Nuevas reglas para ensamblar autos en Argentina beneficia a Toyota, Adefa y marcas china

Régimen IKD

Beneficiará a Toyota y a las terminales de Adefa. Pero también a las marcas chinas, firmas de motos y camiones. Análisis del decreto de Massa.

Con algunos días de demora con respecto a lo prometido, el ministro de Economía, Sergio Massa, firmó hoy en el Boletín Oficial el Decreto 310/2023 que crea el nuevo «Régimen de importación de vehículos incompletos, totalmente desarmados». Es una traducción del régimen conocido como Sistema IKD (Incompletely Knocked Down), que ya se viene aplicando desde hace algunos años en la industria de las motos y cuya vigencia acaba de prorrogar Massa hasta el año 2028.

En el caso del nuevo decreto, el Régimen IKD abarca a todo tipo de vehículos, que pueden ser motos, autos, camiones o vehículos comerciales. Toyota fue la primera marca en anunciar el ensamblado de un vehículo con esta modalidad. Incluso antes de que se publicara el decreto, la marca japonesa confirmó que en enero de 2024 montará los furgones Hiace Furgón L2H2 y Hiace Commuter en un galpón que está construyendo junto a la fábrica de las Hilux y SW4, en Zárate .

¿Cuáles serán las condiciones para poder adherirse al Régimen IKD y cuáles serán las principales marcas beneficiadas con este decreto? El análisis completo se reproduce a continuación.

Definición de IKD

Los «vehículos incompletos, totalmente desarmados» (IKD) llegarán a la Argentina desarmados, dentro de cajas y con casi la totalidad de sus componentes listos para montar, pero con la ausencia de algunas pocas piezas. Las partes faltantes serán provistas por autopartistas locales. Pueden ser componentes eléctricos, plásticos, ruedas, filtros u otra pieza de escasa complejidad. El decreto de Massa obliga a las empresas que adhieran a este régimen a ir aumentando de a poco el porcentaje de componentes locales. Arrancarán con sólo el 10% en los primeros dos años, deberán llegar al 12% en el cuarto año y la máxima exigencia del 15% se alcanzará en el quinto año. Es un porcentaje de integración muy bajo con respecto a lo que tienen otros vehículos fabricados de manera convencional en la Argentina, como los Toyota Hilux, Ford Ranger y Fiat Cronos, que aseguran alcanzar el 60% de piezas locales.

Las fábricas beneficiadas

¿Quiénes podrán montar vehículos en Formato IKD en Argentina? El decreto lo define en apenas una línea: serán aquellas empresas que cuenten «con un establecimiento industrial destinado a la fabricación de vehículos, radicado en la República Argentina». Esto beneficiará a las terminales agrupadas en Adefa (General Motors, Ford, Honda, Iveco, Mercedes-Benz, Nissan-Renault, Scania, Stellantis, Toyota y Volkswagen). Pero también incluirá a las fábricas de otros tipos de vehículos, que no forman parte de esa entidad. Acá se incluyen empresas brasileñas y marcas chinas, que ya cuentan con «establecimientos industriales destinados a la fabricación de vehículos» en el país: Agrale, Ralitor (Shineray, DFM y JMC), Corven (Zanella y Foton), Car One (Changan). El decreto no aclara qué tipo de fabricación de vehículos deben estar ya produciendo en esos establecimientos, lo cual también le abre la puerta a ensambladoras de motos como el Grupo Simpa y Grupo Iraola, por poner algunos ejemplos.

Tipos de vehículos

El decreto es bastante vago a la hora de definir el tipo de vehículo que podrá adherir a este régimen. No se mencionan categorías de homologación, segmentos, cantidad de ruedas o tipos de motorización. Sólo se aclara que «la Autoridad de Aplicación verificará la condición de inexistencia de producción, en el ámbito de la República Argentina, de vehículos de la misma categoría, denominación y características generales». Esto significa que un vehículo que ya se produce en la Argentina con el sistema convencional de producción no podrá interrumpirse para adaptarse al Régimen IKD.

Los plazos

Las empresas interesadas en adherir al Régimen IKD tendrán tiempo para presentar sus proyectos hasta el 31 de diciembre de 2029. Los beneficios tendrán una validez de cinco años, con la posibilidad de extenderlo por un año más. En la práctica, se podrán ensamblar vehículos bajo el Régimen IKD hasta el año 2035.

Beneficios para la importación

Al igual que ya ocurre con las motos, los vehículos ensamblados con el Régimen IKD podrán importar los kits desarmados con un beneficios arancelarios. Los kits procedentes extrazona (por fuera del Mercosur) pagarán el 14% de impuesto aduanero, en lugar del 35% que abonan los autos importados extrazona ya terminados (CBU, Completely Built Up).

Beneficios para la exportación

Los productos ensamblados en la argentina bajo el Régimen IKD podrán ser exportados con las mismas condiciones que cualquier vehículos fabricados convencionalmente en la Argentina. Esto permitirá generar el ingreso de divisas para el fabricante y estos vehículos IKD sumarán puntos para el «incremental de exportaciones», que le permite a los fabricantes pagar menos impuestos cuanto más cantidad de vehículos exporten.

Conclusión

El Régimen IKD que Sergio Massa presentó en Toyota establece un completo cambio de reglas para la industria automotriz argentina. Cancela décadas de discursos sobre «sustitución de importaciones» y «fomento de la industria nacional» para adoptar un sistema de ensamblado que suelen utilizar países menos industrializados y sin grandes fábricas de vehículos. Además, premia con beneficios de importación y exportación a vehículos que tendrán la mayoría de sus componentes fabricados fuera del país. Es decir, contradice al llamado «Régimen de Desarrollo y Fortalecimiento del Autopartismo Argentino», que el propio Massa ponderó un día después del anuncio en Toyota: fue durante el comienzo de producción local de la Ford Ranger.

De esta manera, el Régimen IKD premiará con menos impuestos a las fábricas que realicen menores inversiones en el país. El caso de la Toyota Hiace y la Ford Ranger son emblemáticos. Toyota invertirá 50 millones de dólares para el ensamblado IKD de la Hiace en Zárate. Ford desembolsó 660 millones de dólares para estampar las carrocerías y montar hasta los motores de la Ranger en Pacheco. El Régimen IKD parece la fórmula perfecta para aumentar el déficit en la balanza comercial, que arrastra desde hace años al sector automotor argentino.

Además, distorsionará la competencia:

La Hiace armada en Zárate tendrá los mismos beneficios de exportación y peleará en el mercado en igualdad de condiciones con la Mercedes-Benz Sprinter fabricada en Virrey del Pino.

Las contradicciones de este nuevo régimen sólo se pueden analizar en el marco de dos situaciones de la coyuntura: beneficiar a un grupo de empresas (incluyendo a representantes de marcas chinas) y anunciar «proyectos industriales» en medio de la campaña electoral. Como en el caso la extensión del Régimen IKD para las motos, que Massa anunció días atrás hasta el 2028, el dato relevante de este decreto es que el nuevo Régimen IKD extendido a todo tipo de vehículos será una mochila de mayor déficit que pesará sobre otros gobiernos: el decreto de Massa establece que su vigencia se extenderá incluso hasta el año 2035.

Fuente: Motor 1