Lacunza y Milei discrepan con respecto al cepo cambiario

El asesor económico de Larreta y el candidato libertario discreparon sobre las restricciones en relación al dólar.

«Argentina vive una crisis de confianza» es el diagnóstico que se repitió este martes en el 40° Congreso del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IAEF), donde más de 800 hombres y mujeres de negocios buscaron encontrar una punta para desatar la maraña de inflación, devaluación, cepos y regulaciones que componen la compleja situación actual.

En una jornada cargada de definiciones, dos de los principales economistas de la oposición dieron su visión, contrapuesta, sobre un viejo problema para los argentinos: qué hacer con los dólares y las trabas para su acceso.

Por un lado, el principal asesor económico de Horacio Rodríguez Larreta, y exministro de Economía, Hernán Lacunza, buscó dar un panorama que intente recuperar la confianza de los principales tomadores de decisión del mercado de cara a un nuevo Gobierno. Lacunza aseguró que «si bien el cepo no se saca desde el día uno», las regulaciones cambiarias «no serán las mismas el 9 que el 11 de diciembre».

Por otro, el candidato de la Libertad Avanza, Javier Milei, afirmó que «levantar el cepo desemboca en una híper» e insistió en que la única alternativa para este contexto es la dolarización, El economista cerró el evento que duró todo el día y aseguró: «Cualquier solución que dice que va a abrirse por un día para el otro, implica que con el cambio del portafolio se hacer una hiperinflación».

Reconstruir otros frentes

Mientras que Lacunza aseguró que «le gustaría» que el cepo cambiario pudiera levantarse en un día, pero que para poder hacerlo en el contexto actual se necesita reconstruir la confianza en otros frentes, sobre todo en el fiscal; Milei insistió en que la alternativa es la dolarización.

En ese sentido, el economista de JXC aseguró que las circunstancias de la economía actual, tanto a nivel global como local, son bien diferentes a las de 2015, por lo que «aunque le gustaría», considera que el cepo cambiario no puede levantarse desde el 10 de diciembre. Para Lacunza, «El cepo es una anormalidad. No podemos acostumbrarnos a la anormalidad, solo aceptable, tolerable durante la enfermedad». Entonces afirmó que antes de quitar el torniquete «se debe encarar las causas de la enfermedad».

Los tres pasos para quitar el cepo incluyen, para Lacunza, aflojar las restricciones para tres variables «las del comercio, las de la deuda y las delos dividendos». «Quitar el cepo el primer día tiene mucho atractivo, pero sería impracticable. Secuencialmente, sería: comercio. deuda. dividendos, lo antes posible», remarcó el ex titular del Palacio de Hacienda.

Lacunza aseguró que «no hay atajos» para normalizar la economía y por eso descartó las alternativas de otros candidatos, como la dolarización.

«No tenemos dólares. Los cálculos que se hacen para pensar en la dolarización son con US$ 35.000 millones que no tenemos. Así que en este contexto, dolarizar es saltar un precipicio».

Al cierre del evento, el principal impulsor de la dolarización de la economía, Javier Miei, remarcó:

«El problema del cepo tiene que ver con las Leliq. La inflación es siempre un problema monetario. El problema más grande está en los stocks. Si se abre el cepo de un día para el otro, vamos a una hiperinflación: es un derrumbe de la demanda de dinero».

«La única forma de evitar la híper es resolver de cuajo el tema de los stocks. O sea, la dolarización», dijo Milei aunque aclaró que no se tratará de «un proceso instantáneo»: «En Ecuador te obligaban a dolarizarte en nueve meses. Pero en El Salvador dieron la opción de hacerlo cuando se pueda», explicó.

«El peso se derrite. No alcanza con frenar la emisión. El problema del stock es hoy más grande que el de los flujos», insistió Milei, que aseguró: «El FMI con nosotros no tendría problemas. Porque el ajuste que propone, para nosotros es light».

Antes del cierre de Milei, el ahora precandidato a Senador por Juntos por el Cambio, José Luis Espert, había dicho: «Los precios argentinos están totalmente distorsionados. Es urgente terminar con el cepo, uniformar el mercado de cambios y los controles de precios. Además, congelar el gasto público en pesos. Hay que terminar con el cepo ya».

Fuente: Clarín