Por la presión inflacionaria el mercado espera una FED más agresiva

Por la presión inflacionaria el mercado espera una FED más agresiva

«Los analistas de Balanz resaltaron que las preocupaciones sobre la persistencia inflacionaria, particularmente en EE.UU., y otros mercados desarrollados, y la falta de definición sobre la continuidad de Jerome Powell en la Reserva Federal, son factores de riesgos para el corto plazo»

La inflación de octubre en Estados Unidos sorprendió al alza y puso en alerta al mercado . El avance interanual de 6,2% registrado durante el décimo mes del año representó la tasa más elevada para los últimos 30 años y renovó las dudas respecto de si se trata o no de un fenómeno transitorio , como hace meses viene sosteniendo la Reserva Federal (Fed).
Este avance de los precios en Estados Unidos incluso se ubicó por encima de las estimaciones de todos los economistas que participan de la habitual encuesta de Bloomberg. Es por ello que ahora los inversores esperan que la Fed sea aún más agresiva en su política monetaria.

La inflación general se aceleró a 0,9% mensual versus el 0,4% de septiembre. Por su parte, la inflación núcleo escaló al 0,6% mensual frente al 0,2% en septiembre. En términos anuales, tanto la inflación general (6,2% anual) como la inflación núcleo (4,6% anual) se ubicaron en máximos de los últimos 30 años.

El mercado espera una Fed más agresiva

Debido al escenario de mayores presiones inflacionarias, el mercado en general comenzó a recalibrar sus expectativas respecto de la política monetaria de la Reserva Federal.

De alguna manera, se espera que la Fed tenga que ser más agresiva para contener no solo las expectativas sino también los mayores registros de inflación que efectivamente se están evidenciando en la economía norteamericana.

En la última encuesta de mercado de Bank of América, el 39% de los inversores espera que la Fed suba la tasa dos veces, versus 24% que anticipaban lo propio en octubre. A su vez, la expectativa de ver solamente una suba de tasas cayó al 37% en noviembre desde el 44% en octubre.

Solo el 13% de los encuestados espera que la Fed no suba su tasa en 2022 mientras que el 8% espera ver tres subas en el próximo año.

Los analistas del gigante de inversiones PIMCO alertaron que el dato de inflación de octubre sugiere que los funcionarios de Fed adelantarán su cronograma esperado para elevar la tasa de política monetaria.

Los analistas de PIMCO esperan la Fed eleve dos veces las tasas de interés en 2022, y otras tres o cuatro subas en 2023.

Dicho cambio se da como reacción a un esfuerzo por manejar el riesgo de que las expectativas de inflación a largo plazo se aceleren como resultado de las presiones inflacionarias y la incertidumbre económica resultante.

“El informe del IPC de octubre mostró que los precios minoristas aumentaron más de lo esperado. El informe del IPC de EE.UU. de octubre reafirma que la Fed se encuentra en un lugar incómodo. Si bien esperábamos que los próximos meses serían un desafío para la Fed, las mayores inflacionarias de octubre confirman que los funcionarios de la Fed volverán a revisar sus previsiones de inflación y de la trayectoria de tasas de interés en sus proyecciones económicas de diciembre”, dijeron desde Pimco.

Debido a las mayores presiones inflacionarias, la probabilidad de ver dos subas de tasas en 2022 supera el 60%.

Inicialmente se entendía que las presiones inflacionarias venían asociadas y provocadas por los cuellos de botella generados por la pandemia y su posterior reapertura económica. Sin embargo, d icha hipótesis comienza a estar puesta en duda , del mismo modo que la transitoriedad de la inflación.

Adrián Yarde Buller, economista jefe y estratega de Facimex Valores, explica que las presiones inflacionarias fueron generalizadas y llegaron más allá de las categorías asociadas a la reapertura de la economía.

Para el economista estos datos agregan argumentos en favor de un impacto mucho más importante que el considerado por la Fed, incluso cuando la entidad aún pueda argumentar que las presiones inflacionarias son de origen transitorio.

Retiro de estímulos

“Tras la difusión de los datos, los breakevens de inflación implícitos en los bonos del Tesoro a 10 años saltaron a máximos en 15 años (+7pbs a 2,71%), incrementando las presiones para que la Fed acelere el retiro de los estímulos a la demanda. En este marco, el debate gira en torno a si veremos 2 o 3 subas de tasas, con los futuros de tasas de interés descontando que la Fed subirá su tasa de política monetaria dos veces el año que viene y asignando una probabilidad de 43% a que ocurra una tercera suba de tasas “, comentó.

Desde Balanz destacan que la sorpresa inflacionaria en EE.UU. durante octubre reavivó las preocupaciones de que la transitoriedad de la elevada inflación se torne más permanente de lo esperado.

“La mayor persistencia inflacionaria era algo que ya había sido reconocido tanto por el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, como por la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, y el expresidente de la Fed Alan Greenspan. Sin embargo, la sorpresa del mes pasado -la mayor en magnitud desde junio – alimentó las preocupaciones de que la inflación sea más alta de lo esperado por el mercado y consecuentemente disparó un reajuste de expectativas de tasas”, comentaron.

Así, las expectativas de inflación incorporadas en los bonos se ubican en su mayor nivel multianual.

Se aplana la curva

Cuando el mercado comienza a especular con subas de tasas, lo que primero reacciona es la parte más corta de la curva soberana norteamericana.

De hecho, ya se observan fuertes subas en dicho segmento de la curva. Es decir, en el tramo de hasta 2 años.

Debido a la mayor expectativa de suba de tasas por parte de la Fed, la parte más corta sube con una velocidad mayor respecto del tramo medio y largo, lo cual termina provocando un aplanamiento de la curva .

Generalmente, un aplanamiento implica una expectativa de recesión en la economía norteamericana. Justamente, si la Fed sube la tasa, se enfría la economía y las chances de ver una recesión crecen.

La parte corta de la curva rinde 0,2%, mientras que en el tramo de entre 1 a 3 años, las tasas van de 0,25% a 1%. Entre 5 a 10 años, las tasas se encuentran en 1,25% a 1,6% y en el tramo más largo, los bonos operan con yields de 2%

Desplazamiento alcista

Si bien hubo un desplazamiento, el mismo no fue parejo en los distintos tramos de la curva. La curva soberana de EE.UU. evidenció subas en el último año de hasta 100 puntos básicos en el tramo corto y medio, mientras que en el más largo solo subió 50 puntos básicos.

Es decir, los tramos cortos y medios suben más que el largo, generando un desplazamiento alcista pero aplanado.

Los analistas de Balanz resaltaron que las preocupaciones sobre la persistencia inflacionaria, particularmente en EE.UU., y otros mercados desarrollados, y la falta de definición sobre la continuidad de Jerome Powell en la Reserva Federal, son factores de riesgos para el corto plazo.

“La recalibración de expectativas inflacionarias y ajustes en la tasa de política monetaria, principalmente de la Fed, presionaron a la renta fija en su conjunto. En el último mes, el mercado pasó de incorporar 5 subas (de 25pbs) en la tasa de política monetaria de la Fed hacia 2024 a 7 actualmente, mayormente en 2023. Este reajuste de expectativas llevó a un aplanamiento de la curva de rendimiento que presionó a las tasas de corto por sobre las de largo plazo en EE.UU”, afirmaron.

Finalmente, desde PIMCO advierten que el aplanamiento de las curvas de rendimiento suele ocurrir relativamente más tarde en un ciclo económico, lo que eleva los rendimientos a corto plazo en relación con los de más largo plazo.

Fuente: El Noticiero Digital