Georgieva volvió a pedir un plan confiable

Georgieva volvió a pedir un plan confiable

Lo dijo su directora, Kristalina Georgieva, que volvió a pedir un plan creíble; dijo, sin embargo, que todavía no se tomó ninguna decisión sobre el planteo argentino

La directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, ayer, durante un panel de cambio climático

La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, reconoció “reservas” para recortar la tasa de interés que paga la Argentina por su deuda, pero dejó la puerta abierta al reafirmar que todavía no se ha tomado ninguna decisión al respecto, y existe respaldo para, al menos, revisar el costo de los créditos del organismo.

La ejecutiva también reafirmó el compromiso para “trabajar constructivamente” en busca un nuevo acuerdo con la Argentina para refinanciar la deuda por 44.000 millones de dólares que dejó Mauricio Macri, pero en una clara señal de la lentitud y las dificultades que envuelven a las negociaciones actuales, dijo que el Fondo y el Gobierno aún deben encontrar un programa “creíble y útil” que ayude a encarrilar la economía, una postura casi calcada de la del inicio de las discusiones, a fines de 2019.

Georgieva respondió una pregunta sobre la Argentina en su conferencia de prensa de la reunión anual del FMI y el Banco Mundial, un día después de haberse reunido aquí con el ministro de Economía, Martín Guzmán.

Tocó dos temas: la discusión por los sobrecargos a la tasa de interés del Fondo que actualmente paga la Argentina, y que el Gobierno aspira a eliminar, y los avances en la negociación entre Guzmán y el staff hacia un nuevo programa económico.

“No hemos tomado una decisión, de una forma u otra”, dijo Georgieva al referirse a los sobrecargos.

“Tuvimos una discusión con nuestro directorio en septiembre y en ese momento hubo reservas sobre congelar los recargos debido principalmente a preocupaciones sobre la solidez financiera del FMI. Pero eso no fue concluyente de una forma u otra”, dijo.

“También hubo apoyo –prosiguió– para que el Fondo haga lo que hace periódicamente, que es revisar los recargos. En ese sentido, la historia debe definirse como ‘continuará’”.

Las negociaciones entre el Gobierno y el Fondo se han estirado ya por casi dos años.

A fines de septiembre, el presidente Alberto Fernández dijo que el acuerdo ya estaba “cerrado” y solo faltaba definir el costo de la refinanciación.

Pero ayer, en un encuentro con empresarios, Fernández admitió por primera vez que se cerraría recién a principios del año próximo.

En Estados unidos descartaban desde principios de este año la posibilidad de que el acuerdo llegara antes de las elecciones legislativas.

En cámara lenta

Al hablar de las negociaciones, Georgieva reconoció también esta demora al indicar que el Fondo y la Argentina aún deben encontrar “un buen lugar” donde el programa económico sea creíble y útil, y lleve a un crecimiento sostenible, liderado por el sector privado.

“Nuestros equipos están trabajando y ese trabajo ha estado, durante el tiempo que han estado involucrados, concentrado en encontrar un camino para apoyar a la Argentina, y en que la Argentina pueda apoyarse a sí misma con políticas sólidas que sean útiles en un crecimiento liderado por el sector privado y que brinden un buen uso a los recursos públicos para enfocarlos en quienes más los necesitan”, indicó.

“El compromiso de ambas partes de trabajar de forma constructiva está ahí. Continuaremos con ese diálogo, tenemos que encontrar un buen lugar donde un programa de la Argentina sea uno creíble y útil para el pueblo argentino y podamos apoyarlo”, agregó.

La conferencia de prensa de Georgieva ocurrió dos días después de que la economista búlgara fuera ratificada al frente de este organismo internacional, luego de haber quedado involucrada en un escándalo durante su paso por el Banco Mundial.

Plena confianza en Georgieva

El lunes por la noche, y luego de ocho maratónicas reuniones, el board del Fondo decidió ratificar su “plena confianza” en Georgieva a pesar del escándalo con ramificaciones geopolíticas en el que quedó involucrada durante su gestión previa en el Banco Mundial.

El directorio llegó a esa decisión luego de determinar que la investigación de la firma de abogados WilmerHale que imputa a Georgieva de haber presionado al personal del Banco Mundial para favorecer a China “no demostró de manera concluyente” que haya actuado de manera inapropiada.

Georgieva, quien había dicho luego de que se conoció la decisión que esas acusaciones eran “infundadas”, reiteró en su conferencia su agradecimiento a los directores del FMI y dijo que era “genial” volver a enfocarse exclusivamente en su trabajo.

Pero el escándalo que la involucró dejó de todos modos daños colaterales: Estados Unidos, principal accionista del Fondo, dijo que la investigación planteó “preocupaciones y temas legítimos”, reclamó un mayor compromiso con la transparencia, la integridad y la credibilidad del Fondo, y prometió un mayor control.

Como siempre, el respaldo de la Casa Blanca será decisivo para llevar la negociación argentina a buen puerto.

Fuente: La Nación