Videollamadas y reuniones virtuales, la actividad del Congreso

Videollamadas y reuniones virtuales, la actividad del Congreso

Daniel Arroyo (Desarrollo Social) y Ginés González García (Salud) dieron informes a los diputados en forma remota. Gestionan que exponga el jefe de Gabinete.


Tras la extensión de la cuarentena y en medio del debate por los recortes de sueldos, el Congreso se reactivó esta semana, con muchos límites, mediante el funcionamiento de comisiones virtuales dedicadas, exclusivamente, a debatir la situación de la pandemia con la exposición de ministros nacionales de distintas áreas.
Ayer en Diputados, el titular de la cartera de Salud, Ginés González García, y su par de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, brindaron informes por videollamada a la comisión de Acción Social y Salud. Lo mismo que hizo el lunes el ministro Nicolás Trotta frente a la comisión de Educación.

Mientras, el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, gestiona la posibilidad de convocar a Santiago Cafiero para que brinde su primer informe de gestión como jefe de Gabinete; un reclamo que había planteado el jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, Mario Negri.

En el Senado, por su parte, la comisión de Trabajo se reunirá por primera vez en forma remota mañana para recibir al ministro de ese sector, Claudio Moroni, después del decreto presidencial que suspendió los despidos por 60 días.

Frente a los los legisladores de la comisión de Acción Social y Salud – presidida por el diputado del Frente de Todos y médico, Pablo Yedlin- el ministro de Salud recogió el guante sobre la polémica por la cantidad de reactivos.

Confirmó la compra de «medio millón de reactivos» y aseguró que en 10 días llegarán al país 200 mil. «Tenemos muchos y vamos a seguir teniendo», aseguró.

El funcionario, a su vez, consideró que «es inexorable que haya transmisión comunitaria» de coronavirus. «Va a pasar, lo que tenemos que hacer es regularla», apuntó y adelantó que el Ejecutivo emitirá un DNU para «poner como interés publico a todo el recurso sanitario de la Argentina».

La falta de respiradores fue el tema más repetido en las preguntas de los diputados. Ginés aseguró que hay 8.500 camas, entre públicas y privadas, equipadas con respirador (aclaró que suelen estar ocupadas, pero por la suspensión de cirugías programadas y baja de accidentes ya están disponibles el 50%) y que se incrementarán 1.500 más.

Además, reiteró que se prohibió la exportación de respiradores a los fabricantes, que se los asistió para duplicar la capacidad de producción y que la concentración de las compras la hace Nación.

La charla se extendió en buen clima y agradecimientos de todo el arco opositor. La más dura fue la diputada del PRO, Carmen Polledo, que le pidió detalles sobre las entregas de reactivos por zona, cantidad de testeos, y proyecciones de casos reales. Aunque, cerró diciéndole: «Cuídese ministro, lo necesitamos».

Antes que Ginés expuso el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo. Informó que la cifra de personas que asiste a comedores pasó de 8 millones -antes de la pandemia- a 11 millones y que en los barrios vulnerables, donde la cuarentena resulta imposible, el objetivo es «lograr el menor movimiento posible».

«No es lo mismo el aislamiento en un departamento o una casa que en los barrios donde se vive con hacinamiento», apuntó Arroyo.
Diputados ya venía aceitando el sistema remoto a través de las reuniones entre los jefes de bloques con Massa, quien desde que se concretó la cuarentena buscó mostrar al Parlamento activo e incluso intentó, hasta último momento, que el congelamiento de alquileres que terminó decretando el presidente Alberto Fernández se tratara en una sesión presencial, o virtual. Sin embargo, las diferencias dentro del propio oficialismo y con la presidenta del Senado, Cristina Kirchner, terminaron de congelar las posibilidades.

La Cámara alta no volvió a tener actividad desde la sanción de la reforma de las jubilaciones de privilegio, a principio de mes.

Fuente: Clarín