Pero este año no hay dólares. Qué esperan en el mercado

Pero este año no hay dólares. Qué esperan en el mercado

Será difícil enfriar los precios en plena campaña y con pocos dólares

El tipo de cambio suele ser utilizado para contener la suba de precios en los años electorales.

La inflación seguirá siendo un elemento central y permanente en la discusión cotidiana de la sociedad y desde ya, en la campaña por los votos que ya entró en terreno de definiciones, con la presentación de alianzas este miércoles y las candidaturas el próximo 24.

El salto de tres dígitos anuales del IPC que se espera para este año, construido en base a horribles índices de inflación mensual -el adjetivo sirve también para el 7,8% de mayo, desde ya- operará como un dardo que lanzará a diario la oposición sobre los candidatos oficialistas, por más que busquen desmarcarse de la gestión encabezada por el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía Sergio Massa.

Para lo que resta del año será difícil que el índice de precios al consumidor se vuelva a perforar el piso del 8%.

“Otra vez la carne está subiendo menos que el promedio y opera como un ancla para un rubro decisivo como el de los alimentos” señaló el economista Martín Polo.

También jugó a favor de este leve retroceso de mayo que el tipo de cambio navegó con cierta calma. El dólar bolsa subió un punto menos que la inflación y el dólar oficial que maneja el Banco Central subió dos décimas menos que la inflación.

Peor qué puede esperarse de los dólares más o menos libres en plena campaña electoral. El propio Sergio Massa viene diciendo que si no hay candidato único oficialista en las PASO el lunes post PASO puede ser un tembladeral. Es opinable. Si la opción opositora de Juntos por el Cambio sale triunfante ¿Qué podría pasar con el dólar?. ¿Y qué si la oficialista sale triunfante? ¿Y qué pasaría si el que surge como más votado es Javier Milei?

Cada resultado podría tener un impacto diferente

Pero lo que parece cierto es que el que tenga pesos y pueda convertirlos a dólares, posiblemente lo haga. Se sabe que hay muchos que no pueden hacerlo y por eso se dolarizan comprando acciones o títulos de la deuda. Si el dólar se recalienta y la brecha se abre aún más, el impacto sobre la inflación es inevitable. Ocurrió en octubre de 2020 y en junio y julio de 2022. También con los saltos de estos meses.

Además, por la caída de la recaudación -en buena parte por culpa de la sequía- el déficit fiscal se ampliará y también el auxilio que deberá prestarle el Banco Central al Tesoro.

Otro elemento: ¿qué va a pasar con la tentación de nuevos «planes platita» que ayuden a ganar más votos?. ¿Habrá pesos para ello?

Y también está el problema de las reservas. Sergio Massa vendió semanas atrás que para estos días iba a estar cerrada la negociación con el FMI para que éste adelante desembolsos. No ocurrió. Se sabe que el el Fondo no estaría dispuesto a soltar dólares para que el Banco Central lo venda a la mitad del precio que se opera en el mercado paralelo.

Un salto cambiario del oficial, si es que el Gobierno lo acepta, impactará también sobre los precios.

Los hitos que deberá atravesar el combo inflación-dólar son las PASO y las elecciones generales de fines de octubre. Lo que pase en las primarias puede ser determinante. El resultado de las generales mucho más. Siempre es complicado para un Gobierno enfrentar elecciones con pocos dólares en la caja fuerte.

“No hay muchas chances de que se repita el 7,8% de mayo y mucho menos de esperar un número menor. Si me garantizan un 8% mensual de inflación de acá a fin de año, firmo con las dos manos” concluye Polo, resumiendo lo que puede esperar de la inflación de ahora en adelante.

Fuente: Clarín