El Banco Mundial alerta de mayor riesgo para deuda Emergente

El Banco Mundial alerta de mayor riesgo para deuda Emergente

El Banco Mundial publicó en Washington, sus Perspectivas Económicas Mundiales, donde reduce en dos décimas su proyección de crecimiento para la economía global este año, hasta el 4%.

La institución, presidida por David Malpass, observa una recuperación moderada, a menos que los gobiernos apliquen reformas que aumenten las inversiones.

“Si bien la economía mundial parece haber entrado en una recuperación moderada, los encargados de la formulación de políticas se enfrentan a desafíos enormes en materia de salud pública, gestión de la deuda, políticas presupuestarias, banca central y reformas estructurales al tratar de asegurar que esta recuperación mundial, aún frágil, cobre impulso y siente las bases de un crecimiento robusto”, afirmó Malpass.

Más contagios, más riesgo

De hecho, en uno de los capítulos del informe, se plantea un escenario adverso en el que los contagios siguen aumentando y la distribución de las vacunas se retrasa. Un episodio de dichas características limitaría la expansión mundial al 1,6% en 2021. En un escenario más optimista, con un control de la pandemia y un proceso de vacunación más rápido, el crecimiento mundial podría acelerarse hasta casi el 5%.

El documento también examina la forma en que la pandemia amplificólos riesgos en torno a la acumulación de deuda, y la forma en que podría frenar el crecimiento a largo plazo si no se adoptan medidas de reforma concertada.

Además de observar los riesgos asociados, a la utilización de programas de compra de activos como instrumento de política monetaria, en los mercados emergentes y las economías en desarrollo.

Economías en desarrollo

“La pandemia exacerbó enormemente los riesgos de la deuda en los mercados emergentes y las economías en desarrollo; es probable que las débiles perspectivas de crecimiento aumenten aún más la carga de la deuda y erosionen la capacidad de servicio de la deuda de los prestatarios”, aseguró Ayhan Kose, vicepresidente interino de crecimiento equitativo, finanzas e instituciones del Banco Mundial.

“Es necesario que la comunidad mundial actúe con rapidez y determinación para asegurarse de que la reciente acumulación de deuda no resulte en una serie de crisis de deuda. El mundo en desarrollo no puede permitirse otra década perdida”, completó.

De momento, según el organismo multilateral, la economía mundial se contrajo un 4,3% en 2020 e incide en que la pandemia ha causado un gran número de muertes y enfermedades, ha sumido a millones de personas en la pobreza y puede deprimir la actividad económica y los ingresos durante un período prolongado.

Entre las economías avanzadas, la incipiente recuperación se estancó en el tercer trimestre tras el resurgimiento de los contagios, lo que apunta a una recuperación lenta y difícil.

Se prevé que el PIB de Estados Unidos se expandirá un 3,5% en 2021, después de una contracción estimada del 3,6% en 2020. En la zona del euro, se prevé que la producción crezca este año un 3,6%, tras un descenso del 7,4% en 2020. La actividad en Japón, que se redujo en un 5,3% en el año que acaba de terminar, se prevé que crezca un 2,5% en 2021.

Previsiones

El Banco Mundial prevé que el PIB agregado de los mercados emergentes y las economías en desarrollo, incluida China, crezca un 5% en 2021, tras una contracción del 2,6% en 2020. Se espera que la economía de China se expanda en un 7,9% este año, tras el crecimiento del 2% el año pasado. Excluyendo a China, se espera que los mercados emergentes y las economías en desarrollo se expandan un 3,4% en 2021, tras una contracción del 5% en 2020. Entre las economías de bajos ingresos, la actividad aumentará un 3,3% en 2021, tras una contracción del 0,9% en 2020.

De esta forma, la institución estima que el colapso de la actividad económica mundial en 2020 fue ligeramente menos grave de lo que en un principio se había proyectado, debido principalmente a que la contracción de las economías avanzadas fue algo menos pronunciada de lo previsto y a que la recuperación en China ha sido más sólida de lo esperado. En cambio, las perturbaciones de la actividad en la mayoría de los demás mercados emergentes y economías en desarrollo fueron más severas.

Fuentes: World Bank, El Economista, España, EFE