Freno a la economía: Pocos sectores escaparán a la tendencia del debilitamiento

Freno a la economía: Pocos sectores escaparán a la tendencia del debilitamiento

Cómo se están desempeñando los sectores productivos en la normalización pospandemia.

En 2022, la actividad económica tuvo un crecimiento de 5,2% básicamente impulsada por el crecimiento de sectores como la producción automotriz, la minería, la producción de agroquímicos, de petróleo, el comercio, restaurantes y hoteles, la construcción y la industria.

Sin embargo, las primeras señales de desaceleración que empezaron a notarse en los últimos cuatro meses (como consecuencia de la sequía y de la falta de dólares para la importación) preanuncian que esos sectores ya no tendrán el mismo vigor este año. Por lo pronto, se estima que la evolución del Producto Bruto (PBI) será del 0% al 1%. ¿Cuál es la perspectiva para los distintos sectores para lo que resta del año?

Según la consultora Abeceb, la producción automotriz volverá a crecer aunque a menor ritmo, frente a una demanda interna acotado por la escasez de modelos importados, la pérdida de poder adquisitivo y mercados en Latinoamérica que desacelerarían su ritmo de expansión.

En tanto, la producción de aparatos domésticos y electrónica de consumo va a mostrar un incremento (estimado en 7,6%) porque los consumidores van a seguir «aprovechando las promociones y los programas de facilidades de pago (planes Ahora)».

Pocos sectores

Según la consultora, «unos pocos sectores escaparán a la tendencia del debilitamiento», como los servicios del conocimiento frente a una mayor demanda por la digitalización de la economía. El crecimiento de la producción de gas rondará el 6% y la de petróleo crudo crecerá un 13% debido a una mayor exportación y alta productividad en Vaca Muerta. Y la construcción que cerró el 2022 con una mejora del 3,5%, desaceleraría al 3%.

Finalmente, el sector de alimentos y bebidas crecería un 3,9%, con un giro hacia las segundas marcas debido a una caída del salario real, señala la economista Soledad Perez Duhalde.

Santiago Manoukian, economista de Ecolatina, explica que la industria -en general- está impactada por la escasez de divisas y por la sequia que va a disminuir el flujo de divisas hacia el agro. «Se trata del principal sector superavitario y tiene que estar financiando el déficit comercial del resto de los sectores, como la industria y del comercio», apunta. Según el analista, se prevé una caída del 25% al 30% en el volumen del tándem trigo maiz y soja que va a afectar también las actividades conexas.

Petroleo, gas, minería y servicios

«La industria va a estar influenciada por ese contexto. Por otro lado, los sectores del petroleo, gas, minería y servicios van a tener que traccionar la actividad económica frente a la moderación del resto», resume.

«Respecto de la pre-pandemia, el sector de hoteles y restaurantes sigue con un nivel de actividad 13% inferior, mientras que «otras actividades de servicios» (comunitarios, personales, etc) está 10% abajo, es decir que aún tienen terreno por recuperar», señaló el experto de Ecolatina. Por eso, seguramente la apuesta del Gobierno estará en sectores que requieren de una menor cantidad de importaciones para su funcionamiento», opina.

Entre los sectores que arrancaron sin estímulo este año está la industria maderera. Desde la Federación de la industria maderera (FAIMA) que acaba de hacer un diagnostico de la situación del sector, su titular, Roman Queiroz describió que: “actualmente, en el mercado hay más oferta que demanda».

“Hay aserraderos medianos y chicos en Misiones, Corrientes y parte de Entre Ríos que están con problemas graves. Algunos están parados y no han vuelto a arrancar tras la parada de fin de año, están sobre stockeados y ya hay plantas paradas en Misiones. Si no encontramos soluciones en el corto plazo va a empezar a haber despidos”, indicó Queiroz.

Fuente: Clarín