España, el último de los grandes en tener plan de vacunación

España, el último de los grandes en tener plan de vacunación

España es uno de los países más lentos en la preparación de la campaña de vacunación contra el Covid-19, según se desprende del informe State of the World, elaborado por la consultora Boston Consulting Group.

Según este análisis, de principios de diciembre, España carecía de una estrategia clara de vacunación frente a otros grandes Estados que ya habían definido durante los meses anteriores sus líneas de actuación, para el momento en el que estuvieran aprobados estos primeros medicamentos. A pesar de que el ministro de la cartera, aseguraba de que contaban con uno «de los mejores planes.»

Mientras gran parte del mundo ya tenía decididas las fórmulas y la población prioritaria a la que se le iba a administrar la vacuna, el Gobierno español sólo había producido una declaración del ministro de Sanidad, Salvador Illa, sobre una posible vacunación prioritaria.

España, el último de los grandes en tener plan de vacunación
Sanidad modificó su estrategia a los 15 días de presentarla (El gráfico es el publicado en página 6 de El Economista, España, edición del 06/01/2021)

Como contrapartioda, la Comisión Europea, había puesto ya sobre la mesa una serie de recomendaciones sobre los sectores de población que se deberían priorizar.

El Ministerio de Sanidad presentó la Estrategia de Vacunación española el 2 de diciembre, pero este documento sufriría una revisión el 18 de diciembre al considerar que el horizonte de la vacunación podía estar más cercano.

Esta actualización incluyó la información sobre los grupos a vacunar en la primera etapa de disponibilidad de vacunas y la información más relevante sobre vacunas publicada en revistas científicas. Aunque apenas dejaba un plazo de diez días para determinar la forma de llevarse a cabo estas vacunaciones.

El Gobierno publicó el mismo día 28 de diciembre -en el que se iniciaron las primeras vacunacionesuna web pensada para resolver con información oficial y actualizada las dudas de los ciudadanos sobre el antígeno.

BCG ya asegura en su informe que existían varios retos para la vacunación.

  • La desconfianza general en el desarrollo y el proceso de autorización
  • Las preocupaciones o confusión sobre el costo o cómo obtener una vacuna.
  • La incertidumbre sobre qué vacuna es recomendada para un individuo determinado.
  • El requisito de dos dosis para ciertas vacunas, con varias semanas de diferencia y los sentimientos generales contra la vacunación.

Según la consultora, el 47% de la población estaba dispuesto a vacunarse, pero la situación en España no era tan sencilla, según un estudio de Appinio, cuatro de cada 10 españoles no se vacunarían en 2021.

El Ministerio de Sanidad aseguró el pasado lunes que se habían administrado en España un total de 82.834 dosis, frente a las 718.515 dosis que había disponibles en nuestro país, apenas un 11%.

Esta situación supondría del orden del 0,18% de la población, lo que situaría a nuestro país como el noveno de Europa en porcentaje de personas vacunadas. España sería también el cuarto país por número de vacunas suministradas por detrás de Reino Unido, Alemania e Italia.

Andalucía, Canarias, Galicia y Asturias fueron las comunidades autónomas que han puesto un mayor número de vacunas, pero el inicio de este procedimiento también se produjo con retraso.

Pfizer España indicó el lunes 28 que su fábrica de Puurs (Bélgica) había sufrido el retraso de los envíos a ocho países europeos, incluido España, por un problema en el proceso de carga y envío, lo que retrasó el inicio del reparto hasta el 29 de diciembre.

Los envíos previstos de la vacuna de Pfizer/BioNtech llegaron tarde a Madrid, Barcelona y Vitoria, en primer lugar, y después a Valencia y Sevilla. Los aviones transportaban las 350.000 dosis que debían haberse entregado el lunes, es decir, prácticamente la mitad de la cantidad que tiene en estos momentos nuestro país.

El Ejército fue el encargado de llevar las vacunas a Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla, lo que supone que este retraso inicial no fue un problema para acelerar la puesta marcha vistos los datos de Canarias.