Preocupación del G20 por la estabilidad del petróleo

Preocupación del G20 por la estabilidad del petróleo

Los ministros de Energía de las veinte economías más industrializadas y en desarrollo se han comprometido a tener una colaboración más estrecha que garantice la estabilidad en el petróleo tras los sucesos en el golfo de Omán esta semana. Dos buques petroleros sufrieron un supuesto ataque del que Estados Unidos no tardó en acusar a Irán.

Dos buques petroleros, uno de ellos operado por una naviera japonesa, fueron evacuados este jueves tras sufrir supuestos ataques en el golfo de Omán. Estados Unidos culpó a Irán de estos ataques lo que provocó que el precio del crudo se revalorizaba en las primeras horas del jueves casi un 5 por ciento respecto al cierre del día anterior.

El ministro de Industria de Japón, Hiroshige Seko, ha informado este sábado de que sus homólogos en el grupo de los G20 están preocupados por los ataques a varios buques petroleros en el Golfo Pérsico. «Lo más importante es que tenemos un entendimiento común entre los ministros de Energía de que necesitamos trabajar juntos para lidiar con los recientes incidentes desde el punto de vista de la seguridad energética», ha señalado Seko durante una de las reuniones que los ministros de Energía y Medioambiente del G20 están manteniendo en Karuizawa este fin de semana.

«Lo mismo ocurrió en nuestras reuniones bilaterales», ha afirmado en referencia a las negociaciones con las autoridades de varios países, incluidos Arabia Saudí y Estados Unidos.

Por su parte, el ministro de Energía de Arabia Saudí, Khalid Al Falih, ha indicado a Seko en su reunión bilateral que se tomaba «muy en serio» los recientes eventos, incluido el ataque del 12 de mayo contra cuatro buques petroleros. Asimismo, ha insistido en que los últimos ataques han causado más daño que el físico a los barcos, debido a que ha debilitado la confianza global en la seguridad de los suministros de energía. «El reino está comprometido a garantizar la estabilidad del mercado global de petróleo», ha añadido.

Japón pide más pruebas a Estados Unidos

Sobre el ataque de esta semana, el Gobierno japonés ha solicitado a Estados Unidos pruebas concretas para respaldar su afirmación de que Irán está detrás de lo sucedido en el golfo de Omán.

Horas después del asalto del pasado jueves, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, acusó a Irán de los ataques sin ofrecer pruebas y posteriormente su Departamento publicó un vídeo en el que supuestamente se veía un bote patrullero iraní quitando una mina lapa sin explotar del casco del petrolero nipón Kokuka Courageous.

El Gobierno japonés sigue sin estar convencido y considera que las explicaciones de EEUU no han ayudado «a ir más allá de la especulación», según fuentes gubernamentales citadas por la agencia japonesa de noticias Kyodo. Pompeo dijo que la evaluación de EEUU se basa en «informes de inteligencia, las armas empleadas, el nivel de conocimiento necesario para ejecutar la operación, los ataques similares contra buques perpetrados por Irán recientemente y el hecho de que ningún grupo rebelde de la zona tiene los recursos para actuar con tal nivel de sofisticación», argumentos que no han convencido a Tokio.

Si tener el nivel de experiencia necesario se considera un argumento de peso para determinar que se trató de Irán, «también se aplicaría a EEUU r Israel», apuntó una fuente de Asuntos Exteriores. «Éstas no son pruebas definitivas de que se trata de Irán», insistió una fuente cercana al primer ministro, Shinzo Abe.

Una extraña coincidencia

Japón se está tomando muy en serio la investigación del ataque, que se produjo cuando Abe se encontraba reunido con el líder supremo iraní, Ali Jameneí, en Teherán.

«Los ataques han afectado gravemente a la reputación del primer ministro porque estaba tratando de ejercer de mediador entre Estados Unidos e Irán», señaló la misma fuente, que calificó al asunto como una «preocupación seria» para Tokio en el que «cometer errores a la hora de determinar los hechos es inadmisible».