«La deuda es manejable»: Rubinstein

«La deuda es manejable»: Rubinstein

Polémica. Ante las críticas opositoras, Rubinstein dijo que la deuda “es manejable”

Después de que Juntos por el Cambio alertó sobre una profundización de la crisis y reforzó sus críticas a la gestión del ministro de Economía, Sergio Massa, representantes del Gobierno salieron ayer a responder y profundizaron el debate sobre la herencia que dejará la gestión de Alberto Fernández.

En su último pronunciamiento nacional, Juntos por el Cambio acusó a la actual administración de dejar “una situación peor que la de 2015” en materia económica y una “bomba armada” que le “explotará” a la próxima gestión, con alta inflación y un crecimiento de la deuda. Massa optó por mantenerse en silencio, pero envió a responder al viceministro de Economía, Gabriel Rubinstein, quien aseguró que “la deuda en pesos es absolutamente manejable”.

El número dos de Massa en el Ministerio de Economía resaltó que la administración de Macri “emitió Letes en dólares a cortísimo plazo con tasas cercanas al 7,5% anual”. “Llegaron a acumular hacia finales de 2019 un monto equivalente al 8% del PBI, que ellos mismos tuvieron que ‘reperfilar’, perjudicando principalmente a los ahorristas argentinos”, indicó Rubinstein.

Desequilibrio fiscal

En el seno de Juntos por el Cambio concluyeron que es necesario alertar a la sociedad sobre el desequilibrio fiscal, el atraso cambiario y tarifario, y, sobre todo, el nivel de endeudamiento público.

“La situación será mucho peor de la recibida en 2015”, señalaron los altos mandos de Juntos por el Cambio. Y rechazaron “la utilización de instrumentos financieros en pesos, ajustados en dólares con tasas de interés imposibles de pagar, o en dólares a tasas usurarias”.

En cambio, Massa considera que la “única bomba” fue el acuerdo que firmó Macri en 2018 con el FMI por 45.000 millones de dólares. “No vamos a empujar, pero sí advertir y decir lo que nos van a dejar”, graficó anoche Gerardo Morales, jefe de la UCR, apenas aterrizó en Jujuy tras participar de la cumbre opositora.

A lo largo de su hilo de tuits, Rubinstein subrayó que el Gobierno “se financia en pesos, y la porción denominada dollar linked, que se ajusta por el tipo de cambio oficial, paga tasas de interés del 0%”.

La reacción del Ministerio de Economía mostró que el debate había alcanzado un nivel de sensibilidad que exigía una respuesta del Gobierno.

Estabiliza r el sistema bancario

“El Banco Central, al igual que todos los bancos centrales del mundo, realiza operaciones en el mercado para asistir y estabilizar el sistema bancario. Esto fue crucial para garantizar estabilidad durante la pandemia, el shock internacional de la guerra en Ucrania y cuando dirigentes de Juntos por el Cambio sugirieron pretender repetir su propia historia en caso de ganar las elecciones en 2023”, sostuvo el viceministro de Economía.

Por fuera del massismo, hubo réplicas, como la del ministro del Interior, Eduardo de Pedro, un alfil de Cristina Kirchner. “La única bomba que les dejaron a varias generaciones de argentinos es la deuda irresponsable que contrajo el gobierno de Cambiemos”, afirmó. “Sería bueno que Macri, Patricia Bullrich o bien Horacio Rodríguez Larreta les expliquen a los argentinos dónde está la plata de los 100.000 millones de dólares con que endeudaron hasta a nuestros bisnietos”, añadió.

Una bomba de tiempo

Los reproches se sumaron a los que había expuesto horas antes el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis: “Bomba de tiempo es una deuda con el FMI de 45.000 millones de dólares, la que dejaron defaulteada en pesos, 25.000 pymes cerradas, 46 meses de destrucción de empleo industrial”.

Por la noche, el propio Alberto Fernández salió al cruce de la discusión. “Los pícaros que se llevaron ese dinero y dejaron sufriendo a la Argentina hoy levantan el dedo y nos quieren enseñar lo que debemos hacer –escribió el Presidente–. Quieren volver a gobernar y debemos evitarlo. El peronismo debe triunfar”. De esa forma, Fernández vinculó la discusión sobre la economía con las próximas elecciones.

Temores

En el massismo temen que la campaña que activó Juntos por el Cambio para señalar inconsistencias de la política económica del oficialismo podría alterar a los mercados y generar un tembladeral financiero.

De hecho, Sebastián Galmarini (uno de los directores del Banco Provincia, cuñado de Massa) acusó ayer a los jefes opositores de “jugar con fuego”.

Por su parte, Antonio Aracre, jefe de asesores de Fernández, quien tiene buena sintonía con el massismo, también se sumó. “¿Bomba de tiempo? ¿De verdad creen que la gente no tiene memoria para recordar cómo llegamos al FMI y al ‘reperfilamiento’ (eufemismo de default) del exministro Lacunza?”, remarcó.

Argumentos opositores

En el equipo económico de Pro, que encabezan Hernán Lacunza y Luciano Laspina, relativizaron las acusaciones oficialistas. Afirman que los mercados y los empresarios ya están al tanto de que la situación financiera es “insustentable”.

“Es un juego de tontos. La deuda externa que reestructuró Martín Guzmán rinde 1900 puntos. Y la deuda local solo se coloca porque tienen acorralados a empresas, fondos y bancos en una jaula regulatoria”, explican.

Desde hace diez días, los referentes económicos de Juntos por el Cambio comenzaron a alertar sobre las consecuencias que tendrían las maniobras de Massa. Macri fue uno de los impulsores de la idea de generar una mayor conciencia en la población sobre las consecuencias de esas medidas. “A pesar de la bomba económica que está dejando este gobierno, el país tiene un enorme futuro”, enfatizó el sábado, desde La Pampa.

Problemas para el próximo Gobierno

Entre los economistas del macrismo repiten que le dieron un “período de gracia inédito” a Massa y que decidieron “bajar del altar de la prudencia” para alertar a la ciudadanía sobre los problemas que tendrá el próximo gobierno. El camino para superar la crisis, sostienen, “no tiene salidas indoloras”. Argumentan que la oposición acompañó con sus votos el acuerdo con el FMI por la deuda de Macri y el presupuesto 2023. Sin embargo, dicen, Massa arrastra los mismos “problemas” de su antecesor y adoptó medidas de fondo para sacar al país de “la trampa de la inflación y la pobreza”.

“El Banco Central comprando deuda de un mercado secundario o una brecha cambiaria del 100%”, apuntan. A su vez, afirman que el ministro de Economía no apostó por una fuerte reducción del gasto público ni frenó la escalada inflacionaria. Proyectan que en enero la suba de precios será del 6 o 7%.

Consideran que la estrategia de Massa es “aguantar” y “alargar la mecha” para llegar al 10 de diciembre, es decir, al recambio presidencial. Esas medidas “cortoplacistas”, denuncian, solo logran “agrandar la bomba” que heredará la próxima gestión. “Lo único que Massa ha hecho es gastar recursos del próximo gobierno, tomando deuda o dilapidando reservas que no tiene”, lanzan desde el equipo de Pro.

No existe un problema con la deuda externa

Además, argumentan que Massa no tuvo inconvenientes para renovar el acuerdo que firmó Macri con el FMI. “No existe un problema con la deuda externa, sino que volvieron a quebrar el Estado, no tienen reservas y pretenden que los argentinos vivan en esa ficción hasta que todo vuele por los aires”, asegura uno de los economistas más escuchados en el macrismo.

Patricia Bullrich, una de las precandidatas a presidente de Juntos por el Cambio, se enteró de las reacciones oficiales mientras recorría La Pampa, en la antesala de las primarias. “Nuestra deuda, al lado de la de ellos, es deudita. Lo que están haciendo es algo absolutamente temerario. Están poniendo tasas del 100% en pesos, están generando una bomba y tratando de llegar para que nos explote. Eso es así y nosotros le vamos a hablar a la agente con total tranquilidad”, dijo a la nacion.

Asimismo, la exministra de Seguridad descartó que la estrategia de JxC pueda generar un tembladeral financiero. “Ellos ponen nerviosos a los mercados, cuando no votan el acuerdo con el FMI y renuncia el presidente de su bloque [por Máximo Kirchner] o se salen todo el tiempo de las normas, quieren cambiar la Corte y no dan seguridad jurídica a las empresas. Nosotros cumplimos con el deber institucional de informarle a la población sobre la situación de total inestabilidad”, aseguró la titular de Pro, después de cruzarse en el aeropuerto de La Pampa con María Eugenia Vidal y Maximiliano Ferraro, quienes también viajaron a apoyar a Maquieyra antes del primer test electoral del año.

Fuente: La Nación