El rojo primario se disparó en diciembre, el Gobierno apuntará a un ajuste de 5 puntos a lo largo del 2024

El rojo primario se disparó en diciembre, el Gobierno apuntará a un ajuste de 5 puntos a lo largo del 2024

Aunque el rojo primario del 2023 cerró en 3% del PBI,

Pese a que la nueva gestión aceleró el recorte del gasto, los ingresos cayeron aun más y el rojo de diciembre fue de 1,1% del PBI. Por la recesión, se espera que esa dinámica genere dificultades a lo largo del 2024. Las jubilaciones y la obra pública sufrieron caídas extraordinarias

El nuevo Gobierno aceleró levemente el ajuste fiscal durante diciembre, aunque el rojo primario del 2023 cerró en 3% del PBI, tal como preveía el presidente Javier Milei. En diciembre, el déficit fue de $1,9 billones, lo que equivalió en un solo mes al 1,1% del PBI. La meta fiscal estuvo lejos de cumplirse y el Gobierno apuntará a un ajuste del rojo de 5 puntos del PBI a lo largo del 2024, para terminar con un superávit del 2% del PBI y llegar al equilibrio en el déficit financiero. .

El desafío será lograrlo en plena recesión, con el impacto que eso generará en la recaudación tributaria. En diciembre, el Gobierno hizo un ajuste de 6,2% real interanual en el gasto primario, lo que implicó una aceleración respecto al 4,8% de noviembre, el último de la gestión anterior. Pero los ingresos cayeron 19,6% real y el déficit se disparó. 

La Secretaría de Hacienda publicó acerca del resultado fiscal de diciembre:

«El gasto primario registró una caída de 6,2% interanual en términos reales. Esta dinámica fue consecuencia de una ejecución prudente de las erogaciones discrecionales desde la asunción de la nueva administración, a lo que se sumó una fuerte contracción real en las prestaciones sociales, explicada en gran medida por el rezago de la fórmula de movilidad».

Efectivamente, con un salto del gasto primario, en términos nominales, del 192%, y con una inflación del 211,4%, la variación real del gasto fue una caída de 6,2% real. En noviembre, el último mes de la gestión de Sergio Massa frente al Ministerio de Economía, la caída real del gasto había sido de 4,8%. 

La sequía

En rigor, a lo largo del 2023 el recorte del gasto fue casi constante, aunque la sequía golpeó a los ingresos, que terminaron cayendo incluso más que las erogaciones, lo que desembocó en el rojo primario del 3% del PBI con el que cerró el año y que obligó al Gobierno actual a pedir un waiver y renegociar un nuevo sendero para las cuentas públicas. Sin embargo, en un mes como agosto del 2023, por caso, e incluso en pleno mes de las PASO, el gasto había caído 8,5% real interanual durante la gestión Massa. Es decir que el primero de la gestión Milei no fue el de más recortes en el año.

En diciembre lo que justificó el grueso de la contracción del gasto fue en primer lugar la obra pública, que sufrió una baja extraordinaria del 40,1% real tras una suba nominal de solo 86,4% y un IPC de 211,4%. Y en segundo lugar entraron las jubilaciones y la asignación universal, por el efecto de la inflación del 25,5% y una fórmula que ajustó en base al IPC de un trimestre antes: con una suba nominal de 140,9%, las prestaciones sociales sufrieron una baja real de 22,6%. 

Fuente: BAE