Paula Bujia: “Los bonos CER pueden tener un recorrido de 50% y las acciones siguen baratas”

Paula Bujia: “Los bonos CER pueden tener un recorrido de 50% y las acciones siguen baratas”

En pleno cepo cambiario, los ahorristas se preguntan dónde pueden destinar sus pesos para combatir a la inflación. Paula Bujia, ex gerente de inversiones de Allaria Ledesma, y hoy asesora independiente, le cuenta a BANK MAGAZINE cuáles son las alternativas en acciones y bonos, y qué sucederá con el dólar.

Por Mariano Jaimovich

-Con el actual panorama, ¿de qué manera es viable hacer inversiones en el país?

-En octubre pasado escribí aquí, en Bank Magazine, que el Gobierno iba a ser más razonable y moderado de lo esperado, en un contexto en el cual los precios descontaban un escenario catástrofe. Si bien ya hemos visto un rally en bonos y acciones, creo que quedan oportunidades para los próximos meses. Pero la condición sine qua non es concretar una restructuración amigable de la deuda soberana en dólares para marzo/abril de este año.

-¿Qué inversiones está recomendando en este escenario?
-Si bien los bonos en pesos han tenido una recuperación extraordinaria, el Gobierno muestra voluntad de pago. Ya ha logrado renovar vencimientos con licitaciones exitosas y hasta bajando la tasa, y también tiene cierta capacidad para financiarse con el Banco Central. En este contexto, los bonos CER, en particular el TC20 y TC21, pueden llegar a tener un recorrido de un 50%.
En tanto, los bonos en dólares todavía tienen la incertidumbre de los términos de la restructuración, pero creemos que títulos como el Bonar 2020 (AO20) o el Bonar 2024 (AY24) le queda un recorrido de, al menos, 20%.

-¿Y por el lado de las acciones?
-Las acciones siguen baratas, particularmente los bancos, que se benefician de la caída del riesgo país. También algunas energéticas (YPF, TGS) y apostando a un repunte económico Ternium Argentina. Al dar estas recomendaciones es importante considerar el perfil de riesgo del inversor y mantener una diversificación geográfica, con una colocación moderada en activos argentinos dada su volatilidad.

-¿En qué están invirtiendo la liquidez las empresas que asesora?
Las tesorerías de las empresas precisan la liquidez como capital de trabajo, con lo cual debe ser libre de riesgo de mercado, por lo tanto la mejor alternativa son los fondos de money market.

-¿Qué estimaciones tiene respecto al dólar con las nuevas medidas del gobierno?
-El cepo es suficientemente restrictivo como para que el tipo de cambio oficial se mantenga en los niveles actuales. Y los individuos y compañías ya se encuentran muy dolarizados. Lo que sí, la brecha cambiaria entre el oficial y el contado con liquidación creo puede alcanzar niveles de 40%. Y si se logra el acuerdo con los acreedores, es probable que el BCRA adopte una política de crawling peg, para evitar mayores atrasos cambiarios, pero no veo una liberación sustancial de las restricciones cambiarias durante este año.

-¿Cuáles son sus proyecciones para las tasas de interés?
Las tasas de Leliq bajaron fuertemente y con los niveles actuales de 52% surge el riesgo de una tasa real negativa. Creo que el margen de maniobra del BCRA para mayores reducciones está limitado en este sentido, sobre todo si busca evitar un impacto negativo sobre la demanda de pesos. El Banco Central posiblemente sea más dependiente de los datos en el corto plazo, aunque con un fuerte sesgo a la baja. El mismo se realizará en la medida que el sendero de inflación converja a niveles menores.
En resumen, veo al Central ampliando la política de apoyo al crédito por medio del sistema financiero, a través de encajes diferenciados y otras políticas cuantitativas, que pueden generar distorsiones pero no necesariamente impactar en la rentabilidad del sistema bancario.

-¿Cuáles son las expectativas de los inversores para lo que viene?
En el corto plazo, la mayor preocupación es la restructuración de la deuda en dólares de una forma razonable y acordada, con lo cual los próximos meses son claves. En el largo plazo, Argentina tiene que mantener una política fiscal disciplinada. Y por último, pasada la emergencia económica, y así se entienden las últimas medidas, como de emergencia y transitorias, el nuevo Gobierno necesita mostrar un plan integral que genere expectativas de crecimiento sostenido.-