Tras acusación de Kulfas Adeba replicó con carga impositiva del financiamiento

Tras acusación de Kulfas Adeba replicó con carga impositiva del financiamiento

La Asociación de Bancos Argentinos (Adeba), cámara que agrupa los bancos privados de capital nacional, advirtió mediante un documento que la generalización del impuesto a los ingresos brutos y sus tasas “excesivas” hacen “ineficiente y costoso el sistema crediticio argentino” y son incompatibles con cualquier “desarrollo del crédito bancario a tasas bajas”.

La queja llegó luego de que el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, demandó a los bancos “estar al servicio de la producción” y dijo que un modelo de desarrollo productivo nacional necesita “tasas de interés acordes para producir, no para especular”, en declaraciones radiales.

La respuesta de Adeba llegó mediante una nota en la que evalúa la creciente presión que la actividad sufre por la creación de Ingresos Brutos (II.BB.) en muchos distritos.

La entidad define ese impuesto como “el colesterol que obstruye las arterias del crédito”. “Es dañino y no presenta síntomas; perjudica a los tomadores de créditos, pero ellos no lo notan porque al no aparecer discriminado, es invisible”.

La voracidad fiscal

La respuesta de los bancos nacionales apuntó a la voracidad fiscal y el impacto que tiene en el costo financiero. “Entre enero de 2019 y enero de 2021, once jurisdicciones han incrementado aun más el peso de II.BB. en el sistema financiero, ya sea incrementando directamente la alícuota o cambiando la metodología de cálculo de este impuesto”, señalaron.

“Cuando comenzó a aplicarse II.BB. a la actividad financiera, las jurisdicciones lo cobraban sobre el spread, esto es, sobre la tasa de préstamos menos la tasa de depósitos; actualmente la mayoría de los distritos gravan directamente la tasa de interés de los créditos, lo que significa un gran incremento del impuesto efectivo”, agrega el documento. Javier Bolzico, presidente de Adeba, fue concreto: “La actual carga impositiva por II.BB. sobre las financiaciones bancarias es incompatible con el desarrollo del crédito bancario a tasas bajas”, sostuvo.

“Para que el crédito sea uno de los motores de la recuperación económica, es necesario que bajen las alícuotas de II.BB. en el país. De lo contrario, la recuperación económica será más lenta de lo que podría ser”, insistió.

El II.BB.

En el informe los bancos recuerdan que “existe amplio consenso en que II.BB. sobre la actividad financiera es un impuesto altamente distorsivo, tiene efecto cascada, encarece los préstamos y atenta contra el aumento de la bancarización y la inclusión financiera”.

Para ejemplificar el impacto que este gravamen tiene sobre el precio del crédito en el país, Adeba explica que si un banco le cobra a una pyme una tasa de interés del 30% nominal anual “2,4 puntos porcentuales corresponden a II.BB. En otras palabras, sin el impuesto sobre los II.BB., ese mismo crédito podría tener una tasa del 27,6%”. Y agrega: “Así encarece este tributo al crédito de las empresas y, por consiguiente, eleva el ‘costo argentino’ de producción, restándole competitividad al país”.

Fuente: La Nación