El impacto de la sequía sobre la recaudación deja el déficit fiscal sobre los $500.000 millones

El impacto de la sequía sobre la recaudación deja el déficit fiscal sobre los $500.000 millones

Los menores ingresos tributarios, pero sobre todo los fondos destinados a distintos subsidios, provocaron un deterioro de las cuentas.

El déficit fiscal alcanzó los $511.532,7 millones en septiembre último, como consecuencia del fortísimo impacto que tuvo la sequía sobre los ingresos por retenciones del agro, lo cual ratifica el rol clave que cumple este sector en la Argentina.

Según informó esta noche el Ministerio de Economía, en septiembre además el sector público registró un déficit primario de $380.473,4 millones.

Con esos números, el déficit en los primeros nueve meses del año, antes del pago de deudas, superó los $2,63 billones.

El déficit fiscal alcanzó los $511.532,7 millones en septiembre último, como consecuencia del fortísimo impacto que tuvo la sequía sobre los ingresos por
retenciones del agro, lo cual ratifica el rol clave que cumple este sector en la Argentina.

Los egresos del Fisco también se dispararon como consecuencia de los bonos otorgados por el ministro de Economía, Sergio Massa, lo que se conoció como el «plan Platita», en medio de la puja electoral.

El Palacio de Hacienda explicó que, en el marco de este escenario restrictivo, se «priorizaron en septiembre las asignaciones destinadas a proteger a los sectores más vulnerables, reforzando diversos programas sociales, la educación, y programas de inversión pública con énfasis en la infraestructura».

El gasto primario acumula al tercer trimestre de caída

De acuerdo con lo explicado por Hacienda, «la moderación en la ejecución del resto de los gastos presupuestados logró compensar el impacto negativo en el resultado primario provocado por la caída en los ingresos. En este sentido, la variación interanual real del gasto primario acumula al tercer trimestre una caída interanual de -5,1%».

Durante septiembre, los ingresos totales alcanzaron los $3,20 billones, con una suba del 95,4% anual, que quedó muy por debajo de la inflación.

Esos ingresos estuvieron «afectados por el desempeño de los derechos de exportación, que sufrieron el impacto de la sequía, y por una alta base de comparación producto de la liquidación registrada a partir del Programa de Incremento Exportador en septiembre de 2022».

Por su parte, dentro de los tributos ligados a la actividad económica interna, se destacó la recaudación correspondiente al IVA neto de reintegros (+$485.807 millones; +194,6% interanual).

Adicionalmente, los derechos de exportación cayeron nominalmente por quinta vez en el año (-65,5% interanual). Acumulan al tercer trimestre una caída del 21,7%.

En tanto, los derechos de importación crecieron +137% (+$72.175,5 millones).

El Ministerio de Economía decidió compensar la caída en los ingresos impulsando la ampliación del impuesto PAIS (Decreto 377/2023), cuya recaudación se incrementó más de cinco veces respecto de septiembre de 2022.

Los ingresos correspondientes a los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social se incrementaron en $480.108,8 millones (+125,7%), producto de la suba del salario medio del sector privado y sector público.

A su vez, las erogaciones primarias del Sector Público Nacional alcanzaron en septiembre los $3.590.371,0 millones (+129,8%), priorizando los refuerzos a sectores vulnerables, la política educativa, la Seguridad Social y la infraestructura.

En lo que se refiere a las prestaciones de la Seguridad Social, las mismas ascendieron a $1.186.004,3 millones (+111,8 % i.a.). «Esta dinámica se explica por el impacto de la fórmula de movilidad vigente (Ley N° 27.609), que arroja incrementos conforme crece la recaudación y los salarios».

Este concepto no incluye el refuerzo de ingresos previsionales (inversión de más de $170.000 millones) en jubilaciones y pensiones. De incluirse los refuerzos otorgados, el crecimiento interanual de las prestaciones asciende a +132,2%.

Por otra parte, la erogación asociada a remuneraciones alcanzó los $437.156,1 millones (+146,1%) producto de los incrementos otorgados en el marco de los acuerdos salariales alcanzados y el bono a trabajadores estatales (Decreto 438/2023).

Las transferencias corrientes alcanzaron los $1.357.472,5 millones (+136,8%). Aquellas correspondientes al sector privado presentaron un crecimiento de +$559.020,6 millones (+122%).

Entre ellas, se destaca el refuerzo de ingresos otorgado a jubilados y pensionados. Además, incluye a los programas de Política Alimentaria (+152,8% i.a) y el Programa Nacional de Inclusión Socio-productiva y desarrollo local (+147,7% i.a).

Al mismo tiempo, los subsidios económicos crecieron en +$46.621,3 millones (+21,3% i.a.). Dentro de este último concepto es importante señalar que en el período enero-septiembre, los destinados a la energía acumulan una variación interanual real del -25,0%, mientras que los asociados al transporte alcanzan una variación interanual real de -15,5%.

Por su parte, las transferencias corrientes al sector público realizadas en septiembre alcanzaron los $338.529,9 millones (+$224.797,4 millones; +197,7% i.a.), entre las que se destaca las realizadas por el Ministerio de Educación a las provincias en el marco del FONID (+$17.667,8 millones; +174,9% i.a), como así también aquellas correspondientes al Ministerio de Salud (+$7.585,4 millones).

El gasto de capital alcanzó los $377.367,7 millones (+150,2% i.a.). Mientras que el crecimiento de la Inversión Real Directa (+$111.579,8 millones; +139,3%) fue impulsada por inversiones realizadas por AYSA, ENARSA y ARSAT, las Transferencias de Capital registraron un crecimiento de +124,5% (+$84.801,7 millones), entre las que se destaca el incremento de las transferencias realizadas por los Fondos Fiduciarios del PROCREAR, Hídrico y Energías Renovables.

Fuente: NA