Economía: se licuaron los salarios y los analistas anticipan una caída del 6% en tres meses

Economía: se licuaron los salarios y los analistas anticipan una caída del 6%  en tres meses

La alta inflación, con salarios que se licuaron provocó que la gente gastara menos. Hay al menos 20 indicadores de actividad económica en rojo.

Por el plan de ajuste y el shock inflacionario, los economistas ya empezaron a notar señales de que lo que podría ser el inicio de una nueva recesión y para el primer trimestre esperan una caída del producto de hasta el 6% interanual, el mayor desplome desde el tercer trimestre del 2020 cuando la economía cayó 10% por la parálisis de la actividad por la pandemia y las restricciones.

Después de ser electo presidente, Javier Milei anticipó en noviembre que iban a venir «seis meses muy duros». La actividad ya estaba virtualmente estancada y afectada por la sequía, pero luego vino la devaluación de diciembre, el fin de los acuerdos de precios y una nueva ola de aumentos que llevaron la inflación en diciembre al récord del 25,5%, sin mayores medidas para recomponer ingresos.

En ese marco, al menos 20 indicadores se colorearon de rojo en los últimos meses, mostrando una retracción del consumo, actividad, faena vacuna, importaciones, venta de nafta, consumo de electricidad, escrituras en la Ciudad y préstamos al sector privado. Ahora, se sumaron los datos de la industria y la construcción, con derrumbes del 12,2% y 12,8% interanual en diciembre (ver más aparte).

La contracción del consumo se empieza a ver

Las ventas de supermercados y mayoristas de noviembre caen 7,5% y 11,3% mensual. Diciembre y enero vienen peor. Los números no dejan lugar a dudas: ya estamos transitando la recesión. Aunque era algo que veníamos anticipando, no por ello deja de ser impactante», señala un informe de Econviews, la consultora de Miguel Kiguel.

En enero, se encendió otro alerta con la caída del 6% interanual en la recaudación, traccionada por la sensible disminución de impuestos relacionados con la actividad y Ganancias, si bien atenuada por mejoras en los impuestos de comercio exterior debido a la devaluación y el aumento de alícuotas. «La recaudación adelanta una fuerte recesión», estimó Martín Polo, jefe de estrategia de Cohen.

Para EcoGo, los últimos datos anticipan un primer trimestre con una caída del 4,8% respecto al trimestre anterior en la serie desestacionalizada y una baja del 6% interanual, muy similar a lo que espera Econviews. «Del dato de recaudación se desprende que la caída en los salarios es fuerte y eso se traduce en una demanda muy afectada», explicó Lucio Garay Méndez, de EcoGo.

Con paritarias que no llegan a empatar la inflación, los salarios formales con aportes a la seguridad social recibieron un nuevo mazazo en diciembre y cayeron casi 14% interanual en términos reales. «En moneda constante, significa volver a salarios de julio de 2005, la mayor caída real interanual desde marzo de 2003 post-salida convertibilidad», dijo el economista Salvador Vitelli.

La recesión no golpeó aún al empleo

En el último informe del staff del Fondo Monetario, el Gobierno reconoció que la pobreza ya se ubica alrededor del 50%, casi 10 puntos arriba respecto del segundo trimestre del 2023 y un nivel que no se veía desde hace 20 años. Ese indicador no es más alto porque la recesión no golpeó aún al empleo, aunque ya hay suspensiones en algunas terminales automotrices y despidos en la construcción.

Para el FMI, la economía se mueve hacia una «estanflación», con un IPC que se mantendría en 25% en enero y recién empezaría a desacelerar por la caída de la demanda, por lo que proyecta una caída del PBI del 2,8% en 2024. El diagnóstico coincide con el del gobierno, donde creen que el salto inflacionario «no se puede trasladar a precios» y aguardan una recesión en regla.

Javier Milei se propuso reducir el déficit fiscal heredado de 6 puntos del PBI con un ajuste inédito para bajar la inflación, pero el descongelamiento de precios y la baja de tasas de los plazo fijo provocó una licuación de los pesos. Ese proceso se profundizará con la suba de tarifas en marcha y si hay una nueva devaluación o salto cambiario, como espera el mercado.

En ese contexto, la economía podría caer 4,1% interanual en el primer trimestre, según Francisco Ritorto

«La corrección de precios relativos deteriora los ingresos reales y afecta fuertemente el consumo, sobre todo en el primer trimestre. Si empezamos a ver el esfuerzo fiscal pretendido por el gobierno, el impulso fiscal se vuelve limitado», señaló el economista de ACM.

Se considera recesión dos trimestres consecutivos de caída. Así, después de un cuarto trimestre probablemente negativo en 2023 (el dato aún no se conoce), los seis meses se cumplirían en marzo. «Prevemos una caída del 5,3% en el primer trimestre y una baja interanual en todos los trimestres, fuerte contracción del consumo y el gasto público», señaló Claudio Caprarulo, economista de Analytica.

Fuente: Clarín