Un juste en las partidas marca una reducción en el gasto social

Un juste en las partidas marca una reducción en el gasto social

Un juste en las partidas marca una reducción en el gasto social

El déficit primario de abril fue de 0,2% del PBI, unos $55.270 millones para la administración pública nacional, un número relativamente bajo para tiempos pandémicos y que implica una fuerte caída interanual. El ajuste estuvo en partidas sociales, salarios estatales y transferencias a las provincias.

Abril continuó siendo un mes de disciplina fiscal, con un ajuste real importante sobre las partidas de jubilaciones, salarios de estatales, prestaciones sociales y transferencias a las provincias. Aunque el gran protagonista, por su ausencia, sigue siendo el IFE. En la otra vereda, en cambio, el gasto en obra pública siguió creciendo con fuerza. Con todo, el déficit primario de abril fue de 0,2% del PBI; es decir, $55.270 millones para la administración pública nacional, un número relativamente menor para tiempos pandémicos y que implica una fuerte caída con respecto al mismo mes del 2020.

Informe OPC

Los números fueron publicados por la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC) y corresponden a las cuentas devengadas de la administración pública. La Secretaría de Hacienda va a publicar el 20 de mayo su dato oficial del base caja del sector público no financiero. Si bien ambas cifras no tienen por qué coincidir, ya que se trata de cuentas distintas, la visión de la dinámica de los números de la OPC suele dejar entrever algo de lo que sucedió en el resultado fiscal de Hacienda.

Se siguen destacando los ajustes en jubilaciones y en salarios de estatales. Aunque el gran número del recorte lo muestra el fin del IFE. El informe de la OPC destacó: “Se observa que, si bien existe un constante crecimiento del gasto asociado a las medidas implementadas durante el año en curso (aumento 50% Tarjeta Alimentar en febrero, $15.000 a AUH AMBA, Repro II a sectores afectados), el nivel de ejecución totalizó $53.503 millones en abril de 2021, resultando un 61,7% inferior en términos reales al registrado en igual mes del 2020 ($95.591 millones), fundamentalmente debido a la eliminación del IFE”.

En cuanto a las jubilaciones, que vienen ajustando en forma sostenida durante 2021, más allá de que la nueva fórmula tiene la virtud de moderar las abultadas caídas que hubiese generado la anterior, señaló: “Las transferencias en jubilaciones y pensiones presentaron una caída real del 13,4% anual, explicada mayoritariamente por la brecha entre la actualización de los haberes ajustados según la nueva fórmula de movilidad y la tasa de inflación”. Es decir, la nueva fórmula ajusta menos que la de Cambiemos, pero ajusta.

En cuanto a los salarios de los estatales, la contracción real respecto del mismo mes del año pasado fue de 12,9%.

Siguen protagonizando un fuerte recorte en los gastos de funcionamiento con paritarias que no alcanzan a igualar ni acercarse a la inflación, con un importante impacto para la economía en términos de consumo. En esa cuenta también aparecen las compras del Estado, que crecieron 5,4% real, de la mano las vacunas contra el Covid-19.

En cambio, el gasto en obra pública, con el que el Gobierno busca traccionar la economía, continúa creciendo con vigor. La suba fue de 65,7% real interanual. Si se compara con abril del 2019, sigue observándose una mejora real de 101,8%, ya que en aquel entonces se habían gastado $11.898 millones y ahora alcanza los $51.524 millones.

Una clave en la mejora del déficit fiscal fueron los ingresos tributarios, que se habían desplomado en abril del 2020 y se recuperaron con fuerza en el 2021. Crecieron 44,9% real e hicieron la gran diferencia.

El déficit primario de $55.000 millones implicó una contracción nominal grande frente al rojo de $260.000 millones que publicó la OPC para abril del 2020, sin contar las transferencias del BCRA al Tesoro, que batieron el récord durante ese mes. Según el “base caja” del sector público no financiero, publicado por Hacienda, el déficit primario había sido de $230.000 millones ese mes.

Fuente: El Economista