El Gobierno busca cumplir las metas con el FMI

El Gobierno busca cumplir las metas con el FMI

Lo dijo Batakis. Tras el cara a cara con Georgieva el lunes, tuvo una nueva reunión con el staff técnico del organismo

La ministra de Economía, Silvina Batakis, ratificó que Argentina cumplirá con las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

“Con el Fondo no hablamos de tocar las metas, sino cómo vamos a cumplir las metas”, dijo la titular del Palacio de Hacienda durante un contacto que mantuvo con la prensa en la Embajada de Argentina en Washington.

Tras su primer fogueo internacional, que incluyó entrevistas con funcionarios del Tesoro de EE.UU., el FMI y el Banco Mundial e inversores privados, Batakis realizó un balance de la actividad a la que consideró como “muy positiva”.

Ayer, tras el cara a cara con la búlgara Kristalina Georgieva el lunes, Batakis tuvo una nueva reunión con el staff técnico, que no estaba originalmente prevista, antes del desayuno que tuvo con inversores.

Por el FMI participaron la directora Adjunta del Departamento Hemisferio Occidental, Julie Kozack, y Luis Cubbedu, encargado del caso argentino.

En la charla con la prensa, Batakis ratificó que las medidas que lleva adelante “cuentan con respaldo de la coalición de gobierno”.

Inversores

“Estamos en una coalición de gobierno, y dentro de esa coalición de gobierno hay un equilibrio, que efectivamente está dado para que podamos implementar estas medidas y vayamos desarrollando todo lo que tenemos que desarrollar para calmar un poco a la economía argentina”, dijo. Fue el mensaje que repitió ante los inversores.

Luego de mantener un contacto con la prensa, Batakis y la viceministra Karina Angeletti, partieron hacia el aeropuerto, para emprender el regreso a Argentina, escoltadas por el embajador en Washington DC, Jorge Argüello.

Predispuesta

Durante el encuentro en la sede diplomática, a escasos metros de Dupont Circle, se realizaron preguntas de todo tipo sobre la economía, tanto en el plano real como financiero, y la ministra respondió con solvencia cada una de ellas

En cuanto al tema precios, Batakis dijo a los inversores que “es un problema serio” pero señaló que “está en niveles controlables”.

La opinión de la funcionaria es que en el mundo la inflación se triplicó, y en algunos casos se cuadruplicó y, si bien en Argentina “eso por suerte no pasó, aunque no es un consuelo, somos conscientes de que hay que ir bajándola”.

Durante su exposición, Batakis se comprometió ante los inversores a generar mayores instrumentos en pesos.

“En Argentina hay pesos pero no hay muchos instrumentos. Planeamos la diversificación” de esas herramientas, enfatizó la ministra.

Esa diversificación incluiría poder contar con tasas positivas junto con la creación de nuevos instrumentos, que guiarán el corredor de tasas, dijo, dando cuenta de la colaboración que existe entre el Banco Central y Economía.

La importaciones

En cuanto a la reunión con las empresas, los ejecutivos manifestaron preocupación por la limitación de importaciones que les frena las cadena de valor a sus proveedores en el país.

Fuentes que estuvieron presentes en la reunión indicaron que el Gobierno busco llevar tranquilidad al remarcar que las medidas son temporarias y se reducirían cuando cedan las importaciones de energía por el invierno.

Batakis les explicó a los asistentes que calcula que en 2022, a pesar del déficit energético, la Balanza comercial resultará positiva, con una proyección de alrededor de US$ 5.000 millones, la mitad que en 2021 debido a los altos precios de los productos energéticos.

Un inversor que participó del encuentro dijo a Télam que Batakis “no le escapó a ninguna respuesta, y se mostró muy decidida a cumplir con bajar el déficit fiscal”.

Los directivos que participaron en el desayuno pertenecen a Bank of America, Santander Investment Securities, Goldman Sachs & Co. Barclays Capital, Citibank, Fintech, Gramercy, Bracebridge, AllianceBernstein, Stone Harbor, Citadel, Wellington, Goldentree, AdCap, Kirkoswald, Eurasia Group, VR Capital, Capital Strategies y Paloma Partners.

Fuente: El Economista