Las tasas se disparan y los bonos sufren

Las tasas se disparan y los bonos sufren

«Con una visión similar, los analistas de Balanz afirmaron que las tasas del Tesoro de Estados Unidos a 10 años y las de grado de inversión están históricamente bajas, por lo que no luce atractivo posicionarse en renta fija en este escenario.»

La inflación está picando en punta en Estados Unidos y el mercado ya tomó nota. Las tasas se disparan y los bonos sufren. En este contexto, los inversores buscan preservarse de los riesgos de subas de los rendimientos y buscan activos con vencimientos más cortos, los cuales suelen ser menos sensibles a la volatilidad en las tasas.
La inflación en EE.UU. sorprendió al alza hace dos semanas, dejando un balance anual del 2021 del 7%, el registro más elevado desde 1982.

Eso llevó a que el mercado viera cada vez más probabilidades de que la Reserva Federal (Fed) tenga que ponerle fin al ciclo de política monetaria laxa y elevar las tasas de interés de referencia de corto plazo.

La parte más corta de la curva de la deuda soberana de Estados Unidos suele ser la más sensible a las expectativas de política monetaria de la Fed. Por ello, los rendimientos más cortos se desplazaron con más fuerza que los más largos.

En medio de las especulaciones de que la Fed va a mover la tasa, hubo una disparada en los rendimientos de la deuda de corto plazo, que pasaron de 0,1% en enero de 2021 a casi 1% un año después.

Esto es un movimiento mucho más agresivo que todo el resto de la deuda dentro de la curva soberana norteamericana. Los rendimientos en general se ubican en su mayor nivel en dos años.

Con los últimos datos macroeconómicos, el mercado no solo teme que la Fed comience a subir las tasas, sino que además ve que hay riesgos de que inicie un proceso de venta de activos dentro de su hoja de balance, lo cual implicaría una política monetaria aún más contractiva y con impactos aún más negativos en los rendimientos.

Adrián Yarde Buller, economista jefe de Facimex Valores, dijo que con datos de inflación que muestran presiones generalizadas y una tasa de desempleo (3,9%) que prácticamente volvió a los niveles prepandemia (3,5%), la Fed sigue acumulando razones para avanzar en el retiro de los estímulos monetarios.

“Tras el dato de inflación, el mercado descuenta una probabilidad de 92,8% de que la Fed inicie su ciclo de alzas de tasas en marzo (era 0% hasta octubre). Además, crece el espacio para que la Fed arranque su ´Quantitative Tightening´ este año, algo que anticipó su presidente Jerome Powell cuando dijo que ´en algún momento, tal vez más tarde este año, vamos a permitir que la hoja de balance se achique´”, dijo.

Estrategias

Con el fuerte desplazamiento alcista de las tasas de interés, los bonos a nivel global se encuentran bajo presión.

En los últimos seis meses, todos los bonos operan con caídas que van desde el 5% (en el caso de la deuda emergente de alto rendimiento) hasta el 2,8% en el caso de los bonos globales y de grado de inversión.

Por este contexto adverso en el mercado de bonos y con tasas al alza, el mercado considera que buscar deuda de corta duration es hoy lo más conveniente.

Camilo Cisera, portfolio manager de Cohen, afirmó que aún hay margen para que los bonos sigan subiendo sus rendimientos y que es un año para tener cuidado con acciones de alta valuación y con bonos largos.

En este sentido, Cisera dijo que, desde el lado de la estrategia, hay que buscar deuda de corta duration y ve valor en bonos de alto rendimiento (high yield)

” Hay que estar corto en duration, otra parte en cash y otra parte short duration high yield. La deuda high yield tiene doble cobertura. Al ser short duration tiene menos volatilidad de tasas y al ser high yield americano, tienen un muy buen cupón que los hace atractivos y amortiza aún más cualquier potencial suba de tasas”, comentó.

Con una visión similar, los analistas de Balanz afirmaron que las tasas del Tesoro de Estados Unidos a 10 años y las de grado de inversión están históricamente bajas, por lo que no luce atractivo posicionarse en renta fija en este escenario.

“En un contexto donde los bancos centrales empiezan a tomar una postura más restrictiva con la inflación, la convicción es alta en instrumentos con baja duración o tasas variables”, indicaron. En la parte corta de la curva de high yield los rendimientos parecen compensar los riesgos de suba de tasa. Frente al riego de suba de tasa y presiones inflacionarias, el posicionamiento en duración corta disminuye el riesgo de pérdidas “, sostuvieron.

La historia convalida la estrategia

En un informe, los analistas del gigante de inversiones Lord Abbett remarcaron que, debido a su menor duración, un movimiento en los rendimientos tiene un impacto menor en el precio de los bonos a corto plazo.

A su vez, destacan que históricamente, los bonos corporativos a corto plazo no solo han ofrecido una ventaja de rendimiento sobre los bonos del gobierno, sino que los períodos de tasas más altas también han coincidido típicamente con una mejora en la economía de EE.UU., proporcionando un contexto de apoyo para el crédito corporativo.

Según sus estudios, en períodos en los que la Fed sube la tasa, lo que más sufren son los bonos del Tesoro americano, con una caída promedio de 1,5%.

En cambio, la deuda de corto plazo y la deuda corporativa de corto plazo, son las que mayores rendimientos suelen ofrecer en estos contextos, con ganancias promedio de entre 2% y 4% en cada ciclo alcista de suba de tasas de la Fed.

Juan Cruz Lekovic, fund manager de Schroders, sostuvo que el mercado ve que la Fed va a subir la tasas y considera que será importante buscar activos de corta duration.

“Si se repasa ciclos pasados que podrían ser similares a la actualidad, en la suba de tasas de 2013, por ejemplo, lo que más impacto negativo tuvo fueron los bonos del tesoro americano y bonos de grado de inversión. En ese sentido, y con las chances de ver un contexto similar, la clave será acortar duration para que el impacto de la suba de tasa sea menor a la vez que habrá que buscar créditos un poco más elevados, en bonos high yield. En este caso, si bien va a ser difícil ganarle a la inflación del 6,8%, se pueda tener buenos rendimientos de cualquier manera “, dijo.

Finalmente, Sergio Maugeri, porfolio manager de ICBC Investment Argentina, dijo que confirmada una aceleración en la reducción de estímulos monetarios ante el aumento de la inflación americana (ya no tan transitoria), la Fed anticipó tres subas de tasas de interés para el año 2022 (se esperaban 2).

En cuanto a la estrategia, Maugeri advierte que luce aconsejable buscar activos de duration corta.

” Creemos que aún no es momento de posicionarse en bonos de mayor duration, esperando nuevas correcciones hasta tanto no ver ceder a la tasa de inflación en la que podríamos tener todavía sorpresas negativas” , dijo.

“Recomendamos una cartera de activos de grado de inversión o de muy buena calidad crediticia de corta duration, como así también centrar la estrategia en TIPs bonos del tesoro americano ajustables por inflación”, agregó.

Fuente: El Noticiario Digital