Con el nuevo esquema, el agro aportará us$ 1800 millones extra

Urgido por reforzar la caja fiscal, el gobierno de Alberto Fernández apeló a la suba de retenciones a las exportaciones, al dejar de lado el esquema de $4 por dólar exportado que implementó en septiembre de 2018 el gobierno de Macri, y volver al sistema de un porcentaje. Los economistas daban por hecho que sería una de las primeras medidas ya que la recaudación por derechos de exportación se fue licuando con las devaluaciones.

En charlas informales, el gobierno de Alberto Fernández ya había advertido a los dirigentes rurales que iba a necesitar de los productores agropecuarios un aporte adicional de US$ 2 mil millones, además de los US$ 8 mil millones que cada año pone el sector por vía de las retenciones, para tapar agujeros fiscales y “meter plata en los bolsillos” de los sectores más postergados.

Pero ¿cuánto aportará esta suba de retenciones al cofre estatal? Según calculó Ezequiel de Freijo, del Instituto de Estudios Económicos y Negocios

Internacionales de la Sociedad Rural a PERFIL, “solamente lo que es por cereales y oleaginosas nos da que aportaría a la recaudación unos US$ 1.800 millones anuales”.

Pero esa no es la cifra final dado que el analista aún no estimó cuánto sumará al fisco la alícuota de 9% fijada para carnes, leche en polvo, y otros productos, porque no la tenían prevista en su escenario. Freijo también aclaró que ese monto “es una estimación teórica porque recién se está sembrando lo que se va a cosechar” y además “hay otras variables” que pueden afectar ese valor. Entre esos factores, mencionó el clima, y variaciones de precios internacionales “que pueden que esa cuenta dé más o dé menos”.

Así, explicó que “la recaudación de 1.800 millones es un escenario posible en función del cambio de las alícuotas y pensando que vas a tener un rinde promedio, que vas a cosechar todo”. Un informe de Elypsis destacó que las operaciones de exportación se aceleraron desde las PASO” ante la expectativa de un aumento de retenciones”, y “desde agosto, se encontraban por encima de su promedio mensual de la última década”.

La consultora estimó que “las mayores exportaciones de los últimos meses mejoraron la recaudación en aproximadamente 0,2% del PBI, contribuyendo a un menor déficit primario en 2019; pero esas mismas exportaciones, de no haberse acelerado, hubieran significado bajo el nuevo régimen entre 0,2% y 0,3% del PBI adicional en recaudación –que hubiera sido detraído de los ingresos del complejo agroexportador–.

Por ende, esta medida tendrá un impacto reducido en el corto plazo en términos de ingresos fiscales”. Al respecto, Freijó precisó que “en soja ya casi no hay por liquidar, mientras que la cosecha de trigo ya está vendida en 40%, y la de maíz que recién se está sembrando hay vendido un 20%”.

Diario Perfil