Vía libre a las corresponsalías bancarias, con menos impuestos
En noviembre del año pasado, el Banco Central (BCRA) publicó la normativa que impulsaba la creación de las corresponsalías bancarias. A la iniciativa que no obtuvo demasiada trascendencia hace siete meses atrás, se le sumó este lunes, un decreto del presidente Mauricio Macri, por el que se elimina el impuesto a débitos y créditos para este tipo de agencias.
Es decir que cualquier comercio, desde una ferretería, una estación de servicio y hasta una farmacia, podrá ofrecer servicios bancarios como por ejemplo abrir una cuenta bancaria, suscribir a un plazo fijo, realizar sus pagos y obtener préstamos, en lugares donde habitualmente llevan a cabo otras actividades cotidianas.
Las corresponsalías están motivadas en la campaña de inclusión financiera que lleva adelante el BCRA, «a través de favorecer a quienes viven lejos de sucursales bancarias. En este sentido, el BCRA ya había habilitado el retiro de efectivo en supermercados y otros comercios.
Sin embargo, el decreto del Poder Ejecutivo, es la clave que le daría nuevo impulso a la propuesta. La firma del Ejecutivo modifica un artículo de la Ley de Competitividad, sancionada en 2001, donde se establecía un impuesto a los movimientos realizados por «débitos y créditos».
Los porcentajes que cobra el Estado, por cada débito o crédito en cuenta corriente, son del 0,6% sobre lo que se deposita y el 0,6% sobre lo que se cobra, con algunas exenciones (haberes, jubilados, operaciones inmobiliarias). Su alcance también fue modificado por la Reforma Tributaria.
Ahora, el decreto exime expresamente «del Impuesto sobre los Créditos y Débitos en Cuentas Bancarias y Otras Operatorias, a las cuentas utilizadas en forma exclusiva por las agencias complementarias de servicios financieros respecto de las operaciones inherentes a esa actividad».
Si bien los bancos cuentan con el visto bueno del BCRA, para llevar su oferta de productos y servicios a lugares donde se realizan otras actividades comerciales, todavía ninguna entidad ha anunciado o registrado en la autoridad monetaria su propia corresponsalía.
Más allá del interés particular de cada una de las entidades de ampliar su área de influencia, sin necesidad de abrir una sucursal propia, las corresponsalías bancarias también interesan a empresas privadas de otros rubros, que ven en esta forma de atención una manera de diversificar su negocio.
