El FMI esquivó anticipar si avalará los números fiscales

Un director del organismo no quiso revelar si se aprobará la inclusión de «rentas de la propiedad» en el ejercicio del primer trimestre

El Fondo Monetario Internacional (FMI) esquivó anticipar si avalará los números fiscales del primer trimestre presentados por la Argentina luego de que el Ministerio de Economía computó una renta extraordinaria en marzo por la diferencia de valor de los bonos atados a la inflación para alcanzar la meta del acuerdo. Se trata de un «truco» que, según economistas, puede estar fuera de los límites que marca el programa argentino.

Gracias a esa maniobra, el Gobierno cumplió con margen los objetivos fiscales del primer trimestre, la métrica clave para superar la primera revisión del acuerdo con el Fondo.

El director para el Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Ilan Goldfajn, dijo en una conferencia de prensa en Washington que el foco del staff y el Gobierno está puesto ahora en la implementación del programa económico y en la «priorización» de la política económica para garantizar que las metas y los objetivos del plan se cumplan.

Goldfajn ratificó que las metas del programa no se cambiarán.

«En la Argentina, el nombre del juego es implementación», dijo Goldfajn, al responder preguntas sobre el país. «Como saben, las revisiones son normales. Ocurren para todos los programas, y este es también el caso de la Argentina. Estamos analizando la priorización para garantizar que se cumplan el programa y los objetivos del programa. No van a cambiar. Solo vamos a apoyar a las autoridades argentinas a priorizar para cumplir con las metas y objetivos del programa», afirmó.

Mantener las metas fiscales

El Fondo mantendrá las metas fiscales, monetarias y de acumulación de reservas del plan, pero retocará los pronósticos del crecimiento y la inflación, afectados por la guerra en Ucrania. El acuerdo prevé una suba de precios máxima del 48% anual este año, pero los pronósticos privados ya la ubican arriba del 60%.

Goldfajn evitó en dos ocasiones dar un aval directo a los números que presentó el Gobierno para el primer trimestre. Las discusiones y las negociaciones con el país están en marcha, justificó, y además la revisión del programa aún debe ser aprobada por el board del FMI, un paso formal previsto para mayo.

«Como mencioné, el objetivo ahora es la implementación, es priorizar y encontrar las medidas para poder asegurar que las metas se cumplan y los objetivos del programa continúen. Estamos viendo todas las medidas, estamos en medio de la conversación, así que no les voy a dar nada que aún no haya sido revisado. Vamos a tener esta revisión en mayo», afirmó.

El Ministerio de Economía dijo que había logrado cumplir con margen la meta fiscal del primer trimestre, pero ese hito se logró gracias a que el Tesoro registró un aumento extraordinario por casi $160.000 millones en marzo en el rubro «rentas de la propiedad» por la diferencia en la valuación de los bonos ajustados por inflación. Economistas alertaron que esa maniobra contable está vedada en el memorando técnico del acuerdo. El Gobierno sostiene que ese ingreso siempre se ha computado.

Hogares vulnerables

Apoyo a hogares vulnerables El FMI dijo que los gobiernos de América Latina deberían proporcionar «apoyo focalizado y temporal» a los hogares más vulnerables para evitar tensiones sociales ante el nuevo escenario que provocó la guerra en Ucrania, que causó un salto en los precios de los alimentos y la energía, y deprimió la recuperación de la pandemia de coronavirus.

El Fondo dijo también que el ajuste fiscal para mantener el endeudamiento bajo control debe ser «inclusivo».

Ambas recomendaciones se destacan como las dos pocas novedades que dejó un análisis de los principales economistas del Fondo para la región, Goldfajn, Santiago Acosta Ormaechea y Jorge Roldós, sobre el impacto del conflicto y las perspectivas de crecimiento.

«La guerra en Ucrania está convulsionando la economía mundial y elevando la incertidumbre en torno a las perspectivas de América Latina y el Caribe», comienza el texto, de seis carillas. «El impacto se siente en América Latina a través del aumento de la inflación, que está afectando los ingresos reales, en especial de los más vulnerables. Ante este desafío, las autoridades están adoptando políticas monetarias más restrictivas e implementando medidas para amortiguar el golpe sobre los más vulnerables y contener los riesgos de tensión social», agregaron.

Riesgos para América Latina

Los economistas del FMI enumeraron una serie de riesgos ya conocidos para América Latina: una escalada de la guerra podría generar dificultades financieras a nivel mundial, y el endurecimiento de la Reserva Federal en Estados Unidos para atacar la inflación puede «incidir en las condiciones financieras internacionales». Este nuevo panorama, continuaron, puede «acelerar la salida de capitales y plantear un reto para la región».

El análisis de los economistas agrega además que «los países tendrán que garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas para ayudar a preservar su credibilidad y recomponer el espacio fiscal. Pero también será importante adoptar medidas que protejan a los más vulnerables, para lo cual será necesaria una estrategia que se centre en una consolidación inclusiva».

Goldfajn afirmó que las metas del acuerdo no se van a cambiar.

Fuente: La Nación