El salario real no se recupera y las expectativas no son buenas para 2021

Indec señaló que los salarios nominales avanzaron 2,5% en septiembre, poco más de 30% interanual y siguen mirando el IPC desde abajo: perspectivas flojas

31 meses en baja

Cayó en 2018 y en 2019 y volverá a caer en 2020. No han sido buenos años para el salario real. Por el combo de recesión e inflación, el salario “promedio” hoy es 20% menor, en términos reales, al de 2015.

Ayer, el Indec publicó el Índice de Salarios del mes de septiembre y confirmó que las remuneraciones (registradas e informales) perdieron cerca de 3% interanual contra los precios. El nivel general de salarios lleva 31 meses consecutivos de caída interanual real, desde el recordado marzo de 2018.

LCG

“En los últimos meses del año no esperamos que haya una considerable mejora en los salarios reales. La importante aceleración de los precios en octubre y los altos registros que se esperan para noviembre y diciembre, sumados a un mercado laboral que aún se encuentra deprimido por la incertidumbre y las restricciones operativas de la pandemia; permiten pensar que el ajuste en el mercado de trabajo seguirá siendo principalmente vía precios”.

Las perspectivas no son buenas para 2021, tampoco: se espera más movimiento económico, pero también más inflación y empresas con poca capacidad de ofrecer aumentos

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó ayer que durante septiembre el índice de salarios del total registrado mostró un crecimiento 2,5% respecto al mes anterior, como consecuencia de un incremento de 2,2% en el sector privado registrado (“en blanco”) y un aumento de 3,2% en el sector público.

De esta manera, de acuerdo con los datos oficiales, el índice de salarios total presentó en septiembre un incremento de 2,5% respecto de agosto, lo que se dio como consecuencia de la suba de 2,5% en los salarios registrados y un aumento de 2,3% en los salarios del sector privado no registrado. Según el Indec, en septiembre el índice de salarios total registrado acumuló durante los últimos doce meses un aumento de 30,5%, lo cual se dio como consecuencia de un incremento de 32,4% del sector privado registrado y un aumento del 27,2% del sector público.

De este modo, en el séptimo mes del año el índice de salarios total mostró un crecimiento de 31,8% durante los últimos doce meses, lo que se dio como consecuencia de la suba de 30,5% del total registrado y de 37,6% del sector privado no registrado.

Así, en términos reales, los salarios acumularon hasta septiembre 31 meses consecutivos con caídas en la comparación interanual. Los datos de septiembre muestran que los salarios se ubicaron, además de 2,5% por debajo del mismo mes de 2019; 9,1% por debajo de los de en septiembre de 2018; 19,9% por debajo de los del mismo mes de 2017 y 20,5% inferiores respecto a los de septiembre de 2015, según detalló el economista Martín Kalos.

La previsión de LCG

La consultora LCG prevé que durante los últimos meses del año no habrá una mejora considerable en los salarios reales, según indicó en un informe difundido ayer, en el que destacó que desde que comenzó la cuarentena en el país, a finales en marzo, los salarios no dejaron de perder poder adquisitivo, con una caída que asciende a 5,6% entre ese mes y septiembre.

“La importante aceleración de los precios en octubre y los altos registros que se esperan para noviembre y diciembre, sumados a un mercado laboral que aún se encuentra deprimido por la incertidumbre y las restricciones operativas de la pandemia, permiten pensar que el ajuste en el mercado de trabajo seguirá siendo principalmente vía precios”, indicó la consultora.

En ese marco, espera que en 2020 finalice con una caída de los salarios reales por tercer año consecutivo. Hacia 2021, prevé una recuperación de la actividad de menos de la mitad de la caída registrada este año, desempleo elevado, poca certidumbre respecto a la consolidación de la recuperación de la actividad y una inflación que en este momento se ubica niveles de entre 3,5% y 4% mensual, aún sin descongelamiento de precios y tarifas, “situación que no presenta perspectivas muy optimistas para la recuperación del salario real”.

Fuente: El Economista