El blue avanzo $8 acompañado de las cotizaciones de los demás dolares libres
Recalentando. Avanzó 8 pesos en la jornada, su mayor alza en más de un mes, en medio de la sostenida suba que vuelven a registrar el resto de los precios libres de la divisa
La cotización del dólar blue se disparó ayer en la City porteña, al cerrar para la venta a un precio promedio de $302, $8 o 2,7% más que el nivel de clausura del día anterior.
Registró de este modo la suba más pronunciada en más de un mes y estiró al 82% la brecha con el dólar minorista, que quedó ofrecido a $168, según el precio de venta publicado por el Banco Nación.
La nueva escalada, que es general y de la que participan el resto de los precios libres del dólar, lo dejó con la cotización nominal más alta desde el 27 de julio, cuando había cerrado a $314.
Fue en una jornada en la que los denominados «dólares financieros» también consolidaron la tendencia al alza que muestran desde que el Gobierno recortó más las licencias automáticas de importación, algo que habría derivado en más demanda de empresas hacia ellos.
El MEP
El dólar MEP cerró ofrecido en pantallas a $305,21, con un alza diaria del 1,8% en relación con los $299,84 en que cerró anteayer, con lo que también rompió el techo de $300.
El contado con liquidación (CCL) se terminó negociando a $317,37, con un alza del 2,1% en la jornada. De este modo en lo que va del mes, subieron 4% y 3,3%, respectivamente.
«El dólar blue se está despertando. Estuvo durante mucho tiempo anestesiado porque estaba el blanqueo de la construcción y, en otros casos, porque pegó un golpe la recesión. Las empresas están desarmando stocks, y como resguardo, compran dólares. Suben el dólar bolsa, el CCL y, por ende, sube el blue. Todos los dólares se van a alinear a una gran suba. Mantenemos nuestro pronóstico de un dólar a $400para fin de año», comentó el economista Salvador Di Stefano.
Según su colega Fernando Marull, la causa que explica el incremento del blue se vincula con la situación de «estrés» de la deuda en pesos.
«Asumimos que el BCRA emitirá lo que tenga que emitir para evitar un reperfilamiento de deuda. Como lo viene haciendo, y como pasó en junio. Esos pesos presionarán al dólar paralelo, y a la larga terminarán en los bancos, en forma de más Leliq. La incertidumbre sobre la deuda y la pérdida de reservas hoy son los dos factores locales que pueden hacer mover al para- lelo», destacaron en la consultora FMyA, que dirige Marull.
Adiós a la sensación de calma
Lo concreto es que se esfumó la sensación de relativa calma que se había instalado en estos mercados y sorprendía a algunos analistas.
«Realmente llama la atención que el dólar blue se mantenga en estos valores, o incluso baje, sobre todo porque las condiciones básicas siguen siendo las mismas. Hay un fuerte cepo cambiario, emisión de pesos por el pago de Leliq, muchos sobrantes de pesos en la economía y una inflación del 6-7% mensual. No se encuentran muchas explicaciones lógicas a esto. Mientras la economía se mueve al 6%, los dólares libres se mantienen quietos hace tres meses», había dicho el consultor financiero Christian Buteler, hace 10 días.
Antes de esta suba, la última marca de similares características transcurrió en las semanas posteriores a la salida de Martín Guzmán del Palacio de Hacienda, en julio pasado.
Fueron días de creciente incertidumbre en los mercados, tras la crisis de deuda en pesos de junio y la emisión del Banco Central (BCRA), entre otros tantos factores que se habían combinado entonces para ayudar a provocar una disparada de $50 en el precio del blue en los primeros 14 días de julio (+20,9%).
El otro termómetro
Ajena a esta intranquilidad cambiaria la tasa de riesgo país mantuvo una tendencia a la baja que se apoya -básicamente- en la posibilidad de que Estados Unidos ya no endurezca tanto su política monetaria.
El índice que elabora el JP Morgan, que mide la diferencia que pagan los bonos del Tesoro norteamericano frente al resto de los países, cayó a los 2379 puntos básicos, una baja del 9,4% en lo que va del mes y de 2% respecto de anteayer. Lo hizo ayudado por las mejoras del 3,9% al 4,7% que registraron en el exterior los principales bonos de la deuda argentina.
Fuente: La Nación
