La CGT negocia el posible otorgamiento de una suma fija
Gremios apuntan a Alberto y los Gordos por frenar la suma fija y esperan un guiño de Massa
En el Frente Sindical y la Corriente Federal miran de reojo el cambio de postura de la cúpula cegetista. «Es necesario que el Presidente tome la decisión, Néstor lo hizo», apuran.
En las últimas horas, desde la conducción de la CGT dieron cuenta de conversaciones con Sergio Massa para analizar el posible otorgamiento de una suma fija. Así lo confirmó el triunviro Andrés Rodríguez (UPCN) que, de todas formas, aclaró que el bono a negociar con el ministro de Economía apunta a trabajadores de actividades con un piso salarial «muy bajo».
En el Frente Sindical y la Corriente Federal (expresiones cegetistas que vienen impulsando la suma fija desde que se aceleró la estampida inflacionaria) mantienen sus reservas sobre el tenor y los avances de esas negociaciones, a la vez que esperan una señal «concreta» de Massa sobre el tema. En ese sentido, cuestionan al sector de los Gordos (con Héctor Daer a la cabeza) por «planchar» la discusión durante los últimos meses y ven en la ministra de Trabajo Kelly Olmos como uno de los principales «obstáculos» para lograr una medida que sea «contundente» y no un mero «parche».
Suma adicional
Que se establezca como política de Estado «una suma adicional a los salarios libremente negociados en paritarias, permanente y actualizable» es el reclamo que la Corriente Federal reflotó con fuerza desde abril pasado. En ese sector de la CGT confluyen los gremios más cercanos al kirchnerismo, entre ellos Curtidores (referenciado con el actual ministro de Trabajo bonaerense Walter Correa), La Bancaria y la CTA de Yasky y Baradel. Desde ahí presentaron este lunes la mesa sindical que promueve la reelección de Kicillof y que, este miércoles, se reúne en Smata para definir los movimientos de cara al 25 de mayo.
Voces encuadradas en ese espacio consideran que el mensaje de Máximo Kirchner el último sábado en el congreso del PJ bonaerense en La Matanza «preparó el terreno» para «empujar» la apertura de un margen de negociación con el tigrense. Detrás de Máximo en aquel acto estaban numerosas figuras sindicales afines, entre ellas el metalúrgico y secretario de Interior de la CGT, Abel Furlán.
Dos días después, la porción de la cúpula cegetista más cercana a Massa, abrió la posibilidad de discutir la suma fija, a diferencia del rechazo que había manifestado previamente, por considerar que esa medida podía erosionar el rol sindical a la hora de negociar salario en paritarias. Pero Andrés Rodríguez aclaró que sólo sería para sectores de muy bajos ingresos o la economía informal.
Entre esos sectores de más bajos ingresos, aparecen los municipales que, de todas formas, están impulsando por estos días una ley de paritaria municipal que contemple un «fondo compensador» para aquellos casos donde el salario no alcance la canasta básica.
Cautela sobre los avances
En tanto, en el Frente Sindical que lidera Pablo Moyano, también mantienen cautela sobre los avances de estas negociaciones e insisten en la amplitud del alcance de una suma fija: «Tiene que ser abarcativo para aquellos que no llegan a la canasta básica. No podemos tener trabajadores asalariados dentro de la línea de pobreza y los tenemos», dijo la secretaria General de las y los Trabajadores Viales, Graciela Aleña. Y agregó: «Tal vez no sea nuestro caso ni el de otros gremios, pero tenemos que tener empatía hacia todos los trabajadores que la están pasando mal».
Es necesario que el Presidente tome la decisión, más que él ha vivido el gobierno de Néstor donde hubo que hacerlo
En esa línea, se dirigió a Alberto: «Es necesario que el Presidente tome la decisión, más que él ha vivido el gobierno de Néstor donde hubo que hacerlo por una necesidad de nuestra gente y lo hizo. Éste también sería el caso, no veo por qué no podrían hacerlo ahora. Se hace necesario».
Otras voces del Frente Sindical deslizan en voz baja que aún no fueron notificados de las conversaciones con Massa, y señalaron que hay sectores dentro del Gobierno «que están poniendo palos en la rueda» para que avance una medida de ese tenor. A quien apuntan directamente es a la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, como una de las principales opositoras a un bono de esas características.
Fuente: La Política Online
