Albero Fernández sufrió la primera derrota en una semana que pone a prueba su estrategia diplomática
El Gobierno de Alberto Fernández sufrió un nuevo revés en sus planes geopolíticos: la Corporación Andina de Fomento (CAF), un banco de desarrollo de la región que administra unos 28.000 millones de dólares, eligió al ex ministro colombiano Sergio Díaz-Granados como nuevo presidente ejecutivo, en una votación que relegó al candidato argentino Christian Asinelli, que ocupará la vicepresidencia de la entidad. Fue una primera derrota, en una semana cargada de sucesos clave de política internacional para la Argentina y una prueba para la estrategia diplomática del Gobierno.
La CAF esta integrada 17 países latinoamericanos, más España y Portugal, y 13 bancos privados, y más allá del acuerdo alcanzado el candidato argentino vio dificultades para su elección. Díaz-Granados contaba con el apoyo de países con los que recientemente la Argentina tuvo cortocircuitos diplomáticos con Brasil y Uruguay, cuyos presidentes Jair Bolsonaro y Luis Lacalle Pou difieren con la visión que tienen Fernández sobre el Mercosur.
Además, el candidato colombiano tenía el respaldo de Chile y Ecuador, mientras que Asinelli contaba con el respaldo de Bolivia, Venezuela, República Dominicana y Portugal.
El presidente Fernández quería que la Argentina tuviera la conducción de la CAF, pero su objetivo se vio obstaculizado por la oposición de sus socios del Mercosur, incluido Paraguay, que después de un período de indefinición apoyó finalmente al colombiano.
Ante la posible derrota, la Argentina buscó un acuerdo para bajar su postulación y lograr un apoyo unánime a Díaz-Granados, a cambio de obtener la vicepresidencia del organismo para Asinelli.
Este martes Alberto Fernández el único presidente de América Latina que participará de los festejos de los 100 años de la creación del Partido Comunista de China. Xi Jinping cursó la invitación. Dará un discurso que, como respaldo o alineamiento con el régimen chino, será una señal para el exterior.
Este jueves, y ya con el antecedente de la votación en la CAF, el Presidente entregará la presidencia pro tempore del Mercosur a Jair Bolsonaro, de Brasil, que también tiene una relación sumamente tensa con el presidente argentino, no sólo por su respaldo abierto a Ignacio Lula da Silva, sino por el rumbo proteccionista y cerrado con el que Fernández condujo el Mercosur.
