El BCRA desaceleró fuertemente el ritmo de devaluación diaria

El BCRA desaceleró fuertemente el ritmo de devaluación diaria

La autoridad monetaria desaceleró fuertemente el ritmo de devaluación diaria, ya que medido punta a punta descendió desde una tasa nominal anual de 71,8% en diciembre a 66,9% en enero. Así surge de un informe de Portfolio Personal Inversiones (PPI) que detalló que esto equivale a una baja desde el 5,9% al 5,5% mensual. “Luego de haber bajado desde una TNA de 80,3% o 6,6% mensual en noviembre, el BCRA desaceleró el crawling peg por segundo mes consecutivo, hecho que no ocurría desde la previa de las elecciones de 2021”, explicaron.

“Consideramos que la nueva estrategia tiene fines puramente electorales dado que se busca contener la inflación de bienes transables, mientras que a su vez se quiere impulsar artificialmente el alicaído salario real. Cabe recordar que la apreciación artificial real del peso suele iniciarse entre ocho y nueve meses antes de las PASO. Nuestra hipótesis se confirma en caso de que el IPC de enero sea 5,6% como espera el REM, ya que habría viajado levemente por encima del ritmo de devaluación (-0,2% real)”, apuntó PPI.

El director de la consultora Analytica, Claudio Caprarulo, sostuvo que la estrategia oficial responde a lo que pueda suceder con el IPC y advirtió por la escasez de divisas. “Vemos que el BCRA trata de ajustar el tipo de cambio respecto a lo que suceda con la inflación. Seguramente no vamos a ver una apreciación porque faltan reservas para sostener un proceso así. Puede haber un impacto en la brecha si el mercado lo ve poco sostenible y se disparan los dólares paralelos, obligando a un salto mayor del oficial”, precisó el economista.

No convalidar un retraso

Para el director de la consultora Sarandí, Sergio Chouza, no hay un intento por utilizar esta herramienta como ancla mientras que recordó que el FMI representa un limitante en el eventual caso de querer hacerlo. “El objetivo de la política monetaria es no convalidar un retraso pero tampoco una devaluación. Proyectamos que el crawling peg siempre se va a mover en línea con la inflación esperada, que es del 60% anual en el Presupuesto 2023. Es una referencia para un segmento de productos que no es la totalidad, aunque tampoco es algo menor, porque hubo algunos que buscaron referenciarse en los paralelos por cobertura. No vemos que pueda ser un ancla porque hay un impedimento institucional, que es el acuerdo con el Fondo”, explicó.

Precios justos

Lo que suceda con el ritmo de devaluación será clave en la nueva etapa de Precios Justos, la cual el Ministerio de Economía espera lanzar en los próximos días y estará vigente hasta junio. Esta vez se alinearán todos los acuerdos que se firmaron en los últimos meses y habrá algunos rubros que se subirán al programa oficial: consumo masivo, insumos difundidos, combustible, textil, electrónica, construcción, canasta escolar, entre otros. La zanahoria que utilizó el equipo económico es la promesa de una mayor facilidad para acceder al mercado de cambios para pagar importaciones al dólar oficial, aunque las empresas señalan que no fue a gran escala.

Si bien habrá productos que permanecerán con precios congelados, las pautas de incrementos para los que estén por fuera de ese esquema bajarán del 4% al 3% o 3,2% mensual. Esto último está incluso por debajo de la proyección de inflación anual del 60% que plasmó Economía en el Presupuesto 2023 después del 94,8% en 2022. El gesto a las empresas es que la devaluación del dólar oficial llegue a esos niveles para que los insumos importados al tipo de cambio oficial se muevan en línea con el programa de precios y no representen un golpe a la rentabilidad de las compañías.