Zichert , del CELAI: Crisis argentina ¿la historia se repite?

Zichert , del CELAI: Crisis argentina ¿la historia se repite?

“Quizá la más grande lección de la historia es que nadie aprendió las lecciones de la historia.”    

Aldous Huxley, escritor inglés nacido en 1894
Crisis argentina ¿la historia se repite?

Por Nicolás Zichert – Director Institucional del Centro Latinoamericano de Inversiones (CELAI)

Para entender un poco más, sería necesario remontarnos (por lo menos) al periodo de 1983-2001 de vida política y económica por lo que difícilmente nos tocó atravesar.

Raúl Alfonsín, 10 de diciembre de 1983 (“Padre de la Democracia”)

                Con Él, la reivindicación de la política (dejando atrás más de 7 largos años totalmente oscuros) Argentina daba una nueva muestra, en la que nuestro amigo Aldous H. y su famosa frase podían no estar en lo cierto políticamente hablando.

                La situación económica que debía afrontar el gobierno y América Latina no era para nada favorable, estábamos en los inicios de la famosa “Década Perdida”. La deuda externa argentina se incrementó de 7875 millones de dólares al finalizar el año 1975 a 45087 millones de dólares para fines del 1983, con un índice de pobreza rondando el 21%. La primera etapa de gobierno de Alfonsín, la podemos ubicar en el fortalecimiento de las Instituciones, Con una democracia donde se come, se educa y se cura.”

                A finales del 1984 la INFLACIÓN había alcanzado un 624% anual y así comenzaron dos planes económicos que el gobierno implementó en los años 1985 y 1988.

                · Plan Austral: Consistió en primer lugar en la creación de una nueva moneda y en segundo, en un congelamiento de precios, funcionando medianamente aceptable, acompañado por el resultado de las elecciones parlamentarias donde el radicalismo fue el claro ganador.

                · Plan Primavera: Nació en octubre del año 1988 y consistió en un acuerdo entre la Cámara Argentina de Comercio (CAC) y la Unión Industrial Argentina (UIA) con el fin de frenar el aumento de precios por el que atravesaba nuestro país; Cabe recordar que 6 meses atrás habíamos entrado en una moratoria (DEFAULT) por no poder hacer frente al pago de la deuda externa.

Carlos Saúl Menem, 8 de julio de 1989 (segundo período hiperinflacionario)

El Plan Bonex consistió en la confiscación de los plazos fijos a cambio de bonos en dólares a largo plazo, plan que ayudó a desacelerar la inflación alrededor del 5% mensual para el último trimestre del año. El año 1991 nos trajo la ley de convertibilidad fijando el tipo de cambio de 10000 australes a 1 dólar estadounidense para luego, en 1992 tener el famoso “1 a 1”, (Medida que hasta ese momento fue la más acertada económicamente hablando, la cual imposibilitaba al Banco Central a realizar una EMISIÓN DESCONTROLADA, manteniendo la misma cantidad de dólares de reserva que pesos en la calle.)

Fernando De la Rúa, 10 de diciembre de 1999 (el regreso del Radicalismo)

Con un déficit fiscal por los aires, una deuda externa que ya estaba en 145000 millones de dólares y con vencimientos para el año 2000 de aproximadamente 25000 millones de dólares y, como todos conocemos, la situación económica no mejoró.

En el año 2001, el riesgo país alcanzó los 1859 puntos (el más alto del mundo), casi 5 millones de desempleados, el PBI per cápita bajó un 10%, caída brusca de los depósitos en pesos (540 millones aproximadamente) y divisas que se “fugaban”, entre otros factores dieron como resultado el decreto 1570/2001 (coronando un proceso de CRISIS y DEFAULT más grande de un país en la historia).

Éste fue el quiebre más importante que vivimos como país en todos los órdenes posibles, habiendo tocado fondo transformándose en un futuro totalmente negro.

Año 2020: 19 años después pareciera resurgir

Con el inicio de una nueva crisis que comenzó el 28 de diciembre del 2017, bajo el mando del expresidente Mauricio Macri, que se extiende hasta la presidencia de Alberto Fernández, las palabras FMI, EMISIÓN, CEPO, INFLACIÓN, DEFAULT, RIESGO PAÍS, etc. están más latentes que nunca.

Las prácticas económicas del pasado (no exitosas) serían las mismas que se utilizaron y utilizan hasta el día de hoy, (a mi entender) sólo han sido “maquilladas” por el signo político de turno.

La mirada frente a la economía pareciera no ser muy diferente a la de años anteriores dejando la sensación, que Argentina vuelve a repetir recetas erróneas llevándolas hasta el límite, al punto de ser insostenibles… explotar económicamente por los aires, barajar y dar de nuevo.

La realidad nos muestra qué estamos cerca de llegar a la explosión nuevamente, imaginando por el momento que estamos lejos de barajar y dar de nuevo.

Lo que nos separa del DEFAULT del 2001, es el COVID-19, esta pandemia está haciendo destrozos en la salud de las personas y en las economías de los países de todo el mundo. Lo que nos depara el futuro en el corto y largo plazo es incierto como la erradicación del virus, lo que, si está claro, es que si seguimos cometiendo los mismos errores dentro de unos años estaremos parados frente a similares problemáticas, tratando de buscar las mismas recetas que nos llevaron en un principio a nuestra situación actual (y las anteriores).