«Recrear la confianza en el país»
Empresarios de AEA reunidos con Martín Guzmán manifestaron la necesidad de “Recrear la confianza en el país”. La reunión duró una hora y media. Y giro en torno a previsibilidad, impuestos e inversión.
En un encuentro que buscó mantener el bajo perfil, Martín Guzmán recibió ayer por la tarde a los varios de los principales empresarios nucleados en la Asociación Empresaria Argentina (AEA). Durante la conversación le plantearon al ministro la necesidad de recrear la confianza en el país para que haya inversiones y así generar puestos de trabajo. En una sala cercana al despacho del ministro en el quinto piso del Palacio de Hacienda, Guzmán los esperó acompañado por el sacerdote jesuita Rodrigo Zarazaga, presidente del Centro de Investigación y Acción Social (CIAS) y uno de los impulsores de la gesta solidaria durante la pandemia que se conoció como Seamos uno.
No era la primera vez que Zarazaga asistía a un encuentro entre empresarios y Guzmán: a fines de mayo hubo una reunión virtual para intercambiar puntos de vista sobre la renegociación de la deuda.
Por la AEA participaron en el encuentro de ayer su presidente Jaime Campos; Paolo Rocca (Techint), Héctor Magnetto (Clarín), Alfredo Coto (Supermercados COTO), Carlos Miguens (Grupo Miguens), Federico Braun (La Anónima), Alberto Grimoldi (Grimoldi), Enrique Cristofani (Santander) y María Luisa Macchiavello (Droguería del Sud).
Calificaron la Reunión como franca
Los empresarios se llevaron una buena impresión del ministro y calificaron de “reunión franca” al intercambio que mantuvieron por una hora y media con Guzmán.
“Hablen cada uno de ustedes, los quiero escuchar”, se oyó decir al ministro en el inicio, cuando los mercados ya habían cerrado y la brecha cambiaria había mostrado otro leve recorte hasta el 85%.
Según pudo reconstruir Clarín, la exposición del ministro incluyó el sentido de la política económica, el acuerdo con los acreedores privados de deuda (que logró un 99% de adhesión) y la elaboración del presupuesto plurianual (que en las próximas semanas será enviado al Congreso).
También Guzmán comentó sobre las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional para refinanciar el préstamo anterior por US$ 44.000 millones y que el Gobierno entiende que daría un horizonte más claro. Y que en el Ministerio de Economía están trabajando para intentar cambiar las expectativas en el mercado y dar más certidumbre en una economía con cierta ansiedad.
A su turno, los empresarios plantearon al ministro la importancia del respeto de los contratos y de las reglas de juego claras como condición necesaria para el desarrollo de los negocios. Mencionaron además la relevancia de ir hacia un equilibrio fiscal de manera gradual, una vez superada la pandemia del coronavirus, concepto en el que Guzmán coincidió, y sobre la importancia de las inversiones para el país.
Debe haber una baja gradual de los impuestos distorsivos
En ese sentido, señalaron que para que se den las inversiones debe haber una baja gradual de los impuestos distorsivos, y el debate que hoy hay en el Congreso sobre el impuesto a las grandes fortunas sobrevoló la sala. Uno de ellos señaló que si la presión impositiva es récord no queda espacio para invertir y generar empleo.
Para los empresarios de la AEA, hay que recobrar la confianza en el país para que se den las inversiones que interpretan son el único motor para la generación de empleo genuino.
Aprovecharon el encuentro también para manifestar la dificultad que llevó a las firmas para cumplir con sus compromisos uno de los aspectos del reforzamiento del cepo cambiario: el que obliga a las empresas a refinanciar el 60% de sus deuda en dólares y que da la posibilidad de acceder al tipo de cambio oficial para pagar el 40% restante.
Con todas las cartas sobre la mesa, los empresarios resaltaron que para reconstruir la confianza hace falta un acuerdo político y económico entre todos los sectores de la economía, que incluya tanto a las empresas, a los sindicatos, a las organizaciones sociales y al Gobierno.
Se habló de la dificultad de las empresas para cumplir con sus deudas en el exterior.
Fuente: Clarín
