La caída del gasto de los hogares puso en jaque el dinamismo de la actividad económica

La caída del gasto de los hogares puso en jaque el dinamismo de la actividad económica

El ministro de Economía, Sergio Massa, convocó para hoy a las principales centrales sindicales para trabajar en una modificación para que el Impuesto a las Ganancias afecte a una menor cantidad de trabajadores.

El avance de esta medida se da en un contexto marcado por una caída en el consumo, que en agosto registró una disminución del 4,1% en las ventas de las pymes minoristas en términos interanuales, y una actividad económica resentida que profundizará su caída tras la devaluación posterior a las PASO. Además de contar con la presencia de las organizaciones sindicales, la reunión contará con la ministra de Trabajo, Kelly Olmos. El objetivo del Gobierno es elevar el mínimo no imponible para que menos personas deban pagar el tributo, a pesar de que la última modificación fue a principios de agosto y subió el piso a las remuneraciones superiores a $700.875 brutos.

La devaluación dispuesta luego de las elecciones tuvo un rápido traslado a los precios y sumó al efecto sobre el poder adquisitivo. CAME señaló que las ventas minoristas de las pymes registraron en agosto una caída del 4,1% en comparación con el mismo mes del año pasado. Esta tendencia es “preocupante” para la entidad, ya que representa ocho meses consecutivos con baja interanual, siendo la del mes pasado la peor de 2023. En el acumulado entre enero y agosto se observó una caída de 2,6% respecto del mismo período de 2022.

Dolar blue y devaluación

“Agosto presentó desafíos significativos para el sector comercial, que tuvo que adaptarse a una dinámica de precios afectada por impactos generados inicialmente en el mercado paralelo del dólar y, posteriormente, con la devaluación de la moneda oficial a mediados de mes”, aseguraron desde CAME.

El año había arrancado positivo en términos de actividad y consumo. Según los últimos datos del INDEC, el consumo privado creció un 2,1% durante el primer trimestre frente al cuarto trimestre de 2022. La Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) proyectó una “pérdida de dinamismo” para lo que queda del año. El indicador de consumo de la CAC mostró en julio un retroceso frente a junio, mientras que las ventas en supermercados medidas por el INDEC acumularon en el segundo trimestre una baja de 2,7% frente a marzo.

Por su parte, los salarios registrados, variable clave a la hora de analizar el consumo, acumularon una caída de 1,4% en términos reales durante el segundo trimestre del año. Los últimos datos oficiales son previos a la devaluación, por lo que estos indicadores pueden presentar caídas en lo que queda del 2023.

El descenso del gasto de los hogares también puso en jaque el dinamismo de la actividad económica, que se espera que caiga un 3% hacia fin de año. “Es difícil que agosto muestre buenos números: a una ya por sí delicada situación se le sumó la creciente volatilidad pre y post PASO, que incluyó devaluación, corrida cambiaria, endurecimiento del cepo y una inflación de dos dígitos”, analizó Invecq.