en muchos casos que no haya niños. Algo que escandalizó a los inquilinos que en 1907 salieron a la calle a defender sus derechos.

“Las condiciones son un signo de épocas van de la mano con la cultura que se impuso en la Argentina y cada uno hace lo que se le antoja sin importarle el otro. Las condiciones las fija una cadena de inmobiliarias internacional o una jubilada que tiene un departamento en Almagro porque la derrota es cultural. En diciembre pasado, se acercó una señora que trabaja de enfermera y tiene un hijo autista a plantearnos que la inmobiliaria le pedía el aguinaldo para renovarle el alquiler. Nos pedía ayuda, pero también justificaba que el dueño necesitaba un aumento, pese a que no tenía como pagarlo”, contó , Gervasio Muñoz de Inquilinos Agrupados.

Alquileres indexados por el valor de la carne o la nafta premium

En X, antes Ttwitter, la periodista Karina Niebla contó que en Olavarría “la chica de la mesa de al lado tiene indexado el alquiler al  precio de la carne”. No sólo el IPC o ICL son los índices usados. Hay otros casos donde el propietario pide indexar por el precio de la nafta más cara. No hay límites.

Hasta hace poco se veían avisos de propiedades que aclaraban que como el monto del alquiler se pedía en dólares no se indexaba, eso ya quedó en la historia, no importa la moneda, ahora varios piden aumentos.

Si bien en CABA está prohibido que las inmobiliarias cobren un mes de comisión, muchas lo hacen, e incluso lo publican en los avisos online sin ruborizarse. “En provincia de Buenos Aires, si bien la gestión del gobernador Axel Kiccilof prohibió que las inmobiliarias y propietarios cobren sellado, muchas inmobiliarias lo cobran. Otros piden un 5% de comisión, cuando se supone que no puede superar el 4% y antes quedaba claro que lo pagaban mitad y mitad propietarios e inquilinos, pero desde que Daniel Scioli pasó por la gobernación, ahora lo puede absorber uno sólo, que siempre es el inquilino”, agregaron desde Inquilinos Agrupados.

La comisión en la Ley de Alquileres era de un mes, ahora no hay límite para pedir, algunos piden dos meses, otros seis meses adelantado. “Mi amiga fue ayer a ver un departamento y le piden actualizar el precio cada tres meses y también el monto del depósito”, contó Vicky. Andrea estaba a punto de firmar su contrato y con el cambio de gobierno la dueña le pasó el valor de pesos a dólares como exigencia para renovarle.

La Justicia y los alquileres

Si alguien busca ir a la Justicia para poder alquilar en condiciones que una persona sin aumentos de sueldo constante pueda pagar se encuentra con una traba. “Es tan desproporcionado e inhumano todo que este DNU dice que si firmas un contrato en moneda extranjera solo te liberas de la obligación pagando en moneda extranjeras y los jueces no pueden revisar eso. Este DNU veda la posibilidad a los jueces de intervenir. Antes tenías una ley perfectible pero tenias una ley que te permitía denunciar el contrato y recurrir a la justicia. Ahora sos un esclavo del alquiler,  a esa situación llevaron a la gente. Un delirio, yo como abogado en mi vida vi una cuestión así”, señaló José Luis Griselli, expresidente de la Asociación en defensa de los inquilinos.

Todos coinciden que la actualización de precios que hace que “si alguien firmó un contrato de alquiler en diciembre por $300.000 mensuales en marzo pagará $500.000. Si somos muy optimistas y luego la inflación es de 15% mensual pagará $725.000”, agregaron desde Inquilinos Agrupados. En marzo o abril a más tardar, cuando comiencen a regir los primeros aumentos de los nuevos contratos de alquiler la situación se complicará.

Cuando alguien que vive en un departamento tiene que ajustarse, lo primero que deja de pagar son las expensas

“Más de 500.000 familias dejaron de pagar expensas o presentan atrasos de cualquier tipo. Una familia promedio destina más del 50% de sus ingresos al pago de alquiler y hablamos sólo de alquileres sin contar servicios asociados ni costo de vida. Esta inercia en algún momento se va a empezar a acortar por el corte de la cadena de pago. Habrá un nivel conflictivo muy serio porque las familias no podrán afrontar los gastos”, explicó Griselli.

Los requisitos para alquilar con la crisis se agravan, porque los dueños piden más garantías. Si hay oferta pero los inquilinos no pueden alquilarlos  todo se complica. Hace que aparezcan toda clase de avisos como por ejemplo un PH en el barrio de San Nicolás que exige que la inquilina sea mujer y no le permite llevar visitas y menos mascotas, reglas comunes en un hotel, no en una propiedad.

Todo esta avalado en términos sociales

“El precio del alquiler les aumenta más que los salarios pero muchos sienten que está bien que gane la lógica del mercado. Lograron que se prohíban niños para alquilar y que no sea un escándalo social, es increíble”, apuntó Gervasio Muñoz. Adriana es empleada del Estado y los aumentos a su sueldo han sido congelados, a fin de marzo vence su alquiler, su departamento de tres ambientes triplica el valor y las subas serán cada tres meses. Sabe que afrontar los nuevos valores sin aumentos será imposible. 

A la par de las subas y el aumento de las exigencias se ve cada vez más gente viviendo en la calle. Algunos hasta con su mesita de luz al lado y bolsos. “Lo primero que resigna una familia es el espacio, después el barrio y después la jurisdicción de CABA a provincia, donde está la posibilidad de encontrar algo más accesible. Luego se va a un barrio más popular, hasta quedar en situación de calle. Ese es el recorrido, crearon un terreno fértil para que eso suceda”, dijo en declaraciones radiales el extitular de la Asociación en defensa de los inquilinos.

Una bomba a punto de estallar, si no se hace nada para detenerla.

Fuente: BAE